Cruzando El Puente
Por
Tony Alamo
Los espíritus de los santos son controlados por los santos.1 "Los espíritus de los profetas están sujetos a los profetas" (1 Co. 14:32).2
Jesús, al hablar de hoy en día, de una edad que comenzó con Juan el Bautista y que continúa hasta ahora, dijo "Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los Cielos [el reino espiritual] sufre violencia [autocontrol espiritualmente violento de uno mismo], y los [espiritualmente] violentos lo arrebatan."3 Los espiritualmente violentos toman al reino de los Cielos con fuerza y violencia espiritual, no parcial y pasivamente como la mayoría de los que hoy en día profesan ser "Cristianos." 4
El Espíritu Santo, a través del profeta Daniel, habló en respecto a los últimos días, los días en que estamos viviendo, diciendo "Recibirán el reino los santos del Altísimo, y poseerán el reino hasta el siglo."5 El verdadero santo se da cuenta del sumo regalo que Dios le ha dado. Por lo tanto, él arrebatará el reino de los Cielos y todo lo que está dentro de ello con anhelo, haciendo todo en su poder para continuar poseyendo esta increíble perla de gran precio por siempre jamás. El rechazará violentamente cualquier cosa satánica que sea condenada por la Palabra de Dios.6
Tenemos que estar conscientes del valor de nuestro premio como lo es un hombre que halla "un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo."7 Otra vez, el recibir el reino de los Cielos es tan gozoso y excitante para un verdadero Cristiano como la experiencia de un comerciante que buscó "buenas perlas, que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió TODO lo que tenía [abandonó su vida anterior], y la compró."8
Nadie puede abrumar a alguien que tiene fe en Dios y fe en el nombre de Jesús, porque nada puede abrumar a Dios.9 Dios divulgó la clase de Dios que El es en la persona de Jesucristo.10 El es la Palabra que se convirtió en un hombre, moró entre la humanidad,11 y nos demostró que nada podría abrumarlo a El o a nosotros cuando El está morando en nosotros por el Espíritu Santo.12 El es el mismo que en el principio respiró en las ventanas de la nariz del hombre "aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente."13 El es el que le dijo a Nicodemo que tenía que "nacer de nuevo" del Espíritu.14 El dijo que el viento sopla dondequiera que le complace. Usted oye su sonido pero no puede decir de dónde viene o para dónde va. También es así con todos los que son nacidos del Espíritu.15 Este es el mismo Jesús que respiró sobre Sus discípulos y dijo, "Recibid el Espíritu Santo."16 Las Palabras de Cristo son el mismo aliento de Dios. La vida que tenemos es el aliento de Dios. Cada aliento que tomamos en nuestros cuerpos es vida de Dios.
Jesús dijo, "Yo
pongo Mi vida, para volverla a tomar. Nadie Me la quita, sino que Yo de Mi
Mismo la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar."17
Jesús es la sabiduría y el poder de Dios.18
Sin Cristo, Dios el Padre no tendría ningún poder o sabiduría.
Jesús le dijo a María, "Yo soy la resurrección."19
Jesús es el Espíritu Santo, la esencia de la vida.20
Jesús dijo, "Confiad, Yo [la Palabra] he vencido al mundo."21
Jesús declaró, "Las Palabras que Yo os he hablado son Espíritu
y son vida [el mismo aliento de Dios]."22
Con fe en el gran poder de Dios en nosotros por el Espíritu Santo,
podemos tomar el reino de los Cielos con la grande fuerza de Dios, violentamente
rechazando toda doctrina falsa y cualquiera otra cosa que esté en contra
de la Palabra de Dios.23 Si podemos
conducir a los líderes seculares y al mismo mundo lejos de su mentalidad
incorrecta que es totalmente contraria al interés de nuestro Señor
para la gente de este mundo que El creó.24
El Señor compensa a una persona según su justicia, según la limpieza espiritual de sus manos, y según cómo él guarda la Palabra de Dios.25 Con el misericordioso El se demostrará misericordioso, con el hombre justo El se demostrará justo. Con la persona que es pura El se demostrará puro; con el perverso El se demostrará desagradable.26 El Señor no varía de Su verdad en esto, porque en Su juicio El no respeta a individuos.27 El Señor ejecutará todos Sus juicios exquisitos con gran celo.28
El Señor regocija en Su juicio perfecto. Está escrito que el Señor regocijó sobre Israel para hacer lo bueno, y multiplicarlos. Así también el Señor le declaró a Moisés que El regocijaría sobre Israel para destruirlos y traerlos a nada si no guardaban Sus mandamientos.29 Si Dios le haría esto a Su propio pueblo escogido por pecar, ¿qué piensa usted que le haría El a cada otra nación del mundo si lo desobedecen? ¿No puede ver ante sus propios ojos las muchas plagas alrededor del mundo, las muchas maldiciones de Dios hoy en día?30 ¿Está usted tan ciego que no puede ver que ya no hay ninguna paz en el mundo, ninguna gran alegría en nadie menos en aquellos de nosotros que conocemos a Cristo como nuestro Señor, Salvador y Librador?31 El Señor declaró que El nos arrancaría de la tierra, justamente como declaró que le haría (y sí le hizo) a los judíos dondequiera que trataban de poseer la tierra.32 El Señor declaró que a los que no destruiría de esa manera, dispersaría entre toda la gente, "desde un extremo de la tierra hasta el otro extremo."33
El Dios poderoso que alcanzamos por Cristo demanda una relación receptiva.34 Esto es porque El ha prometido darle Su vida eterna a todos aquellos que le responden a El, según Su Palabra. "En lo cual [nosotros] os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es necesario, [tengamos] que ser afligidos en diversas pruebas, para que sometida a prueba [nuestra] fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo."35
Jesús declaró que El y Su Padre vivirán en nosotros si los dejamos entrar dentro de nosotros y hacer Su voluntad en nosotros por el Espíritu Santo, según el pacto Dios-humano.36 Aquellos que son verdaderamente salvos "alegráis con gozo inefable y glorioso" porque han recibido "el fin de [su] fe, que es la salvación de [sus] almas. Los profetas que profetizaron de la gracia destinada a vosotros, inquirieron y diligentemente indagaron acerca de esta salvación [de sus almas],"37 ambos porque creen la verdad y porque han "purificado [sus] almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor [el guardar los mandamientos de Dios] fraternal no fingido...siendo renacidos, no de simiente corruptible [doctrina falsa], sino de incorruptible [la verdad], por la Palabra de Dios que vive y permanece para siempre."38 El Espíritu de Dios nos da el poder de guardar los mandamientos de Dios, porque es Dios Mismo en nosotros.39 De esta manera, El puede respondernos con Sus bendiciones en vez de Sus maldiciones.40 Aquellos que son del Señor son "linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de Aquel que os llamó de las tinieblas a Su luz admirable [que es la Palabra de Dios]."41 Dios se declara ser una fuerza de destrucción hacia el desobediente.42
Aunque vivimos en épocas modernas, Dios nunca ha cambiado y nunca cambiará.43 El predijo de hoy hace millares de años.44 Su Palabra está tan abierta, clara, y nueva hoy como lo fue el día en que primero la habló.45 "El Cielo y la tierra pasarán, pero Mis Palabras no pasarán."46 Dios está tan vivo, activo y poderoso hoy, como lo ha sido a través de toda la historia y como lo será como lo será durante toda la eternidad.47 El siempre será el mismo Dios con los mismos juicios que no cambian.48
Por las varias experiencias sobrenaturales que he tenido de Dios, sé que la Biblia es verdad y que Dios se conforma a Su Palabra. Dios me ha dado visiones del Cielo y del Infierno. Sé que existen. Yo conozco la interpretación correcta de la Biblia. Cuando Dios nos unió a mi esposa Susan y a mí por visiones, Dios también jaló millones de preguntas fuera de mi corazón y vertió las respuestas dentro de mí. Fue en aquella ‘epoca que Dios me dio la interpretación verdadera de la Biblia. Cuando la leo, sé que lo que dice es la verdad. He sido dotado por Dios con el don de la interpretación verdadera de la Biblia. Nadie puede engañarme. La Biblia está abierta y clara. Es tan comprensible, clara y abierta para mí como mi conocimiento que el sol es más brillante que la luna.
Después de que fui salvo, el Dios viviente me amenazó con lanzarme al Infierno si no leía la Palabra y hacía lo que dice, justo como lo fueron todos los profetas y apóstoles, incluyendo Ezequiel 49 y el Apóstol Pablo.50 Si usted lee la Biblia, verá que El amenazó a cada profeta y a cada apóstol. El amenaza a cada persona en el mundo con Su Palabra.51 Por lo tanto, sé que no hay tal cosa como seguridad eterna.52 La única seguridad eterna que tenemos es si continuamos viviendo según Su voluntad, que significa no pecar más, no más doctrinas falsas, ninguna pereza, ninguna despreocupación, ninguna falta de celo, y no hacer cualquier otra cosa que no sea lo que Dios nos manda hacer.53
Es importante que la gente sepa la diferencia entre ser un pecador y pecar. Aunque jamás hayamos pecado o no, todos somos pecadores por la transgresión de Adán.54 El Apóstol Pablo nos habla de esta naturaleza Adánica y pecaminosa en el séptimo capítulo de los Romanos.55 Por eso es que 1 Juan declara, "Si alguno hubiere pecado [todos nacimos en pecado 56 ], abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo."57 También, si nos arrepentimos totalmente del pecado cometido en ignorancia, hay perdón para aquellos que se han entregado totalmente al Señor.58 El también declara en 1 Juan 1:8, "Si [los seres humanos] decimos que no tenemos pecado [ninguna naturaleza Adánica], nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros." Pablo declaró que él tiene que morir para librarse de su naturaleza pecaminosa Adánica. El también dijo que todos tenemos que morir para librarnos de nuestra naturaleza pecaminosa Adánica heredada para que podamos heredar vida eterna.59 Jesús tuvo que morir para librar al mundo de sus pecados anteriores y de todo referente a Adán.60 Nosotros tenemos que morir para poder ser librados de nuestra naturaleza pecaminosa y de nuestros pecados anteriores.61 Nuestro Señor Jesús dijo esta verdad con estas Palabras: "Si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto."62 Esto significa que primero tenemos que ser perdonados de nuestros pecados anteriores por ser lavados en la sangre de Cristo.63 Solamente la sangre de Cristo puede quitar nuestro pecado heredado de Adán así como los pecados que nosotros mismos hemos cometido.64 Cuando ocurre esto, El inmediatamente nos da vida eterna por la entrada de Su vida a nuestro espíritu muerto.65 Su Espíritu resucita nuestro espíritu muerto a Su nueva vida. En ese momento, se nos presenta la próxima fase de nuestra salvación. Nuestra naturaleza antigua y pecaminosa tiene que morir.66 La sangre de Cristo quita nuestros pecados, pero nuestra vieja naturaleza carnal no es eliminada por Su sangre.Solo es eliminada por nuestra muerte, que es el llevar la cruz.67
La Biblia dice que tenemos que morir en cuanto a nuestras viejas maneras.68 La muerte de nuestros cuerpos y la muerte de nuestras viejas maneras son dos cosas diferentes. La muerte de nuestros cuerpos es demasiado severa y demasiado abrumadora para que el mundo lo considere. Así como busca la gente un escape de la muerte de sus viejas maneras para que no puedan ser salvos, así también escapa la gente de la muerte de sus cuerpos, la cual tendrán que enfrentar algún día. Ellos hacen esto usando drogas, alcohol, y una multitud de otros mecanismos de escape, incluyendo una variedad de diversiones. La Biblia llama la muerte del no salvo "rey de los espantos."69 Verdaderamente lo es para los que no son salvos.
La profesión de la psicología así como las demandas de numerosas religiones falsas todas salieron del temor-de-cabra, de la muerte.70 La psicología, las religiones falsas, las drogas, el alcohol, distracciones y otras diversiones calman temporalmente los temores que tiene la gente a la muerte. Sin embargo, este monstruo tiene que ser enfrentado tarde o temprano según la Palabra de Dios. La práctica de la psicología, de la filosofía, de una religión falsa, o de cualquier otra diversión no le ayudarán al pecador ni cuando el ángel de la muerte le haga su visita inevitable, ni cuando esté parado como cabra condenada en su juicio ante Dios.71 Cada uno tiene que enfrentarlo. Cada uno tiene una cita con la muerte y el juicio.72 La muerte no romperá su cita con nadie, sino que estará allí para encontrarse con ellos en el tiempo designado. El no llegará ni un momento temprano ni un segundo tarde, ni usted tampoco. Seguramente usted ya sabe esto. ¿Cómo enfrenterá el fin de su vida? ¿Tendrá confianza como los Cristianos, o será como los que no son salvos, cobarde y aterrado?
Nuestro terror de la muerte de nuestros cuerpos es suprimida totalmente en Cristo.73 Jesús le dijo a María, "Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en Mí, aunque esté muerto, vivirá.Y todo aquel que vive y cree en Mí, no morirá eternamente."74 Esta escritura le da gran alegría a los que creen la Palabra de Dios, a las ovejas del Señor. Nosotros sabemos que aquellos de nosotros que somos Cristianos nunca moriremos ni pasaremos una eternidad en el Infierno. Pero tenemos que estar seguros que nuestras viejas maneras pecaminosas están verdaderamente muertas para que podamos ser Cristanos y afrontar la muerte con confianza, con felicidad y gran alegría.75
Las instrucciones de la Palabra de Dios dicen que la cruz sobre la cual Cristo tomó nuestros pecados ahora tiene que ser llevada por nosotros.76 Cristo nos dice, "Si alguno quiere venir en pos de Mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame."77 "El que no toma su cruz y sigue en pos de Mí, no es digno de Mí."78 Cristo está diciendo que aquellos que rehusarán poner a muerte sus viejas maneras y seguirlo en la nueva vida que El les ha dado, no son dignos de El, de Su paz, Su consuelo, Su confianza, Su resurrección, Sus bendiciones aquí en la tierra, ni del reino de los Cielos.79
Creyendo la Palabra de Dios, que dice que tenemos que morir con Cristo, es igual que nuestro reposo en Su crucifixión.80 Es decir, reposamos asegurados que ya no podemos vivir nuestra vieja vida de pecado porque Cristo es nuestra vida nuevamente resucitada.De tal modo, para pagarle nuestras deudas a la verdad, que es Cristo, voluntariamente y con confianza "somos sepultados [sumergidos en la verdad de Cristo] juntamente con El para muerte por [confianza siguiéndolo a El en] el bautismo [Su sepulcro insondable, Su muerte insondable, la muerte de nuestra vieja vida como pecador, y la muerte de nuestro pecar. Esta vieja vida es ansiosa y gozosamente dejada atrás porque tenemos confianza que Su Palabra es verdad y que Su resurrección a la vida también es verdad], a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva. Porque si fuimos plantados juntamente con El en la semejanza de Su muerte, así también lo seremos en la de Su resurrección [sin pecado; la vida de Cristo sin pecado]; sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con El, para que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado. Porque el que ha muerto, ha sido justificado del [cometer] pecado. Y si morimos con Cristo, creemos que también viviremos con El; sabiendo que Cristo, habiendo resucitado de los muertos, ya no muere; la muerte no se enseñorea mas de El."81 Jesús declaró, Yo soy "el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos."82
"Porque en cuanto murió, al pecado murió una vez por todas; mas en cuanto vive, para Dios vive. [Y cuando morimos con Cristo, morimos al pecado una vez y no podemos pecar más.83] Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro. No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, de modo que lo obedezcáis en sus concupiscencias; ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia. Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley [no bajo la pena de la ley, porque sus antiguos pecados han sido perdonados], sino bajo la gracia."84
Los ministros ya no están predicando el amor. La predicación de la verdad de la Palabra de Dios es el amor. Ellos están predicando la peor clase de odio jamás conocida. Están predicando que podemos pecar, y ni aún están tratando de dejar de predicar esa mentira. Como Jesús, los profetas, y los apóstoles, yo como otros santos quemo el mundo con la Palabra que ellos no soportan. Ellos no trataron a Jesús, ni a los profetas, ni a los apóstoles, ni a mí u otros santos como era debido. Ellos y yo los hemos amado y les hemos dicho la verdad. Quisieramos hacerlos sonreir, hacer los permanentemente felices. El Señor, los profetas, los apóstoles, yo mismo y los otros santos nunca los hemos decepcionado. Hemos llenado el mundo con amor y verdad, así que siempre permaneceremos. El Señor no quiere que usted pierda el tiempo con el mundo.85 El declara que El quiere que usted le pertenezca a El y solo a El.86 "¿Qué pues? ¿Pecaremos, porque no estamos bajo la [pena de la] ley [por nuestros viejos pecados], sino bajo la gracia [el poder de Dios]? En ninguna manera ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia?"87
El poder de Dios que vive en nosotros por fe en las Palabras de Cristo nos guarda del pecado.88 Gracia significa que somos dados una segunda oportunidad misericordiosa con el poder de Dios viviendo en nosotros. Tenemos el poder de Dios en nosotros para guardar la ley de la vida, la ley del Espíritu Santo.89 Somos dados un tiempo de gracia para caminar en el poder de Dios para que El pueda ver si guardaremos Sus mandamientos, dándole gloria a Dios no sólo por nuestras propias almas siendo restauradas sino restaurando vida en otros, permitiendo que Cristo predique la Palabra y que viva Su vida en nosotros para salvar a otros.90
Dios no tuvo que darnos éste poder misericordioso no merecido y el período de gracia. Es Su gran misericordia y paciencia que nos da esta segunda oportunidad de ser los hijos de Dios, permitiendo que tomemos el reino y lo poseemos por la fe en la Palabra de Dios, Su Hijo.91 Si no recibimos este amor de Dios sino juzgamos la Palabra de Dios como odio, no podemos entrar al Cielo. "Esperamos, según Sus promesas, Cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia [donde estaremos siempre felices y siempre sonrieremos]. Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por El sin mancha e irreprensibles, en paz."92 No hay otra manera de entrar al Cielo, y ningún otro amor que Cristo.93 Él declaró, "Yo soy el camino."94 Él también declaró, "Nadie viene al Padre, sino por Mí."95 Cualquier persona que intenta entrar al Cielo de cualquier otra manera, incluyendo pecando, es ladrón y salteador.96 Estas Palabras de Cristo eliminan todas las maneras falsas tales como religiones y doctrinas odiosas, falsas.
El misterio del poder de Dios es Cristo (con todo Su poder) que vive en nosotros.97 Este amor también fue dado al Apóstol Pablo. El funcionamiento eficaz de Su poder cariñoso nos da la victoria sobre Satanás así como el poder cariñoso para no pecar jamás.98 El secreto grande cariñoso de Dios, el cual se ha mantenido oculto de los mal informados, los ignorantes, las religiones falsas y odiosas, y los falsos Cristianos, es Cristo, Dios mismo, el cual vive, ama, y hace Sus obras maravillosas en nosotros, los santos verdaderos mientras que El cariñosa y misericordiosamente nos da Su dirección o poder.99 El misterio de Dios es "Cristo en vosotros, la esperanza de gloria, a quien anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre."100
Si los líderes insensatos del mundo fuesen convertidos a Cristo, ellos jamás actuarían al contrario de los intereses afectuosos de nuestro Señor para la gente que El creó en este mundo. Ellos permitirían que El pisara de nuevo esta tierra en virtud de que El usara sus cuerpos rendidos para Su obra.101 Entonces conducirían el mundo sensatamente, según la mente cariñosa de Cristo.102
El Espíritu Santo, como paloma, descendió sobre Jesús en Su bautismo.103 Así también en el principio del mundo el Espíritu Santo apareció como paloma, momentos antes de la creación de Dios.104 El Espíritu Santo, como paloma, asomó cariñosamente sobre las aguas cuando estaba listo para hacer el mundo como su nido, una creación adecuada para morar dentro ella. A través de la paloma gentil y aún fuerte de Dios105 El convirtió las aguas caos, desoladas y turbulentas, una oscuridad sin sol, sin luna y sin estrellas, en un paraíso maravilloso de fuerza, luz, y vida en la cual el hombre y el Espíritu Santo pudieran morar.106
Después de la caída del hombre, la paloma eterna de Dios comenzó cariñosamente a decirnos que entregaramos nuestras vidas caóticas, solitarias, turbulentas, obscuras y vacías de la vida y la luz de Dios para que El pueda hacer Su nido dentro de nosotros, fortaleciéndonos y haciéndonos grande a través de Cristo.107 El Espíritu Santo de Dios es Cristo.108 Él es nuestra única vida eterna, nuestra única manera de tomar el reino de Dios y de poseerlo.
La cruz es el poderoso acto del amor de Dios que nos transfiere de Adán a Cristo.109 Tomar la cruz significa recibir el amor de Dios. Poderosamente nos negamos a vivir la vida contraria a la vida del amor que Cristo en la Biblia nos dice que vivamos, viviendo por Su Palabra misericordiosa que es Espíritu y vida del amor de Dios.110 Esto nos dirige cariñosamente en todas las cosas que lo complacen a El para que Su voluntad sea hecha, no la nuestra.111 La cruz es simplemente el Espíritu Santo viviendo en nosotros de modo que ya no seamos nosotros mismos solamente.112
Pablo dice, "Con Cristo [el Señor que llevó esa cruz inicialmente para mí] estoy juntamente crucificado [muerto en la cruz], y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí [debido al perdón de Cristo de mis viejos pecados y porque soy resucitado con Cristo en una nueva vida sin pecado, la vida de paloma poderosa y amor de Dios]; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios [la fe de Cristo, no la mía], el cual me amó y se entregó a Sí Mismo por mí."113
La cruz en la cual murió Cristo es el medio por la cual la Palabra, nuestro Dios termina nuestras viejas maneras.114 Trabaja poniendo a nuestro "viejo hombre" a un lado.115 Su resurrección fue el medio que El usó para transferir a cada uno de nosotros de Adán a Cristo, dándonos a cada uno que lo reciben todo lo necesario para nuestra vida eterna en el nuevo mundo de amor hermoso, brillante, y precioso que El hizo con Su plenitud, Su cuerpo y Su Iglesia.116 "Porque somos sepultados [cariñosamente] juntamente con El para muerte [de nuestras viejas maneras] por el bautismo."117 Ahora, por Su Espíritu Santo, podemos CRUZAR EL PUENTE de la muerte a la vida eterna y vivir según Su manera del amor verdadero.
La continuación de la obra de Dios es amor, realizada por el Espíritu Santo del Rey del Cielo obrando en nosotros. "Este es el amor a Dios, que guardemos Sus mandamientos."118 "Que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva."119
Si odiamos la instrucción cariñosa de nuestro Dios la Palabra para Su camino a la vida y a la vida eterna en el Cielo, habitaremos en la muerte eterna, que es momento por momento morir por siempre en los fuegos del Infierno.120 Es importante saber la verdadera personalidad de Dios. Será duro para la gente que ha sido enseñada incorrectamente creer lo que voy a decir ahora, pero la santa escritura apoya lo que estoy diciendo, probando que es verdad. La Palabra que es Dios declara que si odiamos el único camino cariñoso, derecho y estrecho al Cielo (y verdaderamente es muy cariñoso, recto, y estrecho),121 si odiamos esta luz clara a la gloria, la verdad, El nos enviará un poder engañoso para que creamos una mentira "por cuanto no [recibimos] el amor de la verdad [de la Palabra de Dios] para [que podamos] ser salvos."122 Este engaño enviado por Dios Mismo nos convencerá que tenemos razón y Dios es incorrecto. En otras palabras, que lo que dice Cristo, Dios que es la Palabra, es que El no sólo nos dejará creer esta mentira si no amamos Su verdad cariñosa, sino que El nos hará creer esta mentira (que tenemos razón y El es incorrecto), maldiciendo nuestras almas eternas por siempre.123
Es importante conocer la mente de nuestro Creador. Conocer la Palabra de Dios es conocer la mente de nuestro Creador, El quien creó todas las cosas. Las Palabras que escribo son directamente de Su mente cariñosa, Su Palabra cariñosa. El Espíritu Santo, hablando a través de Pablo, dijo "Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús."124 Si mantengo a mi Dios la Palabra en mi corazón, también tengo el reino del Cielo alojado con El en mi corazón. Esto significa que la vida que ahora vivo está en mi corazón.
Todo lo que Dios nos ha prometido debe ser tomado por tormenta, es decir, con todo nuestro corazón, nuestra alma, mente, y fuerza, según el primer mandamiento.125 El sabe que lo amamos si hacemos eso.126 Los que son fuertes en la fe (que no pueden ser abrumados) poderosamente lo claman para sí mismos con todas Sus promesas, Sus capacidades, y Su dirección.127 Cualquier doctrina falsa y odiosa tal como seguridad eterna o diciendo falsamente que no hay un Infierno será rechazada poderosa y violentamente por los santos de Dios.128 Jesús dijo, "Mis ovejas oyen Mi voz, y Yo las conozco, y Me siguen."129 "Mas al extraño NO seguirán, sino huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños."130 Esto es porque no son Palabras de Dios del amor, sino odiosas malas interpretaciones de la Palabra de Dios.131
La resurrección de Cristo nos lleva al reino de todo que pertenece a la naturaleza cariñosa de Cristo. Al morir Cristo en el Calvario en lugar de la humanidad, El destruyó cada cosa satánica y odiosa, incluyendo los pecados anteriores de cada persona, Satanás, la muerte, y el Infierno para aquellos que lo aceptan. La resurrección de Cristo es la nueva línea de comienzo de Dios en nuestras vidas. Es decir, somos nuevas criaturas nacidas y continuaremos siendo nuevas criaturas si continuamos llevando la cruz, que es simplemente permitiendo que la paloma santa de Dios anide dentro de nosotros si continuamos haciendo Su voluntad.132
Después de la resurrección gloriosa y de la ascensión de Cristo a Su trono en el Cielo, El pudo enviarse Sí Mismo por el Espíritu Santo en otros.133 "El reino de Dios no vendrá con advertencia," Jesús declaró.134 Jesús también dijo que el ojo humano no puede ver al Espíritu Santo porque El es como el viento, que podemos oír y sentir pero no ver.135 El Espíritu Santo vive dentro.136
Cuando estamos siguiendo a Cristo, llevando la cruz, significa que Cristo está viviendo en nosotros con Su Padre por el Espíritu.137 También significa que el reino del Cielo está vivo en nosotros en la tierra y que está cerca.138
Pablo declaró, "cada día muero."139 Esto significó que él se entregó a la muerte de la cruz, el Espíritu Santo, las instrucciones de Dios, diariamente. Él también dijo que "se renueva de día en día,"140 es decir, él fue dado su pan diario de la vida por el Espíritu Santo obrando directamente con él por el estudio de la Palabra, por oración, y guardando los mandamientos. Cristo en Su oración modelado nos dice que no oremos por la provisión de un año de pan diario, sino al contrario decir "El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy,"141 pidiendo nuestro alimento espiritual y carnal un día a la vez.142
Esto es para que no nos olvidemos de buscar a Dios para Su vida diaria y Su fuerza, que nos permitirá llevar la cruz día por día con El.
Jesús le dijo al Padre, "No se haga Mi voluntad, sino la Tuya."143 Lo qué Cristo está diciendo es que Su voluntad fue terminada totalmente mientras estaba aquí en la carne. Fue intercambiada por la voluntad del Padre. Nuestra naturaleza anterior tiene que ser suprimida diariamente.144
El Señor, por escritura, nos ordena a todos continuamente que nos neguemos como El. Esto significa que debemos olvidarnos y desatender nuestras propias preferencias.145Éste es el único plan dado a nosotros por nuestro Dios cariñoso para nuestra salvación; cualquier otro plan es odioso, irracional, y vacío de vida. Cristo no sólo se negó a Sí Mismo el día que lo crucificaron, sino que se negó Su vida entera.146 El, desde Su nacimiento, fue crucificado para hacer la voluntad del Padre solamente.147 Él fue fiel a ella a "muerte, y muerte de cruz."148 Este es nuestro ejemplo del tiempo de gracia dado a nosotros por Su amor, Su misericordia, Su bondad, y Su naturaleza paciente. Por lo tanto, nosotros que creemos en Dios la Palabra podemos superar totalmente el pecado inmediatamente, pero nuestro trabajo cariñoso del autoengaño tiene que continuar hasta el final de nuestras vidas.149 La Palabra de Dios dice, "Los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos."150 "Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne."151
Pues como el Padre estaba con Cristo por el Espíritu Santo, también tenemos el poder cariñoso de Dios morando en nosotros por el Espíritu Santo.152 Tenemos que aprender que por la fe hemos de estar continuamente enterados de que la Diedad habita en nosotros, como lo estaba Jesús.
Mientras que los mensajeros de Dios están procurando persuadir a cada uno en el mundo a que se apresuren al arca de la seguridad de Dios, que es Cristo, ya que la venida de Cristo está cerca,153 una inundación del odio malvado satánico lo está ahogando. Esta inundación satánica del mal y del odio le dice a aquellos que rechazan al Señor que murió por ellos "y...lavó [a ellos de sus] pecados con Su sangre"154 que no se preocupen de ello. Ellos odiosa y falsamente dicen "Cristo hace todo el trabajo así que usted no tiene que llevar la cruz," aunque Cristo dice que usted no es digno de El si usted no lo hace.155 Nuestra salvación inicial se da sin nuestros propios méritos. Nuestra salvación continuará si, como siervos de Dios, llevamos la cruz, caminamos en el Espíritu,156 no pecamos más,157 enseñamos, predicamos la Palabra,158 somos perfectos,159 y hacemos la "OBRA de evangelista"160 entre otras cosas. En el juicio de Dios nos juzgarán por nuestras OBRAS y nuestro mérito cuando nos pesen en las balanzas.161
Los diccionarios modernos de la Biblia y los seminarios teológicos enseñan algunas verdades, pero también enseñan suficiente falacías para ser juzgados heréticos por la Palabra de Dios.162 Esto es muy peligroso, porque es el odio de Satanás para usted. Jesús lo dijo.Él declaró, "Un poco de levadura leuda toda la masa."163 Un poco de herejía o un poco de veneno destruye el cuerpo y el alma entero. Un poco de herejía corrompe la doctrina cariñosa entera del Dios de amor. Herejías tal como que nosotros tenemos seguridad eterna, diciendo que no hay un Infierno, y diciendo que Dios ha cambiado a través de los años son mentiras evidentes, satánicas. Son el veneno más odioso jamás ideado por Satanás. Los diablillos de Satanás que difunden estas mentiras niegan a Dios la Palabra cariñosa que se hizo carne, murió, y vertió Su sangre para ellos. Ay a estos profetas falsos. Millones de la humanidad engañada del mundo son cubiertos por la inundación de estos engaños satánicos.164 El error se cree más fácilmente cuando está mezclado con un poco de la verdad. La verdad cubre la herejía, como veneno ocultado en vino dulce.
En los días de Noé, hubieron pocos que sobrevivieron. Solamente Noé y su familia caminaron la línea recta y estrecha de Dios. Solamente ocho sobrevivieron la tormenta mientras millones incontables, después de veinte siglos de tiempo, murieron debajo de las olas enfurecidas de la inundación terrible.165
¿Es su deseo ser un sobreviviente del fuego pronto por venir que consumirá todo los cielos y la tierra con los malvados que rechazaron a Dios? ¿Desea continuar ahogándose con los mil millones de hoy en día continuando la vida que usted está viviendo actualmente en el engaño de este mundo presente de oscuridad completa? Si éste es su deseo, usted es uno de muchos millones de gente insensata que cree que desafiará a la muerte cuando venga, desafiará al juicio de Dios de su alma por rechazarlo, y desafiará el ser echado al Infierno por el Dios Todopoderoso por su rechazo de El.166 Nadie puede desafiar a Dios, Su poder poderosa, ni Su juicio. Y nadie puede desafiar la muerte o el Infierno cuando vengan a ellos.167 Solamente los que han aceptado a Cristo como su vida escaparán la muerte y el Infierno, y gozarán un juicio y una eternidad felices.168
Si usted desea escapar los juicios terribles de Dios, y entrar en Cristo, el arca verdadero de Dios, usted tiene que abrir su corazón y dejar que Cristo con el Padre por el Espíritu Santo entre, como lo ha hecho cada uno que ha logrado vida eterna. Permita que Dios el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo anide profundamente en su espíritu para que usted pueda tener la vida eterna de Dios a través de Cristo en usted. La vida de Dios le permitirá pasar la eternidad en el reino del Cielo con El, los santos, y sus amados que se han ido con el Señor antes de usted, así como le permitirá resistir todas las tormentas de esta vida. Si usted desearía tomar el reino y poseerlo permanentemente, como los santos mencionados en el libro de Daniel, entonces dígale esta oración a Dios ahora mismo.
Oración
Mi Señor y mi Dios, ten misericordia de mi alma pecadora.1 Yo creo que Jesucristo es el Hijo del Dios Viviente.2 Creo que Él murió en la cruz y derramó Su preciosa sangre por el perdón de todos mis pecados. 3 Creo que Dios resucitó a Jesús de entre los muertos por el poder del Espíritu Santo4 y que Él está sentado a la mano derecha de Dios en este momento, escuchando mi confesión de pecado y esta oración. 5 Abro la puerta de mi corazón, y Te invito en mi corazón Señor Jesús. 6 Lava todos mis pecados sucios en la preciosa sangre que Tú derramaste por mí en la cruz del Calvario. 7 Tú no me rechazarás, Señor Jesús; Tú perdonarás mis pecados y salvarás mi alma. Lo sé porque Tu Palabra, así lo dice. 8 Tu Palabra dice que Tú no rechazarás a nadie, y eso me incluye a mí.9 Por eso, sé que me has escuchado, sé que me has contestado, y sé que soy salvo.Por eso, sé que me has escuchado, sé que me has contestado, y sé que soy salvo.10 Y Te doy gracias, Señor Jesús, por salvar mi alma, y Te mostraré mi agradecimiento haciendo como Tú mandas y no pecar más. 11
Usted acaba de completar el primer paso en una serie de cinco pasos que se requieren para recibir la salvación. Su segundo paso es negarse a sí mismo y aceptar la cruz cada día con el propósito de mortificarse, es decir, para darle muerte a su propia voluntad, a su ser autosuficiente, y al mundo con todos sus deseos. Todos estos tienen que ser bautizados en la muerte de Cristo. El tercer paso es su resurrección de la vida satánica de Adán a la vida libre de pecados de Cristo. El cuarto paso es su ascensión a una posición de autoridad para reinar por Dios en la tierra, y el quinto paso es reinar por Dios en la tierra hasta el fin con el propósito de traer el reino del Cielo a la tierra. Usted tiene que aprender la Palabra de Dios, luego someterse y hacer lo que la Palabra dice, para que la Iglesia y el mundo puedan ver pruebas de su sumisión a la Palabra de Dios, Su orden, y Su autoridad en usted y por usted.
Alabado sea el Señor. Que Dios lo recompense abundantemente.
Pastor Mundial Tony Alamo
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Usando la versión autorizada de King James [en inglés], la versión Reina-Valera [en español], y otros textos originales.
Notas del "Cruzando El Puente":vuelva arriba
1 Mt. 6:10, Ro. 12:1 vuelva
2 Jn. 4:34, 6:38, Ro. 8:1, He. 13:17, 1 P. 5:5 vuelva
3 Mt. 11:12, Pr. 28:1, Jl. 2:3-11 vuelva
4 Mt. 13:24-50, 18:23-35, 20:1-16, 22:2-14, cap. 25vuelva
5 Dn. 7:18, 22-27, Ap. 7:14-15, 14:1-3, 22:14 vuelva
6 Sal. 97:10, Ef. 5:11, 1 Ts. 5:22, 1 Co. 6:18, 10:14, 2 Ti. 2:22, Stg. 4:7vuelva
7 Mt. 13:44 vuelva
8 Mt. 13:44-46 vuelva
9 Dt. 3:24, 1 Cr. 29:11, 2 Cr. 16:9, Job 42:2, Sal. 33:9, Is. 40:12-31, Jer. 32:17, 27, Mt. 21:22, He. cap. 11, 1 Jn. 5:4 vuelva
10 Jn. 1:1, 3, 29, 34-36, 49, 3:35, 5:19, 10:27-30, 11:25, 14:6, 17:1-5, Hch. 10:38, 1 Co. 1:24, Ef. 1:19-23, 3:9, Col. 1:16-19, 2:9, He. 1:2-3, 7:25vuelva
11 Mt. 1:23, Lc. 1:30-35, Jn. 1:14, Ro. 1:3, 8:3, 9:5, Gá. 4:4, Fil. 2:7-8, He. 2:14-17, 10:5 vuelva
12 Dn. 2:44, Mt. 28:18, Jn. 16:33, Hch. 1:8, Ro. 8:37-39, Fil. 4:13 vuelva
13 Gn. 2:7 vuelva
14 Jn. 3:5-7 vuelva
15 Jn. 3:8 vuelva
16 Jn. 20:22 vuelva
17 Jn. 10:17-18 vuelva
18 1 Co. 1:24 vuelva
19 Jn. 11:25 vuelva
20 Jn. 14:6, 1 Jn. 5:7 vuelva
21 Jn. 16:33 vuelva
22 Jn. 6:63 vuelva
23 Ef. 6:16, 1 P. 1:3-7 vuelva
24 Mt. 24:14, Mr. 13:10, 1 Co. 1:21, 2:7-8, 2 Co. 4:3-7, Col. 1:25-28 vuelva
25 2 S. 22:25 vuelva
26 2 S. 22:26-28, Job 34:11, Sal. 62:12, Pr. 1:26, 11:31, Ez. 18:30, Gá. 6:7, Ef. 6:8-9, 2 Ts. 1:6, Stg. 4:8 vuelva
27 2 S. 14:14, 2 Cr. 19:7, Job 37:24, Hch. 10:34, Ro. 2:11, Ef. 6:9, Col. 3:25, 1 P. 1:17 vuelva
28 1 S. 2:10, 1 R. 8:32, Job 37:23, Is. 9:6-7, 28:17, 21-22, 30:18, 27, 30, 31:2, Sof. 3:5, Mal. 3:5, He. 10:30-31, 12:29, Jud. 3 Ap. 6:15-17, 16:5-7 vuelva
29 Dt. 28:63 vuelva
30 Mt. 24:7, Lc. 21:20-26 vuelva
31 Mt. 24:6, Ap. 6:4 vuelva
32 2 Cr. 7:19-20, Sal. 52:5-7, Jer. 45:4-5 vuelva
33 Dt. 28:64 vuelva
34 Sal. 145:18, Jn. 4:23-24, Ro. 12:9-21, Stg. 4:8, 1 Jn. 2:3 vuelva
35 1 P. 1:5-7 vuelva
36 Jer. 31:31,34, Dn. 9:4, Jn. 14:15, 23, Hch. 5:32, Gá. 2:20, 1 Co. 3:16-17, 2 Co. 6:16, He. 8:8, 10, 1 Jn. 2:3-5, 3:22-24, Ap. 3:20 vuelva
37 1 P. 1:8-10 vuelva
38 1 P. 1:22-23 vuelva
39 2 S. 22:23, Sal. 68:35, Hch. 1:8, 1 Jn. 5:3-5 vuelva
40 Lv. 26:3-33, Dt. 4:40, 5:29, 7:9-15, 11:26-28, 15:4-5, cap.28, 30:15-20, Pr. 3:1-2, Zac. 4:6 Ap. 22:7, 14 vuelva
41 1 P. 2:9 vuelva
42 2 S. 22:27 vuelva
43 Sal. 33:11, 119:89-91, Job 23:13, Ec. 3:14, Mt. 24:35, He. 6:17-18, 13:8, Stg. 1:17, Ap. 1:8, 21:6 vuelva
44 Is. 46:9-10, Dn. 7:2-27, Os. 10:8, Jl 2:28-29 vuelva
45 Dt. 30:11-14, 2 P. 1:20 vuelva
46 Mt. 24:35 vuelva
47 Mal. 3:6, He. 13:8, Ap. 1:8 vuelva
48 1 Cr. 16:34, Sal. 52:1, 100:5, 111:3, 10, 119:160, 135:13, Mt. 5:17, 10:34, 2 Ts. 1:8, 1 P. 1:23, 25, 2 P. 3:6-7, 10-12, He. 7:25, Ap. 1:18, 10:5-6 vuelva
49 Ez. 33:2-9, 16-20 vuelva
50 1 Co. 9:27 vuelva
51 Ex. 32:33-35, Lv. 26:14-18, Nú. 15:31, Dt. 28:20, 30:15, 1 Cr. 28:9, Pr. 2:22, Is. 3:11, Ez. 7:4, Dn. 12:2, Mal. 4:1, Mt. 10:28, Ap. 2:22-23 vuelva
52 Jud. 5-7, 14-15 vuelva
53 Dt. 6:5, 10:12-13, 17, 20, 11:1-2, 5-7, cap. 13, 30:15-20, Jos. 22:5, Mt. 22:37, Mr. 12:30-31, Lc. 10:27-28 vuelva
54 Sal. 51:5, Ro. 5:12, 14, 1 Co. 15:22 vuelva
55 Ro. 7:15-25 veulva
56 Sal. 51:5 vuelva
57 1 Jn. 2:1 vuelva
58 Lv. cap. 4, 5:15-16, Nú. 15:24-29, Mt. 5:23-24, Ef. 4:26, He. 5:1-2, 9:7, 1 Jn. 5:16-17, Ap. 2:5, 16, 3:3, 19 vuelva
59 1 Co. 9:26-27, 15:31, Fil. 4:13, 1 P. 5:10 vuelva
60 Is. 53:5-12, Mt. 20:28, Lc. 24:46-47, Jn. 1:29, Hch. 5:31, Gá. 3:13, He. 7:26-27, 9:11-14, 26, 28, 10:10-14, 1 P. 3:18, Ap. 5:9 vuelva
61 Ro. 6:1-13, Gá. 2:19-20, 5:24, 6:14 vuelva
62 Jn. 12:24 vuelva
63 Ro. 3:24-25, Col. 1:14-20, He. 9:11-15, 20-26, 1 Jn. 1:7, Ap. 1:5, 7:13-14 vuelva
64 Jn. 6:53-54, He. 9:22, 26-28 vuelva
65 Lv. 17:11, Jn. 6:53-54, 14:19, Ro. 6:23, Ef. 2:13-18, 1 P. 1:18-21, 1 Jn. 1:7, 4:9 vuelva
66 Ro. 6:2-7, 11-13, 8:10 vuelva
67 Mt. 10:38-39 vuelva
68 Ef. 4:22-32, 1 P. 4:1-5 vuelva
69 Job 18:14, Jud. 14-15 vuelva
70 Ro. 14:11-12, Fil. 2:10-11, Ap. 6:12-17 vuelva
71 Mt. 25:31-33 vuelva
72 2 S. 14:14, Sal. 49:7, 9-10, 89:47-48, 103:14-16, Ec. 5:15, Is. 40:7, He. 9:27 vuelva
73 Sal. 23:4, 37:37, 49:15, 116:15, 1 Co. 15:51-57, 2 Co. 5:1, 8, Fil. 1:20-23, 2 Ti. 4:6-8, Ap. 14:13 vuelva
74 Jn. 11:25-26 vuelva
75 He. 10:19-23, 1 Jn. 4:17-18, Jud. 24 vuelva
76 Mt. 16:24, Mr. 10:21, 1 Co. 1:18, Gá. 6:14 vuelva
77 Lc. 9:23 vuelva
78 Mt. 10:38 vuelva
79 Jn. 12:25 vuelva
80 Ro. 6:10-11, 8:11, He. 4:9-11 vuelva
81 Ro. 6:4-9 vuelva
82 Ap. 1:18 vuelva
83 Ro. 7:2-3 vuelva
84 Ro. 6:10-14 vuelva
85 Stg. 4:4, 1 Jn. 2:15 vuelva
86 Ex. 19:4-6, Is. 43:21, Ro. 11:2-5, 2 Co. 6:16-18, Tito 2:14, 1 P. 2:9 vuelva
87 Ro. 6:15-16 vuelva
88 1 P. 1:5 vuelva
89 Ro. 8:2, Jud. 24 vuelva
90 Lc. 19:12-27, Mr. 13:34-37 vuelva
91 Ef. 2:12-13, Jud. 21 vuelva
92 2 P. 3:13-14 vuelva
93 Jn. 10:7-9 vuelva
94 Jn. 14:6 vuelva
95 Jn. 14:6 vuelva
96 Jn. 10:1 vuelva
97 Col. 1:27 vuelva
98 Ef. 3:7-8 vuelva
99 Jn. 14:10-12, 17-20, 23, 17:21-23, 26, 1 Jn. 4:4 vuelva
100 Col. 1:27-28 vuelva
101 Ro. 8:9-11, 2 Co. 6:16, 1 Jn. 4:13 vuelva
102 1 Co. 2:16, Fil. 2:5, He. 8:10, 1 P. 4:1 vuelva
103 Mt. 3:16 vuelva
104 Gn. 1:2 vuelva
105 Zac. 4:6 vuelva
106 Gn. 1:31 vuelva
107 2 S. 22:36, Mt. 11:28-30, Jn. 14:23, 1 Jn. 4:13, Ap. 3:20 vuelva
108 Jn. 4:24, Gá. 4:6, Ef. 6:17, Fil. 1:19, 1 Jn. 4:13, 5:7 vuelva
109 Ro. 5:14-17, 21 vuelva
110 Jn. 6:63, Ro. 6:2-6 vuelva
111 Ro. 12:1-2 vuelva
112 Gá. 2:20, Col. 3:3, 1 Jn. 4:9, 17 vuelva
113 Gá. 2:20 vuelva
114 Ef. 2:11-19 vuelva
115 Ro. 6:6, Ef. 4:21-23, Col. 3:9-10 vuelva
116 Is. 64:4, Jn. 14:2-3, Ro. 6:5-11, 7:4-6, 12:5, 1 Co. 15:21-23, Col. 1:18, 1 P. 1:3-5, Ap. 21:10-25 vuelva
117 Ro. 6:4 vuelva
118 Jn. 15:10, 1 Jn. 5:3, 2 Jn. 6 vuelva
119 Ro. 6:4, Col. 2:12 vuelva
120 Sal. 50:16-22, Pr. 1:24-31, 6:23, 10:17, 12:1, 15:10, Lc. 16:23-26, Ap. 21:8 vuelva
121 Mt. 7:13-14, Lc. 13:23-24 vuelva
122 2 Ts. 2:10-12 vuelva
123 Ro. 1:28, 2 Ts. 2:12, 1 Ti. 4:1-2, 2 Ti. 4:3-4 vuelva
124 Fil. 2:5 vuelva
125 Dt. 10:12, 11:13, Jos. 22:5, Mr. 12:30 vuelva
126 Dt. 5:9-10, 7:9, 13:3-4, 30:16, Jn. 14:21 vuelva
127 Mt. 11:12 vuelva
128 Gá. 1:8, 2:4-5, 1 Ti. 1:3-4, Tito 3:10-11, Stg. 4:7, 2 Jn. 10-11, Jud. 3-4, Ap. 2:2 vuelva
129 Jn. 10:27 vuelva
130 Jn. 10:5 vuelva
131 Jn. 10:4-5, Ap. 22:18-19 vuelva
132 Jn. 15:5-10, 2 Co. 5:17, 1 Jn. 2:5-6, 14-17 vuelva
133 Jn. 14:16-17, 26, 16:7, 20:22, Hch. 2:1-4, 38-39 vuelva
134 Lc. 17:20 vuelva
135 Jn. 3:8 vuelva
136 Jn. 14:16-17, 17:21 vuelva
137 Ro. 8:9-11, 2 Co. 6:16, Ap. 3:20 vuelva
138 Mt. 3:2, 4:17, 10:7 vuelva
139 1 Co. 15:31 vuelva
140 2 Co. 4:16 vuelva
141 Mt. 6:11 vuelva
142 Mt. 6:30-34 vuelva
143 Lc. 22:42, Mr. 14:36 vuelva
144 Lc. 9:23 vuelva
145 Mt. 10:37-39, 16:24-25, 18:8-9, Lc. 14:26-27, 33, Jn. 12:25-26, Col. 3:5, Tito 2:12, 1 P. 2:11, 4:1-2 vuelva
146 Mt. 8:20, Jn. 5:30, 6:38, Ro. 15:3 vuelva
147 Jn. 4:32-34, 5:19, 6:38, 14:10 vuelva
148 Fil. 2:8 vuelva
149 Ro. 8:12-13, 13:14, 1 Co. 9:27, Gá. 5:24, Fil. 3:7-9, Ap. 12:11 vuelva
150 Gá. 5:24 vuelva
151 Gá. 5:16-17 vuelva
152 Mt. 28:18-20, Jn. 14:16-18, 20, Hch. 1:8, Ro. 15:13, Ef. 3:16-19, Fil. 4:13 vuelva
153 Mt. 24:32-33, Ro. 9:28, 13:12, Fil. 4:5, 2 Ts. 2:2, Stg. 5:9, 1 P. 4:7 vuelva
154 Ap. 1:5 vuelva
155 Mt. 10:38 vuelva
156 Ro. 8:1, Gá. 5:16, 25, Jud. 21 vuelva
157 Ez. 18:4, Jn. 5:14, Ro. 6:1-8, Ef. 5:27, He. 10:26, 12:1, Stg. 1:15, 2 P. 3:13-14 vuelva
158 2 Ti. 4:2, 2:2, 24-26 vuelva
159 Dt. 18:13, 1 R. 8:61, Mt. 5:48, 2 Co. 13:11 vuelva
160 2 Ti. 4:5 vuelva
161 Job 31:6, Dn. 5:27, Mt. 7:24-27, 16:27, 1 Co. 3:13-15, 2 Co. 11:15, Stg. 1:25, 2:22, 1 P. 1:17, Ap. 2:23, 20:12-13, 22:12 vuelva
162 Jud. 12 vuelva
163 Gá. 5:9 vuelva
164 Ef. 4:14, Col. 2:8, 1 Ti. 4:1-3, 2 Ti. 3:13, 4:3-4, 2 P. 2:1-3, 14-19, Ap. 12:9, 13:11-14, 2 Jn. 7 vuelva
165 Gn. 7:10-13, 17-24 vuelva
166 Jud. 13 vuelva
167 Job 9:2-12, 35:5-6, He. 9:27, Ap. 20:11-15 vuelva
168 1 P. 4:17-18 vuelva
Notas de la Oración:
1. Sal 51:5, Ro. 3:10-12, 23 vuelva
2. Mt. 26:63-64, 27:54, Lc. 1:30-33, Jn. 9:35-37, Ro. 1:3-4 vuelva
3. Hch. 4:12, 20:28, Ro. 3:25, 1 Jn. 1:7, Ap. 5:9 vuelva
4. Sal. 16:9-10, Mt. 28:5-7, Mr. 16:9, Jn. 2:19, 21, 10:17-18, 11:25, Hch. 2:24, 3:15, Ro. 8:11, 1 Co. 15:3-6 vuelva
5. Lc. 22:69, Hch. 2:25-36, He. 10:12-13 vuelva
6. Ro. 8:11, 1 Co. 3:16, Ap. 3:20 vuelva
7. Ef. 2:13-22, He. 9:22, 13:12, 20-21, 1 Jn. 1:7, Ap. 1:5, 7:14 Ef. 2:13-22, He. 9:22, 13:12, 20-21, 1 Jn. 1:7, Ap. 1:5, 7:14 vuelva
8. Mt. 26:28, Hch. 2:21, 4:12, Ef. 1:7, Col. 1:14 vuelva
9. Ro. 10:13, Stg. 4:2-3 vuelva
10. He. 11:6 vuelva
11. Jn. 8:11, 1 Co. 15:10, Ap. 7:14, 22:14 vuelva