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LUZ

Por
Tony Alamo

El “Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la Luz del mundo1 [la única verdadera dirección del mundo a la vida eterna2]; el que me sigue, no andará en tinieblas,3 sino que tendrá la luz de la vida4 [la guía de Cristo para la vida eterna]” (Juan 8:12).

Jesús dijo, “Yo5 soy el camino [a la vida],6 y la Verdad,7 y la Vida;8 nadie viene al Padre, sino por Mí.9 Si me conocieseis, también a Mi Padre conoceríais” (Juan 14:6-7).

Cuando Jesús “les enseñaba en la sinagoga de ellos, de tal manera que se maravillaban [asombraban], y decían: ¿De dónde10 tiene éste esta sabiduría y estos milagros?” (Mateo 13:54). CRISTO ES LA SABIDURIA Y EL PODER DE DIOS11 (1 Co. 1:24). “Y dijo Dios la PALABRA: Sea la luz; y fue la luz” (Gn. 1:3).12 Cristo es “EL VERBO DE DIOS”13 (Juan 1:1-3, Ap. 19:13). Cristo, “LA PALABRA,” es la compañía del poder de Dios. Cuando Dios pronunció las Palabras, “Sea la luz,” la luz inmediatamente se prendió y todo el resto. Todas las cosas fueron hechas por “LA PALABRA DE DIOS;”14 así que, Dios y Su Palabra [Cristo] son uno,15 y ellos son inseparables uno del otro.16

“En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios,17 y EL VERBO [Cristo] era Dios.18 Este era en el principio con Dios [de acuerdo exacto]. Todas las cosas por El fueron hechas,19 y sin El nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. En El estaba la vida,20 y la vida era la luz de los hombres [el esclarecimiento mental y espiritual que nos habilita a todos a percibir la dirección clara para obtener la vida eterna por Sus Palabras].21 La luz en las tinieblas resplandece,22 y las tinieblas no prevalecieron contra ella”23 (Juan 1:1-5). Hasta este mismo día, las tinieblas nunca han abrumado a la guía de Dios hacia la eternidad para aquéllos que lo buscan a El.24 La dirección hacia la vida eterna nunca ha cambiado a través de los años,25 aunque los agentes de Satanás sobre la tierra tratan de engañar a la humanidad con respecto a esta dirección.26

“En el principio era el Verbo.”27 El Apóstol Juan, por el Espíritu Santo, declara la “divinidad eterna” de Cristo. El nos enseña que Cristo es el Dios eterno,28 manifiesto en la carne.29 Juan, por el Espíritu de Dios, nos enseña que la restauración de la humanidad sólo puede ser lograda por medio de la sabiduría y el poder de Dios, el cual es Cristo.30

Cristo es el único calificado para restaurar la humanidad a la salvación31 porque todas las cosas fueron creadas por medio de Su sabiduría y poder.32 Jesús, la PALABRA mencionada anteriormente, era la luz genuina, la cual esclarece [dirige] espiritualmente a cada hombre cuando viene al mundo.33 El estaba en el mundo, y el mundo por medio de Su agencia intermedia entró a la existencia,34 y el mundo de pecadores no tenía un conocimiento experimental de El.35 Es El solamente quien sopló la vida y la energía dentro de cada criatura viviente,36 y El, “LA PALABRA,” quien entró a una forma nueva de existencia convirtiéndose en carne y viviendo en una tienda [Su cuerpo físico] entre nosotros.37

Desde el decaimiento de Adán y Eva, Cristo nunca ha dejado de dar Su luz y Su dirección para la vida a todos los hombres en una base continua.38 El creer que Cristo es Dios, la misma esencia de Dios,39 es de suma importancia, porque es imposible ganar la vida eterna de cualquier otra fuente más que por la fe en la Palabra de Dios.40 El hecho que Cristo es Dios tiene que ser enseñado y aprendido.41 Sin fe en ello, ¿cómo puede el mundo ser salvo?42 Los Hechos 4:12, declara, “Y en ningún otro [más que Cristo] hay salvación [la iluminación, la guía]; porque no hay otro nombre bajo el Cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.”43

Cristo le ha dado a los hombres una prueba única de Su poder. Nuestra fe no puede descansar en Cristo a menos que estemos seguros de que El es Dios.44 No abandonamos a Dios cuando creemos que Cristo es divino e inseparable de Dios. Antes bien, agradamos a Dios.45 Es imposible agradar a Dios a menos que creamos que El existe y es quien El dice que es.46 Y El dice que El es “EL VERBO.”47 Y El dice que El es Cristo.48 Y El dice que El es la única dirección hacia la vida eterna.49

Tenemos que hacernos consientes del hecho de que Cristo era en el principio con Dios en la forma de Su Palabra, Su sabiduría, y Su poder.50 Cristo declaró, “Antes que Abraham fuese, Yo soy.”51 Era Cristo quien le habló a Moisés y a todos los profetas,52 y Cristo el Dios Todopoderoso que era la cuarta figura en el horno de fuego ardiente con los tres niños de los hebreos, causándolos a que escaparan del horno de fuego ardiente, sanos y salvos de cualquier daño.53

Nosotros todos estamos muertos en nuestros pecados,54 sin el poder ni la sabiduría de Dios para salvarnos de la muerte eterna.55 Pero Dios, por medio de Su sabiduría y poder en Cristo, le devuelve la vida a los muertos56 (a todos nosotros) si aceptamos la luz, Su guía.57 Si lo creemos a El lo suficiente para seguirlo, para hacer lo que El dice, para dejarlo que El dirija nuestras vidas, para darle a El nuestra fuerza, El nos dará a nosotros Su fuerza y Su vida;58 fuerza por fuerza,59 vida por vida, la vida eterna de El por el renunciamiento suyo a la vida de pecado y muerte eterna.60

Por medio del Apóstol Juan, el Espíritu Santo llama al Hijo de Dios “EL VERBO”61 porque El es la sabiduría y la voluntad eterna de Dios.62 Jesús es la imagen precisa del propósito de Dios,63 el cual es que todas las almas deberían escuchar y recibir la vida eterna,64 la cual es alcanzada por la luz, la dirección.65 El Evangelio del Señor Jesucristo es esa dirección. Este alegre y gozoso mensaje es revelado exclusivamente en Cristo Jesús, quien nos enseña a amar las riquezas eternas del reino de los Cielos66 y a despreciar las riquezas falsas del mundo y los placeres temporales.67 Nosotros debemos desear con todo nuestro corazón apoderarnos de esa perla preciosa,68 la luz incomparable, la dirección para aquéllos que deseamos la vida eterna en el momento que es ofrecida a nosotros.69

Deje que este mensaje sirva como una orden de Dios, un documento de dirección legal y celestial para librarlo de los poderes de la maldad y las tinieblas,70 del dolor, del sufrimiento, del temor, de la muerte,71 y una eternidad de los tormentos encontrados en el Infierno,72 a cambio de la sabiduría, el poder, la paz con Dios, el gozo indescriptible,73 y la luz74 la cual es la dirección perfecta de Dios para su alma75 en Cristo para escapar los tormentos del Infierno y ganar los placeres indescriptiblemente gloriosos del Cielo, y tener comunión con Dios El Padre y Su Hijo, “LA PALABRA,” la esencia, la sabiduría y el poder de Dios. Todos los tesoros del Cielo y una vida de gozo en abundancia son encontrados en El y ofrecidos a usted ahora. Usted puede llegar a ser heredero de Dios y coheredero con Cristo76 diciendo esta oración, si usted consiente a continuar bajo Su dirección77 hasta que Cristo se lo lleve o hasta que El regrese a la tierra, lo cual será muy pronto.78

Oración

Mi Señor y mi DIOS, ten misericordia de mi alma pecadora.1 Yo creo que JESUCRISTO es el Hijo del DIOS viviente.2 Creo que Él murió en la cruz y derramó Su preciosa sangre para el perdón de todos mis anteriores pecados. 3 Creo que Dios resucitó a Jesús de entre los muertos por el poder del Espíritu Santo4y que Él está sentado a la diestra de DIOS en este momento, escuchando mi confesión de pecado y esta oración.5 Abro la puerta de mi corazón, y Te invito en mi corazón, Señor JESÚS. 6 Lava todos mis pecados sucios en la preciosa sangre que Tú derramaste por mí en la cruz del Calvario. 7 Tú no me rechazarás, Señor JESÚS; Tú perdonarás mis pecados y salvarás mi alma. Lo sé porque Tu Palabra, la Biblia, así lo dice. 8 Tu Palabra dice que Tú no rechazarás a nadie, y eso me incluye a mí.9 Por eso sé que Tú me has escuchado, sé que me has contestado, y sé que soy salvo.10 Y Te doy gracias, Señor JESÚS, por salvar mi alma, y Te mostraré mi agradecimiento haciendo como Tú mandas y no pecar más. 11

Ahora que usted es salvo y ha sido perdonado de sus pecados, levante sus manos y alabe al Señor. “Alégrense los cielos, y gócese la tierra, y digan en las naciones: JEHOVA reina.”79

Cristo ahora vive en usted por el Espíritu Santo.80 Hay una manera en que usted puede recibir una porción más completa de la naturaleza divina de Dios en usted. Dios el Padre ahora también vive en usted. Entre más vive en usted la naturaleza divina de Dios, más va a poder resistir contra las tentaciones que tan fácilmente han movido a tantos millones de Cristianos lejos de la salvación. Esto es causado por más hombre en nosotros que Dios en nosotros. La humanidad se ha vuelto tan malvada que si Satanás y su ejército endiablado fuesen completamente destruidos, nosotros seríamos nuestro propio diablo.

Ahora que usted es salvo, ore por el bautismo en el Espíritu Santo. Estudie la Palabra piadosamente, y ore siempre por más de la naturaleza divina.81 Para instrucciones en cómo recibir el bautismo en el Espíritu Santo, y para recibir más de la naturaleza santa de Dios, solicite nuestra literatura o llame. Porque sin santidad ningún hombre verá a Dios.82

Ahora que usted es salvo, es un mandamiento que sea sumergido completamente, bautizado en agua en el nombre del Padre, y en el nombre del Hijo, y en el nombre del Espíritu Santo.83 Guarde todos los mandamientos de Dios y viva.84

Usted acaba de completar el primer paso en una serie de cinco pasos que se requieren para recibir la salvación. Su segundo paso es negarse a sí mismo y aceptar la cruz cada día con el propósito de mortificarse, es decir, para darle muerte a su propia voluntad, a su ser autosuficiente, y al mundo con todos sus deseos. Todos estos tienen que ser bautizados en la muerte de Cristo. El tercer paso es su resurrección de la vida satánica de Adán a la vida libre de pecados de Cristo. El cuarto paso es su ascensión a una posición de autoridad para reinar por Dios en la tierra, y el quinto paso es reinar por Dios en la tierra hasta el fin con el propósito de traer el reino del Cielo a la tierra. Usted tiene que aprender la Palabra de Dios, luego someterse y hacer lo que la Palabra dice, para que la Iglesia y el mundo puedan ver pruebas de su sumisión a la Palabra de Dios, Su orden, y Su autoridad en usted y por usted.
Alabado sea el Señor. Que Dios lo recompense abundantemente.

Pastor Mundial Tony Alamo


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ESTA LITERATURA LLEVA EL VERDADERO PLAN DE SALVACIÓN (Hch. 4:12). NO LA TIRE, PÁSELA A OTRO.

Aquéllos de ustedes que están en otros países, les animamos a que traduzcan esta literatura a su lengua materna. Si la reimprimen, favor de incluir este derecho reservado y registro:

Tony Alamo Christian Ministries is a division of Music Square Church, Inc.
© Propiedad literaria Septiembre, 1995 Todo derecho reservado Pastor Mundial Tony Alamo ® Registrado Septiembre, 1995
Esta literatura fue escrita en septiembre de 1995 en la Institución Correccional Federal de Florence, Colorado. El Pastor Alamo cuenta su encarcelamiento por Cristo como siendo todo regocijo.
Las escrituras en esta literatura fueron tomadas de la Santa Biblia (Reina-Valera, 1960).


Notas del :

1 Juan 8:12, 3:19, I Juan 1:5vuelva

2 Hch. 4:12, Juan 14:6 vuelva

3 Juan 10:2-5, I Juan 2:4 vuelva

4 II Co. 4:6-7, I P. 2:9 vuelva

5 Hch. 4:12 vuelva

6 Juan 14:6 vuelva

7 Juan 1:14, 17 vuelva

8 Juan 1:4 vuelva

9 Juan 10:1 vuelva

10 Juan 1:2, 10:30, 17:21, I Juan 5:7 vuelva

11 Juan 10:17-18, I Co. 1:30 vuelva

12 Juan 1:3 vuelva

13 Juan 6:63 vuelva

14 Col. 1:16-17, Gn. 1:6, 9, 11, 14-15, 20, 24, 26 vuelva

15 Is. 9:6, Juan 10:38, 14:20, 17:21 vuelva

16 Juan 5:19, 10:30, 14:7, 9-11, Pr. 8:22-30, Mateo 28:19, 11:25, 14:1-2 vuelva

17 Gn. 1:26, Juan 5:30, 6:38, 12:28, 13:31-32, Mt. 17:5, Mr. 1:11 vuelva

18 Mt. 16:16-17, Jn. 6:69, 10:38, 14:20 vuelva

19 Gn 1:1, 2:1-2, 4, Is. 42:5, Juan. 1:1-3 vuelva

20 Gn. 1:20-27, 2:7, Dt. 32:39, Jn. 14:6, 5:26, 11:17, 20:22, 25, Mr. 5:22-24, 39-42 vuelva

21 I R. 3:12, 4:29, Is. 9:6, Jn. 3:2, 14:26, 16:13, I Co. 1:24 vuelva

22 Juan. 1:4-5, 8:12, 12:46, Stg. 1:17, He. 13:5, Sal. 32:8 vuelva

23 Mt. 28:20, Juan 9:5, Ap. 1:18 vuelva

24 Jer. 29:13, Juan 1:9, He. 13:8 vuelva

25 Sal. 102:25-27, Ec. 3:14, Mal. 3:6, Mt. 24:35, He. 13:8, Stg. 1:17, Ap. 1:18 vuelva

26 Is. 14:9-12, Mt. 13:19, 38-39, Juan 8:44, II Co. 4:4, 11:3, I P. 5:8, Ap. 20:3 vuelva

27 Gn. 1:1, Juan 1:1 vuelva

28 El Evangelio de Juan vuelva

29 Juan 1:14, 5:30, 8:23, 10:17, 11:25, I Ti. 1:15 vuelva

30 Juan 14:6, I Co. 1:21, Mt. 1:21, Jer. 3:23, Lc. 19:10 vuelva

31 Hch. 4:12, Juan 6:33, 40, 10:17, 11:25, 43-44 vuelva

32 Sal. 104:24, 136:5, Jer. 10:12, Hch. 4:12, Col. 1:16-17, He. 2:10 vuelva

33 Juan 1:9, 10:1-4, 11, 14, Juan 5:24, Pr. 8:35-36 vuelva

34 Hch. 17:24, 15:18 vuelva

35 Juan 1:5, Ro. 10:4 vuelva

36 Col. 1:16-17 vuelva

37 Is. 9:6, Mt. capítulo 2, Lucas 2:25-32, Juan 1:14, Ro. 1:3, 9:5 vuelva

38 Gn. 2:16-17, 3:18-19, He. 13:5 vuelva

39 Mt. 28:18, Juan 1:3, 10:30, 38, 14:8-10, Hch. 10:36, Ro. 9:5, Col. 1:16-17 vuelva

40 Mr. 16:16, Juan 3:15, 16, 6:68-69, 10:1, 14:6, Hch. 4:12, I Juan 5:10-13 vuelva

41 Ex. 18:20, Jer. 26:2, Ez. 2:7, Mt. 10:7, 28:19, Juan 21:15-17, II Ti. 4:2 vuelva

42 Hch. 16:31, Ro. 10:9, II Co. 1:24, Ef. 2:8, He. 11:1, 6 vuelva

43 Mt. 24:11, 23-27 vuelva

44 Is. 9:6, Juan 14:1, Ro. 9:5, II Co. 5:10, Fil. 2:5-11, II Ti. 4:1 vuelva

45 Sal. 2:12, II Co. 5:18, Gá. 1:15-16, He. 11:5-6 vuelva

46 Juan 3:16-18, 8:24 vuelva

47 Juan 1:1 vuelva

48 Mt. 16:16-17, Mr. 14:61-62, Juan 10:24-30, Juan 14:7, 9-11, 17:23 vuelva

49 Juan 14:6 vuelva

50 Jer. 10:12, Juan 1:1, Juan 10:30 vuelva

51 Juan 8:58 vuelva

52 Gn. 1:9-19, Gn. 12:1-16, Ex. capítulos 3 y 4, Dn. 3:23-25, 10:16-17 vuelva

53 Ex. 3:2-22, Dn. 3:25-28 vuelva

54 Ef. 2:1, Col. 2:13 vuelva

55 Juan 5:24, Ro. 6:23, 8:6, Ef. 2:12, II Ti. 1:10 veulva

56 Juan 5:24, 11:25, Ef. 2:5-6, Col. 1:11, 2:13, Hch. 15:11, 16:31 vuelva

57 Juan 5:24, Col. 1:11, Ro. 10:9 vuelva

58 Juan 20:31, I Ti. 1:16, I Juan 5:13 vuelva

59 Mt. 28:18, Ef. 3:16, Col. 1:11, Fil. 4:13, Lucas 4:36, Ef. 5:26, Juan 5:24, Ro. 15:4, Mt. 17:20 vuelva

60 Mr. 8:35, Juan 12:25, Fil. 3:7-11, Mr. 8:35, Mt. 16:25, Lucas 9:24, 17:33 vuelva

61 Juan 1:1 vuelva

62 Col. 1:19, He. 1:2, 11:3, II P. 1:17, II Ti. 4:1 vuelva

63 He. 1:3, Juan 10:30, 17:11, 21, I Co. 8:6, Ef. 4:5, I Co. 2:16 vuelva

64 Mr. 16:15, Juan 3:16, Ro. 10:14 vuelva

65 I Co. 1:21, Hch. 8:31, He. 10:7, Mt. 18:14, Ez. 14:6, 18:32 vuelva

66 I Co. 2:9, Mt. 16:24, Juan 14:15, I Juan 2:16, Ro. 8:18 vuelva

67 Juan 12:25, Lucas 18:28-30, Juan 21:2-4, 4:14, 5:14, Lucas 14:26, 16:13, Juan 6:35, 15:19, Col. 3:1-3, Stg. 4:4, I P. 1:14, II Ti. 2:22, Ef. 5:3, Ro. 6:13, 12:1, Mt. 5:29-30, 8:19-20, 10:37, 12:33, 18:8-9, Lucas 1:74-75, 5:11 vuelva

68 Mt. 13:44-47, 52, Lc. 18:22, 12:33-34 vuelva

69 Ro. 13:11, II Co. 6:2 vuelva

70 Mr. 2:17, Mt. 24:14, Mt. 1:21, 6:9-13, 11:28-30, 18:14 vuelva

71 II Ti. 4:18, He. 2:14-15, II P. 2:9, II Co. 1:9-10, Ro. 7:24 vuelva

72 Mt. 7:19, 25:41, 13:41-42, Lc. 16:19-31, Mt. 3:10, 12, 5:29, 10:28, 11:23, Mr. 9:43-47, Lc. 12:5 vuelva

73 Juan 15:10-11, 16:22, 20, Lc. 6:22, 24, 51-53, 10:20, 2:10, 1:47, Mt. 25:21 vuelva

74 Sal. 119:105, Pr. 6:23, Is. 62:1, Sal. 18:28, 37:6, 43:3 vuelva

75 Juan 14:23, 16-18, I Co. 2:9, Pr. 16:9, 21:29, II Co. 13:14, Mt. 20:16, 25:34, Lc. 6:23 vuelva

76 Ro. 8:17, Hch. 20:32, 26:18, Ef. 1:11 vuelva

77 Mt. 24:13, Juan 8:31, 10:28 vuelva

78 I P. 4:7, Ap. 1:3, 10:6, 11:18, 12:12, 22:10 vuelva

79 I Cr. 16:31 vuelva

80 Ro. 8:11 vuelva

81 II Ti. 2:15, Lc. 21:36, Jn. 15:3 vuelva

82 He. 12:14 vuelva

83 II Ti. 2:21, Mt. 28:19 vuelva

84 Dt. 8:1, 30:16, Pr. 4:4, 7:2 vuelva


Notas de la Oración:

1. Sal 51:5, Ro. 3:10-12, 23 vuelva

2. Mt. 26:63-64, 27:54, Lc. 1:30-33, Jn. 9:35-37, Ro. 1:3-4 vuelva

3. Hch. 4:12, 20:28, Ro. 3:25, 1 Jn. 1:7, Ap. 5:9 vuelva

4. Sal. 16:9-10, Mt. 28:5-7, Mr. 16:9, Jn. 2:19, 21, 10:17-18, 11:25, Hch. 2:24, 3:15, Ro. 8:11, 1 Co. 15:3-6 vuelva

5. Lc. 22:69, Hch. 2:25-36, He. 10:12-13 vuelva

6. Ro. 8:11, 1 Co. 3:16, Ap. 3:20 vuelva

7. Ef. 2:13-22, He. 9:22, 13:12, 20-21, 1 Jn. 1:7, Ap. 1:5, 7:14 Ef. 2:13-22, He. 9:22, 13:12, 20-21, 1 Jn. 1:7, Ap. 1:5, 7:14 vuelva

8. Mt. 26:28, Hch. 2:21, 4:12, Ef. 1:7, Col. 1:14 vuelva

9. Ro. 10:13, Stg. 4:2-3 vuelva

10. He. 11:6 vuelva

11. Jn. 8:11, 1 Co. 15:10, Ap. 7:14, 22:14 vuelva