BAUTISMO

Por
Tony Alamo

Poca gente en el mundo comprende de qué se trata el verdadero baustismo. Por esta razón, la mayoría de la gente está sin salvación y muchos que eran salvos una vez han caído ya que no continuaron caminando con Cristo en el bautismo; ellos dejaron su fe así como los discípulos dejaron de andar con Cristo y Su bautismo en Juan 6:66, escogiendo no andar más con El. Estos discípulos se convirtieron en anticristos.1

Jesús declaró claramente, "El que creyere Y FUERE BAUTIZADO, SERA SALVO; mas el que no creyere, será condenado."2 Esta verdad, hablada por Cristo Mismo quien es la Verdad, debería ser fácil de entender para cualquier persona que puede leer u oír.3 Cristo de ninguna manera está hablando del bautismo de agua. Desafortunadamente, el mundo cree que el hecho de la señal visible del bautismo de agua puede salvar sus almas y mantenerlos salvos. Esto no es verdad. La verdad de la salvación por fe en Cristo y Su bautismo está clara en la santa Palabra de Dios. El bautismo visible o la inmersión en agua solamente es un símbolo exterior del verdadero bautismo o regeneración que sucede internamente.4 Esta condición interna del bautismo tiene que suceder antes de que algún converso pueda ser considerado un candidato para el bautismo visible de la inmersión en agua. El rito del bautismo en agua es una ceremonia en las iglesias Cristianas para aquéllos que han sido regenerados internamente y han entrado a la comunión de la muerte, el entierro, y la resurrección de Cristo por la vida actual de Dios entrando dentro de ellos.

El mandato de Jesús era que aquéllos que han de ser bautizados en agua, primero tenían que haber sido hechos "los hijos de Dios" por la vida de Dios dentro de ellos.5 No hay jerarquía de iglesia que tiene el derecho de modificar o administrar este mandato de Cristo, porque el patrón de todo fue dado por El a la iglesia del Nuevo Testamento para la duración del mundo.6 Este rito proclama el hecho que los creyentes han recibido la vida de Dios en Cristo por el Espíritu dentro de sus espíritus. Estos son los discípulos y éste es el bautismo interno.7

El bautismo de agua es una ordenanza instituida por Cristo, así como el ser un testigo para Cristo es una ordenanza para dispersar Su Palabra dentro de otros.8 Ha sido practicado por los apóstoles9 y los miembros de las iglesias del Nuevo Testamento desde el día de Pentecostés hasta el día de la segunda venida de Cristo.10

El bautismo, la regeneración, es una promesa encontrada en estas palabras de Cristo: "El que Me ama, Mi Palabra guardará; y Mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él."11 "Habitaré y andaré entre ellos, y seré su Dios, y ellos serán Mi pueblo." 12"Daré Mi ley EN su mente, y la escribiré EN su corazón; y Yo seré a ellos por Dios, y ellos Me serán por pueblo."13

Jesús le habló a Nicodemo acerca de este verdadero bautismo interno, diciendo, "De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios."14 Esto significa que nuestras viejas vidas y el mundo tienen que ser eliminadas, crucificadas y mantenidas enterradas bajo el agua en la muerte de la crucifixión y el entierro de Cristo.15 Entonces tenemos que resucitar de la muerte por el Espíritu Santo a través de la vida de Dios en Cristo que está dentro de nosotros.16 Si no nos sucede esta experiencia de nacer de nuevo del Espíritu, no podremos ver el reino de los Cielos.17

"Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren."18 El conocimiento es de la mente, pero la salvación, la regeneración, o el bautismo tiene que ocurrir en el Espíritu a través de la vida de Dios viviendo en nuestros espíritus.A Nosotros somos la imagen de Cristo, Su cuerpo, creado específicamente para que en él viva Cristo.B El diablo tiene el conocimiento de la Biblia, pero sólo es un conocimiento intelectual. Su corazón no ama las cosas de Dios. Por lo tanto, no son recibidas en su corazón. Por consiguiente, el diablo nunca puede nacer de nuevo del Espíritu por la vida de Dios en Cristo, y nunca fue creado para que en él viviera como lo fue el hombre. Por nuestra fe y nuestro amor por la experiencia entera del bautismo interno y por su continuación en nosotros, la misma vida de Dios entra dentro de nosotros, Su imagen, moviéndonos de nuestra vida carnal y nuestro mundo hacia el reino espiritual de Dios, Su vida y Su mundo.19 Esto es ser nacido de nuevo del Espíritu.20 Esto es el bautismo interno, el bautismo de la vida de Dios en nosotros, lo cual es lo que quizo decir Jesús en Marcos 16:16.21

Nuestra fe en este bautismo interno nos hace uno en la vida de Dios en Cristo.22 Este bautismo interno es nuestra unidad con Dios. Este bautismo interno nos convierte en la novia de Cristo, la Iglesia, el cuerpo de Cristo, y el hogar de Dios, la Nueva Jerusalén, "dispuesta como una esposa ataviada para su marido [Cristo]."23 Qué ignorante son aquéllos que piensan que el bautismo en agua es salvación. Quizas piensan que la ignorancia es felicidad en este lado de la eternidad, pero la salvación de Dios ni la justicia honra ni jamás honrará o librará a una persona en el día del juicio por su ignorancia o estupidez deliberada.24

El reino celestial de Dios es lo opuesto del mundo carnal.25 Si tenemos que aprender acerca del mundo carnal, el cual es temporal, para poder sobrevivir en el, entonces ¿cuánto más tenemos que aprender acerca del reino espiritual invisible de Dios, que es eterno, para poder caminar junto con El y permanecer allí para siempre? Sólo somos salvos saliendo del mundo carnal y entrando al reino celestial de Dios para que la vida de Dios pueda vivir en nosotros mientras que nuestros cuerpos son usados por El para Su propósito durante nuestra vida aquí en el mundo carnal.26

El Apóstol Pablo lo pone de esta manera: "¿O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en Su muerte? Porque, somos sepultados juntamente con El para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva. Porque si fuimos plantados juntamente con El en la semejanza de Su muerte, así también lo seremos en la de Su resurrección."27 Este es el verdadero bautismo que también es la verdadera regeneración, la salvación.
El capítulo cuarenta y siete del libro de Ezequiel habla acerca de un río que corre del trono de Dios. Jesús contó de ésto en el Nuevo Testamento: "El que bebiere del agua que Yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que Yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna."28

En el capítulo veintiuno, versículo seis del libro de Apocalipsis, Jesús explicó que este bautismo interno o regeneración por la vida de Dios entrando en nuestro espíritu es un bautismo continuo de la vida de Dios en nosotros, perpetuada por nuestro estudio piadoso de Su Palabra y recibiéndola en nuestros corazones. De este modo, recibiremos Sus instrucciones no sólo en nuestras mentes, pero más importante en nuestros corazones porque el Espíritu de Dios y la vida de Dios no necesita estar en nuestra mente sino en nuestro espíritu para que ocurra vida en nuestro espíritu. Esa vida, la semilla, la Palabra de Dios, tiene que entrar en nuestro espíritu. La vida de Dios que entra en nuestro espíritu nos da nuestra misma vida eterna.29 Aquí, la misma escritura habla del agua de la vida que es Cristo quien inunda nuestra vieja vida por nuestra fe en El. Entonces, la misma vida de Dios, que es Cristo, entra en nuestro espíritu, dándonos la vida de Dios en nosotros.30

La vida y la Palabra de Dios es Cristo.31 Cristo también es Aquél que bautiza con el Espíritu Santo, también como la resurrección.32 Mientras que lo estudiamos a El, la Palabra, la vida de Dios en nosotros nos mantiene fuertes y bautizados continuamente.33 "Si somos muertos [al mundo] con El, también viviremos con El [eternamente]."34

La santa Palabra de Dios declara que antes de que somos regenerados, estamos muertos en nuestros delitos y pecados.35 La Palabra de Dios dice que "los muertos [los no regenerados] nada saben."36 Esto debe desinflar el ego de cada ser humano que no es salvo. Cuando se trata del tema importante del mundo espiritual, no saben nada.37

Es de suma importancia que el siguiente mandamiento de Jesús sea guardado a pie de la letra. Ese mandamiento es: "El que creyere y fuere bautizado, será salvo."38 ¿Qué son los meros hombres que deberían dudar la Palabra de Su Creador? Es sólo por la aceptación de la Palabra de Dios que somos salvos.39 Tener fe en Jesús significa tener fe en todo lo que El dijo y mandó. Mostramos nuestra fe en lo que El manda, haciendo lo que El nos dice.40

Según la Palabra de Dios, la fe no es suficiente. "También los demonios creen [tienen fe], y tiemblan [pero no son salvos porque no son bautizados. La vida de Dios no está viva y funcionando en ellos]. ¿Mas quieres saber, hombre vano, que la fe sin obras es muerta?"41 Sin la vida de Dios viviendo y obrando en nosotros, nuestra fe está tan muerta como la fe de los demonios.
Dios manda que sus hijos hagan cosas que son imposibles de hacer para gente no bautizada, no regenerada y no salva, tal como guardar Su ley moral.42 Guardando la ley moral y haciendo todas las otras cosas que nos manda hacer Dios es extremadamente facil para aquellos de nosotros que somos bautizados y regenerados internamente. Eso es porque es Dios Mismo en nosotros que está activamente haciéndolo.43

Cuando el Apóstol Pablo dijo, "cada día muero," 44 él quería decir que su vieja vida y mundo están muertos y enterrados diariamente por su voluntad siendo la misma que la de Dios. En otras palabras, él se coloca a él mismo en la muerte de Cristo diariamente en la cruz, en el mismísimo entierro de Cristo, y en Su mismísima resurrección. Haciendo ésto, el Apóstol Pablo cumplió con el primer mandato de Cristo para cada Cristiano regenerado y bautizado: "Tome su cruz cada día, y sígame."45 Cristo también declaró, "El que no toma su cruz y sigue en pos de Mí, no es digno de Mí."46

El Señor nos manda, diciendo, "No améis al mundo."47 Cuando Adán cayó, se abrió una puerta para una nueva orden mundial. En el jardín de Edén, todo fue proveído para Adán, su mujer, y sus futuros hijos.48 Cuando quebraron el mandamiento de Dios, quebraron su comunión con El.49 Esa es la razón por la cual Dios los echó del jardín de Edén al mundo.50 Las provisiones que Dios proporcionó para ellos como comida, protección, y una vida inmortal y bendecida sin muerte, vejez, enfermedad ya no eran proveídas para ellos. Una pared intermedia de separación fue construida entre Dios y el hombre.51

Adán y su simiente entonces tuvieron que trabajar para obtener su comida,52 hacer armas para protegerse y fabricar gozo y cumplidos para entretenerse en vez de recibir su comida, protección, y gozo a través de su comunión con Dios.53 También tuvieron que envejecer y morir.54 Esto fue el principio de la orden mundial de Satanás.

Las armas para la defensa del hombre ahora son imponentes en poder. Es durante esta hora presente que la orden mundial ha acelerado su sucesión con armas de defensa que son lo sufientemente poderosas para destruir toda la tierra, y cumplidos más que suficientemente fuertes para destruir el alma eterna del hombre, también como suficiente comida y bebida para que los hombres se concentren en estas cosas y no en el pan y el agua de la vida.55 Tenemos que trabajar continuamente para alimentarnos. En un esfuerzo para encontrar gozo y paz, mil millones de dólares se gastan cada año en entretenimientos satánicos y vacíos, y en armas para protegernos. Sin embargo, aquéllos que no son salvos se están sintiendo más vulnerables que nunca.

Babilonia es exactamente lo contrario a la seguridad, la protección, el gozo, la felicidad, la paz, y la vida eterna de Dios. La orden mundial, Babilonia, ahora ha madurado y sazonado en su completo desarrollo, al estado en que Dios dijo que estaría justamente antes de que fuese destruido en la víspera de Su segunda venida.56 La orden mundial se ha convertido ahora en la imagen de "BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA."57 El Señor nos advierte de ésto en un mandato: "No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él."58

El Señor nos manda, diciendo, "Salid de ella [salid del sistema mundial, Babilonia], pueblo Mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas."59 La vida de Dios en nosotros nos bautiza o nos separa de Babilonia, la orden mundial, porque Babilonia está muerta y enterrada con nuestras vidas antiguas por el mismo bautismo.60

La vida de Dios que nos da el don de "vida eterna" en la resurrección de Cristo, no se debe confundir con otro don dado por Dios por medio del mismo Espíritu, el don del bautismo del "Espíritu Santo."61 El bautismo del Espíritu Santo es una de las muchas operaciones del Espíritu Santo que son separadas y distintas a nuestro bautismo y nuestra generación y salvación inicial.62

La diferencia entre el bautismo hacia la muerte, el entierro, y la resurrección de Cristo que nos da el don de vida eterna y el don del bautismo en el Espíritu Santo se aclara parcialmente en Los Hechos 1:5: "Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días." Jesús estaba instruyendo a los discípulos regenerados, aquéllos que ya habían sido salvos. Esta escritura aclara que a la misma hora que fueron salvos los discípulos, todavía no habían sido bautizados con el don del bautismo del Espíritu Santo. El Señor les prometió a Sus discípulos regenerados y salvos que serían bautizados (con el bautismo del Espíritu Santo) dentro de no muchos días.

Jesús le dijo a Sus discípulos esta verdad en Juan 15:3: "Ya vosotros estáis limpios [salvos] por la Palabra que Os he hablado."63 Otra vez, esto enseña que ellos ya estaban bautizados, salvos, y regenerados internamente. La vida de Dios en Cristo en el Espíritu había sido sembrada, regada, y crecida en ellos. Pero el crecimiento lo dio Dios 64 en el día de Pentecostés, cuando se les fue dado otro don para el crecimiento de la iglesia y el ministerio, el edificio.65 Esto fue el bautismo en el Espíritu Santo. 1 Pedro 1:23 declara que el limpiarse por medio de la Palabra significa, "Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible [simiente limpia, que es], por la Palabra de Dios que [por nuestra fe en la vida de Dios] vive y permanece [en nosotros] para siempre." Esto fue lo que Pablo sembró: "Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios [el crecimiento para el cuerpo, el edificio que es para Cristo]."66 Antes de éso, Jesús le había declarado a Sus discípulos, "El que está lavado, no necesita sino lavarse los pies, pues está todo limpio; y vosotros limpios estáis, aunque no todos."67 Esta última parte se refiere a Judas.

Hay muchas más escrituras que nos dicen que el don del bautismo en el Espíritu Santo es diferente que el don de vida eterna.68 Todos aquéllos ministrando hoy en día sin la vida de Dios en ellos, o sin el bautismo en el Espíritu Santo, son vasos en que la actividad y el crecimiento de Dios no pueden ser hallados.69 Aunque ellos pueden poseer el conocimiento de Dios, el conocimiento es sólo de la mente. La vida está sólo en la simiente que es plantada y regada por la Palabra, y que milagrosamente es dada el crecimiento por el Espíritu de Dios que está encorporada dentro de la Palabra que es recibida en el corazón o en el espíritu. Sin el don del bautismo en el Espíritu Santo, no tenemos el poder de la vida de Dios en nosotros, y no podemos sembrar la semilla de la vida por el Espíritu. Nosotros podemos poseer el conocimiento, pero "el conocimiento envanece."70 El Espíritu trae vida.71 Aquéllos que ministran por conocimiento y no por el Espíritu no están regenerados. Ellos no pueden darle vida a otros, la cosa que ellos mismos no poseen. Sin la vida de Dios viviendo en nosotros, y sin el don del bautismo en el Espíritu Santo, no pudieramos gozosamente y con paz endurar las persecuciones, los fuegos de prueba, y las tribulaciones que le vienen a todos que tienen la vida de Dios viviendo, creciendo, y trabajando activamente en ellos.72

El tercer capítulo de la primera epístola de Pedro nos dice como "esperaba la paciencia de Dios en los días de Noé, mientras se preparaba el arca, en la cual pocas personas, es decir, ocho, fueron salvadas por agua [y el resto del mundo fue crucificado, enterrado por aquella misma agua]. El bautismo que corresponde a esto ahora nos salva (no quitando las inmundicias de la carne, sino como la aspiración de una buena conciencia hacia Dios) por la resurrección de Jesucristo."73 Pedro declaró que nada sino nuestro pasar por el bautismo interno puede salvarnos y sí nos salvará. Jesús declaró de nuevo, "El que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios."74

Pedro firmemente cree en nuestra salvación por este bautismo interno, así como él creyó en la salvación de Noé y su familia por el bautismo. Esta salvación fue vista cuando Noé y su familia que creían en Dios, fueron salvos del mundo que fue crucificado, bautizado, y enterrado por el agua.75 Noé y su familia fueron resucitados fuera del agua, saliendo de aquella misma agua por el mismo bautismo. Este bautismo prefiguró la obra futura que el Espíritu Santo haría en las vidas de los hombres después de la muerte, del entierro, la resurrección y ascensión al Cielo de Cristo. Estaban en el arca, el cual es simbólico de la vida de Cristo salvándonos del mundo.76 Esto muestra la condenación de Dios al mundo y todo lo que está en él, Su entierro de ello, y Su salvación que le es dado a aquéllos que son piadosos por la muerte, el entierro, y la ascensión de Cristo.

Después de que Cristo acabe con la orden mundial babilónica, el reino de Dios reinará para siempre.77 El fin de Babilonia, la orden mundial, vendrá a través de la piedra [Cristo] que fue cortada sin manos [el Dios Mismo, no creado].78 Herirá la imagen [la figura de Babilonia] en sus pies de hierro y de barro cocido, y los desmenuzará.79 Cristo destruirá la capacidad de este reino de seguir continuando.80 Cristo conducirá la nueva nación victoriosa de creyentes verdaderos, los que han perseverado por su fe y por su bautismo.81 Esta es la piedra que destrozará a Satanás, su reino, su orden de las cosas en el mundo, y a esos miembros de la humanidad que siguen su imagen orgullosa, "Babilonia."82 Y en este tiempo, "Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de Su Cristo; y El reinará por los siglos de los siglos."83

Sabemos que este sistema mundial en que vivimos es ese reino que está predestinado y condenado a la destrucción, Babilonia.84 Estamos viviendo en un mundo condenado. La vida de Dios en nosotros se mantiene viva y crece cada día por la Palabra de Dios, que es Espíritu y vida, el árbol de vida.85 La muerte eterna es encontrada viviendo según el árbol de la ciencia del bien y del mal, el sistema mundial, y el conocimiento del hombre. Esto incluye la política, la educación, la literatura, la supuesta ciencia,86 el arte, el comercio,87 la música, el vicio, y la época de máquinas computarizadas, que es el árbol de la ciencia del bien y el mal.

Después de la muerte de Cristo en la cruz, que incluyó clavar en la cruz el viejo mundo y todo lo que le pertenecía, El resucitó de entre los muertos, ascendió al Cielo y "está a la diestra de Dios; y a El están sujetos ángeles, autoridades y potestades."88"Y juntamente con El nos resucitó [con El por Su bautismo a Su muerte, Su entierro, y Su resurrección a la vida], y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús."89 Dios puso a Su Hijo supremo sobre todo, e hizo a todas las autoridades Sus súbditos.90

El Señor le ordenó a cada discípulo a que fuera por todo el mundo y le predicara el evangelio a toda criatura.91 Es decir, tenemos que sembrar la semilla del Espíritu y la vida de Dios en cada persona de modo que los que creen todo lo que Cristo dijo e hizo sean bautizados en Su muerte, entierro, y vida resucitada.92 Ellos serán salvos, regenerados, BAUTIZADOS.93

El Apóstol Juan, en el libro del Apocalipsis, fue llevado por el Espíritu Santo al desierto.94 El séptimo ángel le mostró el sistema mundial de Satanás, Babilonia, que Jesús llama "LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA."95 La clase de abominación de la cual está llena este sistema mundial es la abominación de blasfemia.96 Los reyes del mundo han cometido estas abominaciones [la peor clase de pecado imperdonable]. Los líderes del mundo en la política,97 la religión carnal98 y el comercio,99 al unirse con la gran ramera en sus blasfemias, han influenciado a los habitantes de la tierra a participar o beber hasta quedar "embriagado[s] con el vino de su fornicación," que son otra vez blasfemias contra Dios y los hijos de Dios.100 Ellos creen en el sistema mundial más bien que en el sistema de Dios. Creen en la vida de este mundo presente más bien que en la vida eterna del mundo celestial de Dios.101 Esto es desafortunado para ellos.

Al momento de la hora que la blasfemia del sistema mundial alcanzará su punto (y esa hora está a la mano), cada aspecto de él será revelado ser anti-Cristiano y anti-Cristo a aquéllos cuyos ojos sean abiertos.102 Este es el vino malvado del cual habla la Biblia que causa a la población entera del mundo a blasfemar contra Dios, creyendo en el sistema mundial y sus doctrinas satánicas sobre la Palabra viva y santa de Dios, que es cumplida diariamente por las centenares de profecías de los últimos días que han venido a pasar.103 Están embriagados con la fornicación de su blasfemia, significando que no tienen sentido debido a las tonterías destructoras que se le han metido con propagandas incluyendo las mentiras que les dijeron los medios de comunicación sobre lo poderoso que es la orden mundial y lo débil que es el Dios Todopoderoso.104 Esta fornicación, esta blasfemia, causa al mundo entero creer la alucinación que el sistema mundial es algo más que una obra de Satanás condenada, predestinada a la destrucción, y acabada, una obra compuesta de seres humanos engañados cuyos cerebros se han llenado hasta la cima con las ideas absurdas que han emanado de su amo, el diablo, a través de sus siervos mentalmente trastornados en el mundo.

La idea de Babilonia y de construir la torre de Babel al Cielo son ambas quimeras absurdas de Satanás.C Dios destruyó a Babel y puso la confusión de idiomas sobre ellos. Babilonia realmente quemará.105 "Lo insensato de Dios es más sabio que los hombres, y lo débil de Dios es más fuerte que los hombres."106 Dios también declara que, "El hombre vano se hará entendido, cuando un pollino de asno montés nazca hombre."107 El hombre, Dios dijo, "es un gusano."108 "El hombre nacido de mujer, corto de días, y hastiado de sinsabores."109 Su vida es temporal, "como la hierba,"110 "neblina,"111 "como sombra."112 "He aquí, en Sus siervos no confía, y notó necedad en Sus ángeles; ¡Cuánto más en los que habitan en casas de barro, cuyos cimientos están en el polvo, y que serán quebrantados por la polilla!"113"¿No ha enloquecido Dios la sabiduría del mundo?"114 "Porque la sabiduría de este mundo es insensatez para con Dios."115

La gente de este mundo tienen el cerebro tan dañado por este sistema mundial que fue primeramente creado y luego gobernado por el insano y condenado Satanás116 que creen estar bien informados. En actualidad, no saben nada más que lo que su líder Satanás sabe y les ha enseñado, mentiras y asesinato. ¡¡Han sido engañados con falsas ilusiones117 y creen en la mentira de que el mundo, su sistema, y Satanás nunca terminarán!! Pero Jesús dijo, "Consumado es."118

Algunos creen la falsa ilusión que no hay Cielo ni Infierno. Algunos creen la falsa ilusión que Dios es todo amor y no ira, pero Dios es un terror para los que no lo obedecen.119 Dios dice claramente que el mundo pronto terminará por Sus catorce plagas llenas de ira, incluyendo un terremoto mayor mundial y un fuego grande.120 ¡Ay de los moradores de la tierra y del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, sabiendo que tiene poco tiempo."121 Este será un fuego y una llama caliente tan enorme que derretirá los mismos elementos del Cielo y la tierra.122 El hace "un Cielo nuevo y una tierra nueva."123 El dice, "He aquí, Yo hago nuevas todas las cosas."124 Pero el mundo, siendo cegado por Satanás, siente que es mucho más beneficioso dar su fuerza al dragón, "la serpiente antigua, que se llama Diablo,"125 más bien que servirle a Dios, el Unico que puede darles vida eterna y todos Sus otros preciosos dones.
"El dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos."126 Satanás "engaña al mundo entero."127 Este engaño continuará hasta el día que el Cielo se desvanezca como un pergamino que se enrolla; y todo monte y toda isla se remueva de su lugar.128 Entonces se doblará cada rodilla y cada lengüa confesará que Jesús es el Rey de reyes y Señor de señores, no el diablo, ni los embajadores del diablo, ni el sistema mundial del diablo, sino Jesús.129 Como no creyeron que Jesús es el Rey de reyes y Señor de señores cuando la salvación había sido disponible para ellos, le rogarán a los montes y a las peñas que caigan sobre ellos y los escondan del rostro de Aquel que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero [Cristo].130 Pero su oración no les hará ningún bien.131 "Porque juicio sin misericordia se hará con aquel que no hiciere misericordia."132

"Porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos."133 Nuestra muerte, nuestro entierro, y nuestra resurrección, que incluye haber sido convertidos en nuevas criaturas por fe en el bautismo, tiene que ocurrir solamente en la cruz de multiuso y que contiene todo.134 Se hace claro en las siguientes palabras en Romanos 6:3: "¿O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en Su muerte?" En este versículo de la escritura, las dos fases del bautismo interno se demuestran claramente. Es nuestro bautismo en dos reinos. Primeramente, nosotros que creemos "hemos sido bautizados en Su muerte." Esto es una verdad poderosa, pero es solamente mitad del poder de ello. En segundo lugar, el mismo versículo dice que "hemos sido bautizados en Cristo Jesús." Un bautismo en la muerte de Cristo Jesús que es la vida, termina nuestra relación con este mundo, pero un bautismo en Cristo Jesús como persona viva que es la cabeza de una nación santa, una nueva raza, abre un mundo nuevo, en donde sólo mora la justicia.135

Este nuevo mundo se hizo disponible para el mundo entero el día que levantaron a Cristo en la cruz. El dijo, "Y Yo, si fuere levantado de la tierra, a todos atraeré a Mí Mismo."136 Fue entonces que El atrajo a cada alma regenerada a Sí Mismo.

Siendo unidos en matrimonio por Su vida viviendo en nosotros nos causa ser uno en la vida de Dios.137 "Un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación; un Señor, una fe, un bautismo [en muerte y vida], un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos [los salvos]."138

Es eternamente peligroso para nuestras almas pensar que podemos cambiar algo en la Palabra de Dios.139 Cada Palabra que Dios dijo hace mucha diferencia en el alma de cada persona, porque cada Palabra es la vida de Dios para su alma.140 Por lo tanto, nosotros sabemos que Dios toma en serio cada Palabra que El dice. Esta es la razón por la cual cada uno, para vivir, tiene que creer cada Palabra que El jamás haya dicho.141

Los bebés no pueden ser bautizados en agua. Es contra las escrituras bautizarlos porque "donde no hay ley, tampoco hay transgresión."142 La gente no debe ser bautizada en agua hasta que sean salvos y la vida de Dios haya entrado en ellos. Por lo tanto, los bebés no pueden creer ambos porque no tienen ningún conocimiento del pecado y porque el bautismo de agua solamente tiene significado después del bautismo interno. Es contra las escrituras bautizar a los bebés. Si mueren, son salvos. El ladrón en la cruz al lado de Jesús tampoco necesitó ser bautizado en agua, porque él tenía el verdadero bautismo interno y fue internamente regenerado, nacido de nuevo del Espíritu.143 El murió y siguió a Cristo al paraíso ese mismo día. Sabemos esto porque Jesús dijo que él lo seguiría, no en el mundo, sino en el paraíso.144

Jesús dijo, "Os es necesario nacer de nuevo."145 Yendo a la iglesia, teniendo buenos morales, leyendo la Biblia, siendo perseguido, ayunando y orando, tomando comunión, participando en costumbres, cantando himnos, siendo una buena persona, alimentando y vistiendo a la gente, visitando a gente en las prisiones y en los hospitales, y teniendo buenos pensamientos—nada de esto es suficiente porque Jesús dijo, ¡¡"OS ES NECESARIO NACER DE NUEVO"!! "de agua y del Espíritu."146

La vida de Satanás, con su ley del pecado y de la muerte que Dios, a través de Pablo, dijo que mora en nuestra carne, tiene que ser constantemente vigilada.147 Tiene que ser mortificada lo cual es igual que la cruz, nuestro bautismo en la muerte de Cristo, y Su entierro.148 Tiene que ser constantemente mantenida debajo del agua en entierro por el poder de la vida de Dios continuamente resucitada y viva en nosotros.149

La Palabra declara que las tres fuerzas satánicas son el mundo, la carne, y el diablo.150 Todos éstos están en oposición al Dios el Padre, Dios el Hijo, Dios el Espíritu Santo, y Su novia, que son uno. El mundo está totalmente contra el Padre como Creador del Cielo, de la tierra, y de todo que está en el.151 Cuando Dios vino al mundo como hombre en Jesús, El le destruyó el sistema de Satanás a todos aquellos que vienen a El.152 La razón por la cual el sistema mundial de Satanás está luchando tanto contra los Cristianos hoy día es porque estamos tomando de nuevo al reino de Dios por la vida de Dios en nosotros (que es la gracia de Dios).153

El trabajo de Satanás ha sido todo en vano. El ha trabajado invisiblemente todos estos años para nada.154 Ahora él está en un estado de pánico furioso.155 El se demuestra abiertamente a sí mismo como el archienemigo de Cristo y del Cristianismo. El y su orden mundial dicen, "¿Qué es la diferencia si salimos del encubierto y somos conocidos? Todo está perdido de todos modos. Se acabó. ¿A quién le importa si el mundo sabe que somos corruptos, malvados, y perversos?" El Diablo sabe que pronto estará quemando en el fuego del Infierno para siempre, junto con todos aquellos que neciamente lo han seguido.156

¿Qué podría hacer Satanás que sería más demoníaco que clavar al Señor de gloria a una cruz y de allí en adelante perseguir a los Cristianos en quienes El vive?157 ¿Y qué podría hacer Dios como Cristo para demostrarnos más de Su poder que resucitarse El Mismo de entre los muertos, ascender a Su reino, y comenzar a reinar de esa alta posición ventajosa en los cuerpos de Sus millones de seguidores aquí abajo quiénes están escuchándolo atentamente para cada instrucción?158 Si estamos en Cristo, bautizados, nos sentamos allí con El y reinamos con El.159 Si somos del bautismo de Cristo, El vivirá en nuestros cuerpos y activamente obrará con nosotros aquí en este mundo.160

El Señor permitió que Su crucifixión ocurriera no sólo para nuestra salvación, nuestro bautismo, sino también para terminar el reinado de Satanás y su sistema mundial por el mismo bautismo interno.161 El también quería mostrar la altura, la profundidad, la anchura, y la longitud de Su amor y de la maldad de Satanás.162 Por nuestro conocimiento de la maldad de Satanás, sabiendo que él crucificó al Señor de gloria, sabemos bien quién es él y quién es Cristo. Por lo tanto, somos capaces de elegir quién será nuestro amo. Es sólo una cuestión de nuestra preferencia, una cuestión de nuestra voluntad, una cuestión de a quién deseamos servir y con quién deseamos pasar la eternidad. Una cosa es por seguro, tenemos que elegir uno o el otro.163 ¿Cuál escogerá? Escogerá usted al Señor Mismo de gloria, El que puso Su vida para usted, la tomó de nuevo, y está vivo por siempre jamás para que usted pueda tener vida eterna?164¿O elegirá al que a través de los elementos del mundo, clavó al mismo Dios de gloria en la cruz, y pasará usted la eternidad con él en la llama insaciable? Dios permitió que este líder vicioso, demoníaco del sistema mundial sea visto ambos por el Cielo y la tierra, por los ángeles y los habitantes del mundo, de modo que él pueda ser juzgado y arrojado fuera por todos los que aman la vida.165 "Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores."166 Este es el propósito eterno de Dios; El le ha hecho disponible al mundo entero la salvación.167 Sin embargo, cada persona tiene que escoger individualmente si quiere que el propósito de Dios sea cumplido en él por bautismo, o quiere que el propósito de Satanás sea cumplido en él negando a Cristo.168 La opción es suya.

Si usted escoge entrar al bautismo con Cristo para Su propósito, usted no puede entrar en el bautismo sólo. Usted tiene que llevarse al mundo entero y su sistema, dejándolo enterrado en bautismo o separación, antes de que pueda entrar al nuevo mundo celestial de Dios, así como Noé y los hijos de Israel dejaron atrás su viejo mundo cuando la inundación y el Mar Rojo los separaron o los bautizaron ambos de él y de sus enemigos.169 Se encontraron en un mundo nuevo. Lot y sus dos hijas también entraron en su mundo nuevo cuando Dios los separó o los bautizó de su viejo mundo por fuego.170

Cualquier persona que desea bautismo o separación de su viejo mundo por este bautismo espiritual interno de Dios, tiene que permanecer separado o bautizado. No podemos desear regresar a nuestro mundo viejo, como lo hizo la esposa de Lot.171 Ella deseó un mundo que era de ser nada más que un mundo de cenizas. Este mundo presente en que vivimos pronto será reducido a cenizas también.172 Si su deseo es dejarlo antes de que esto suceda, usted puede hacerlo inmediatamente diciendo esta oración:

Oración

Mi Señor y mi Dios, ten misericordia de mi alma pecadora.1 Yo creo que Jesucristo es el Hijo del Dios Viviente.2 Creo que Él murió en la cruz y derramó Su preciosa sangre por el perdón de todos mis pecados. 3 Creo que Dios resucitó a Jesús de entre los muertos por el poder del Espíritu Santo4 y que Él está sentado a la mano derecha de Dios en este momento, escuchando mi confesión de pecado y esta oración. 5 Abro la puerta de mi corazón, y Te invito en mi corazón Señor Jesús. 6 Lava todos mis pecados sucios en la preciosa sangre que Tú derramaste por mí en la cruz del Calvario. 7 Tú no me rechazarás, Señor Jesús; Tú perdonarás mis pecados y salvarás mi alma. Lo sé porque Tu Palabra, así lo dice. 8 Tu Palabra dice que Tú no rechazarás a nadie, y eso me incluye a mí.9 Por eso, sé que me has escuchado, sé que me has contestado, y sé que soy salvo.Por eso, sé que me has escuchado, sé que me has contestado, y sé que soy salvo.10 Y Te doy gracias, Señor Jesús, por salvar mi alma, y Te mostraré mi agradecimiento haciendo como Tú mandas y no pecar más. 11

Usted acaba de completar el primer paso en una serie de cinco pasos que se requieren para recibir la salvación. Su segundo paso es negarse a sí mismo y aceptar la cruz cada día con el propósito de mortificarse, es decir, para darle muerte a su propia voluntad, a su ser autosuficiente, y al mundo con todos sus deseos. Todos estos tienen que ser bautizados en la muerte de Cristo. El tercer paso es su resurrección de la vida satánica de Adán a la vida libre de pecados de Cristo. El cuarto paso es su ascensión a una posición de autoridad para reinar por Dios en la tierra, y el quinto paso es reinar por Dios en la tierra hasta el fin con el propósito de traer el reino del Cielo a la tierra. Usted tiene que aprender la Palabra de Dios, luego someterse y hacer lo que la Palabra dice, para que la Iglesia y el mundo puedan ver pruebas de su sumisión a la Palabra de Dios, Su orden, y Su autoridad en usted y por usted.
Alabado sea el Señor. Que Dios lo recompense abundantemente.

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© Propiedad literaria marzo, 1998, Todo derecho reservado Pastor Mundial Tony Alamo ® Registrado marzo, 1998
Tony Alamo Christian Ministries is a division of Music Square Church, Inc.


Notas del Bautismo":vuelva arriba

1 1 Jn. 2:18, 22, 4:3, 2 Jn. 7vuelva

2 Mr. 16:16, Jn. 1:12, 3:16, Hch. 15:11, 16:31 vuelva

3 Jn. 1:14-17, 14:6, 1 Jn. 5:20, Ap. 3:14 vuelva

4 Ro. 2:28-29 vuelva

5 Ro. 8:13-17, Gá. 2:20, 4:4-7 vuelva

6 Hch. 20:28, 1 Co. 12:28, Ef. 1:22-23 vuelva

7 Mt. 28:19, Gá. 2:20, 1 Jn. 5:20-21 vuelva

8 Mt. 28:19-20, Mr. 1:17, 5:19-20, 16:15, Lc. 9:60, 10:1-2, 14:23, 24:46-48 vuelva

9 Hch. 2:14-41, 3:11-26, 4:8-14, 5:19-33, 8:26-40 vuelva

10 Ro. 6:3-5, Col. 2:11-12 vuelva

11 Jn. 14:23 vuelva

12 2 Co. 6:16 vuelva

13 Jer. 31:33 vuelva

14 Jn. 3:5 vuelva

15 Ro. 6:4-6, 1 Co. 9:27, Col. 2:11-13 vuelva

16 Jn. 17:21-23, Ro. 6:5-11, 1 Co. 15:22-23 vuelva

17 Ro. 6:1-22, 8:13, Ef. 4:17-32, He. 12:14 vuelva

18 Jn. 4:24 A. 1 Co. 1:5 B. Gn. 1:26-27, Ro. 8:29-30, 1 Co. 6:19-20, Ef. 2:19-22 vuelva

19 Jn. 4:24 A. 1 Co. 1:5 B. Gn. 1:26-27, Ro. 8:29-30, 1 Co. 6:19-20, Ef. 2:19-22 vuelva

20 Jn. 3:3-7 vuelva

21 Ro. 8:6-11, 13-16 vuelva

22 Jn. 17:20-23, Ro. 6:4-11 vuelva

23 Ap. 21:2, Ro. 7:4-6, 12:5, Ef. 5:30, 1 P. 2:5 vuelva

24 Hch. 17:29-31 vuelva

25 Ro. 8:6-9, 1 Co. 3:1, 3, 4:20-21, Stg. 4:4 vuelva

26 Jn. 15:1-8, 16, Ef. 3:4-11 vuelva

27 Ro. 6:3-5 vuelva

28 Jn. 4:14 vuelva

29 Jn. 6:63, 15:3-5, Ef. 5: 25-27 vuelva

30 Ro. 6:4-6, Col. 2:12, Ap. 21:6 vuelva

31 Jn. 1:1,14, Col. 3:4, 1 Jn. 5:11, Ap. 19:13 vuelva

32 Mr. 1:7-8, Jn. 1:32-34, 11:25, Hch. 11:16-17 vuelva

33 Ez. 47:1-9, Jn. 4:10, 13-14, Ap. 21:6-7 vuelva

34 2 Ti. 2:11 vuelva

35 Ef. 2:1 vuelva

36 Ec. 9:5 vuelva

37 1 Co. 2:14 vuelva

38 Mr.16:16 vuelva

39 Mt. 7:24-27, Mr. 4:14-20, Hch. 10:43, Stg. 1:21 vuelva

40 Ro. 2:13, Stg. 2:17-26 vuelva

41 Stg. 2:19-20 vuelva

42 Mt. 19:26 vuelva

43 Fil. 2:13, He. 13:21 vuelva

44 Fil. 2:13, He. 13:21 vuelva

45 Lc. 9:23 vuelva

46 Mt. 10:38 vuelva

47 1 Jn. 2:15 vuelva

48 Gn. 2:16-17 vuelva

49 Gn. 3:9, 17-19 vuelva

50 Gn. 3:22-24 vuelva

51 Gn. 3:8-19, Ef. 2:11-16 vuelva

52 Gn. 3:17-19 vuelva

53 Gn. 4:20-22 vuelva

54 Gn. 3:19, Ro. 5:14 vuelva

55 Jn. 6:33-35, 6:48-58 veulva

56 Is. 24:19-20, Mt. 24:30, 2 Ts. 1:7-9, 2 P. 3:10-12, Jud. 14-15, Ap.1:5-7, 6:16-17, 14:15-19, 20:11, 21:1 vuelva

57 Ap.17:5 vuelva

58 1 Jn. 2:15 vuelva

59 Ap.18:4 vuelva

60 1 Co. 6:9-11, Ef. 2:11-16, Fil. 2:13-16, 1 P. 4:1-5, Ap.18:4 vuelva

61 Is. 44:3, Jl. 2:28-29, Mt. 3:11, Lc. 24:49, Hch. 2:1-4, 38-39 vuelva

62 Lc. 24:49, Hch. 1:8, 2:38, 8:15-17 vuelva

63 Ef. 5:26, He.10:22 vuelva

64 1 Co. 3:6-7, 1 Ts. 3:12 vuelva

65 1 Co. 3:9, 12:4-11, 27-28, Ef. 2:20-22 vuelva

66 1 Co. 3:6 vuelva

67 Jn.13:10vuelva

68 Jn. 7:38,14:16,15:26,16:7, Hch. 8:14-17, 9:17-18, 10:44-48 vuelva

69 Jn.15:1-6, Ro. 8:4-9 vuelva

70 1 Co. 8:1 vuelva

71 Ro. 8:10, 2 Co. 3:6 vuelva

72 Lc. 24:47-49, Jn. 14:16-18, 27, 16:7, 1 Co. 12:31 vuelva

73 1 P. 3:20-21 vuelva

74 Jn. 3:5 vuelva

75 Gn. 6:17-18, 7:11-23, 8:15-19 vuelva

76 Mt. 24:37-39 vuelva

77 Dn. 7:13-14, Ap.11:15 vuelva

78 Dn. 2:34-35, 44-45 vuelva

79 Dn. 2:34 vuelva

80 Dn. 2:34-35, 44, 7:13-14, 17-18, 22-27 vuelva

81 1 P. 2:9-10 vuelva

82 Dn. 2:31-45, Ap. 14:6-8, 16:19, 18:1-8 vuelva

83 Ap. 11:15, Dn. 2:44-45 vuelva

84 Ap. 14:8, 17:8-18, cap. 18 vuelva

85 Sal.119:105, Pr. 4:4-6, 20-22, 7:1-3, Jn. 6:63, 68 vuelva

86 1 Ti. 6:20 vuelva

87 Ap. 18:9-19 vuelva

88 1 P. 3:22, Hch. 1:9 vuelva

89 Ef. 2:6vuelva

90 1 Co. 1:24, 30, Ef. 1:20-22 vuelva

91 Mr. 16:15 vuelva

92 Jn. 21:15-17, Ro. 10:13-17, 2 Co. 4:1-7, Gá. 1:3-4, 2 Ti. 4:2, 5, Tit. 2:13-15, 1 P. 5:2 vuelva

93 Lc. 8:15, Hch. 16:31, Ro. 10:9-13 vuelva

94 Ap. 17:3 vuelva

95 Ap. 17:5 vuelva

96 Ap. 13:1, 5-6, 17:3 vuelva

97 Ap. cap. 13 vuelva

98 Ap. cap. 17 vuelva

99 Ap. cap. 18 vuelva

100 Ap. 17:1-2, 18:2-3 vuelva

101 Mt. 6:19-21, Col. 3:1-2, 2 Ti. 4:10 vuelva

102 2 Ts. 2:1-12, 1 P. 4:7, 1 Jn. 2:15-17, Ap. 1:3, 13:6-8 vuelva

103 Gn. 12:1-3, 2 Cr. 36:21-23, Is. 43:9-12, Os. 1:10, Jl. 2:28-30, Zac. 9:9, Mi. 5:2, Mal. 3:1, Mt. 24:2-27, 37-39, Lc. 21:6-33, 1 Ts. 5:2, 1 Ti. 4:1-3, 2 Ti. 3:1-7, 1 Jn. 2:18-19, Jud. 17-19, Ap. 2:10, 17:1-2, 18:3 vuelva

104 Ap. 13:4-9 C. 1 Co. 3:11 vuelva

105 Gn. 11:6-9 vuelva

106 Co. 1:25 vuelva

107 Job 11:12 vuelva

108 Job 25:6vuelva

109 Job 14:1 vuelva

110 Sal. 103:15 vuelva

111 Stg. 4:14 vuelva

112 Sal. 102:11 vuelva

113 Job 4:18-19 vuelva

114 1 Co. 1:20 vuelva

115 1 Co. 3:19 vuelva

116 Mt. 15:14, 1 Co. 2:14, 2 Co. 4:4, Ap. 12:12, 18:21-23, 20:10 vuelva

117 2 Ti. 4:3-4, 2 Ts. 2:8-12 vuelva

118 Jn. 19:30 vuelva

119 Lv. 26:15-33, 1 R. 13:26, Esd. 8:22, Neh. 9:26-27, Ro. 2:8-9, 2 Co. 5:10-11 vuelva

120 Sal. 11:6, Ez. 38:22, Mt. 24:7, 2 P. 3:10, 12, Ap. 8:7-12, 9:1-19, 11:15, 19, cap. 15, 20:9 vuelva

121 Ap. 12:12 vuelva

122 2 P. 3:10, 12 vuelva

123 Ap. 21:1 vuelva

124 Ap. 21:5, 2 P. 3:13 vuelva

125 Ap. 12:9, 17:12-14 vuelva

126 2 Co. 4:4 vuelva

127 Ap. 12:9 vuelva

128 Ap. 6:14, Is. 34:4, Mt. 24:30-31, 26:64, Jud. 14-15, Ap. 1:7, 6:14-17 vuelva

129 Is. 45:23-24, Ro. 14:11-12, Fil. 2:10-11 vuelva

130 Ap. 6:16 vuelva

131 Ap. 9:6 vuelva

132 Stg. 2:13, Pr. 11:31, 12:14, 24:11-12, Jer. 17:10, 32:19, Ez. 7:3-4, Mt. 25:31-33, 41-46, Ro. 2:5-9, Col. 3:25 vuelva

133 Gá. 3:27 vuelva

134 Ro. 6:3-6 vuelva

135 1 Co. 11:3, 1 P. 2:7-12, 4:1-2, 2 P. 3:13-14 vuelva

136 Jn. 12:32 vuelva

137 Jn. 17:11, 20-23, 1 Co. 6:17, 8:6 vuelva

138 Ef. 4:4-6 vuelva

139 Dt. 4:2, Mt. 4:4, Gá. 1:8-9, Ap. 22:18-19 vuelva

140 Dt. 8:3, Sal. 19:7-11, Jn. 5:24-25, 8:31-32, 1 Co. 1:5, Fil. 2:16, Stg. 1:21 vuelva

141 Mt. 4:4, Mr. 16:16, Jn. 6:12-13 vuelva

142 Ro. 4:15 vuelva

143 Jn. 5:24, Ro. 2:28-29 vuelva

144 Lc. 23:42-43 vuelva

145 Jn. 3:7 vuelva

146 Jn. 3:5, 7 vuelva

147 Ro. 7:17-18, 8:5-10, 1 Co. 9:27 vuelva

148 Ro. 6:3-13, Col. 2:12 vuelva

149 Ro. 6:3-4, 1 Co. 12:13, Gá. 3:27, 1 P. 3:18, 21 vuelva

150 Mt. 13:38-39, Ro. 7:18-23, 8:5-9, 2 Co. 4:4, Ef. 2:2-3, 6:12, Stg. 4:4, 1 P. 5:8, 1 Jn. 2:15-16 vuelva

151 Jn. 15:18-23, Stg. 4:4, 1 Jn. 2:15-17 vuelva

152 Jn. 12:31, Ef. 2:1-7, Col. 1:12-14, 2:13-15, 1 Jn. 4:4 vuelva

153 Hch. 26:16-18, Col. 1:12-14, 2 Co. 5:18-19, 1 Jn. 3:8 vuelva

154 Job, Mr. 1:13, Ap. 12:10-11 vuelva

155 Ap. 12:12 vuelva

156 Mt. 25:41, Ap. 20:1-3, 10 vuelva

157 Mt. 5:10-12, 10:17-22, 24:9, Jn. 15:18-21, 16:2, 19:16-18, 1 Co. 2:8, Hch. 7:52, 2 Ti. 3:12, Ap. 7:14 vuelva

158 Jn. 10:17-18, Hch. 2:31-36, Ef. 2:5-7, Ap. 14:3-4 vuelva

159 2 Ti. 2:12, Ap. 5:10 vuelva

160 Mt. 5:16, Jn. 15:4, Ef. 2:10, 1 Ti. 6:17-19, 2 Ti. 3:16-17, Tit. 2:14, 3:8 vuelva

161 Jn. 12:31-32, 17:4 vuelva

162 Ef. 3:17-19 vuelva

163 Mt. 6:24 vuelva

164 1 Jn. 3:16, Ap. 1:18 vuelva

165 Jn. 12:31 vuelva

166 1 Ti. 1:15, He. 7:24-25 vuelva

167 He. 7:22-25, 1 Jn. 2:25, 4:9-10, Ap. 3:20, 22:17 vuelva

168 Jos. 24:15, Lc. 16:13 vuelva

169 Ex. 14:16-30 vuelva

170 Gn. 19:15-16, 24 vuelva

171 Gn. 19:26 172. 2 P. 3:7, 12 vuelva

172 2 P. 3:7, 12 vuelva

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Notas de la Oración: vuelva arriba

1. Sal 51:5, Ro. 3:10-12, 23 vuelva

2. Mt. 26:63-64, 27:54, Lc. 1:30-33, Jn. 9:35-37, Ro. 1:3-4 vuelva

3. Hch. 4:12, 20:28, Ro. 3:25, 1 Jn. 1:7, Ap. 5:9 vuelva

4. Sal. 16:9-10, Mt. 28:5-7, Mr. 16:9, Jn. 2:19, 21, 10:17-18, 11:25, Hch. 2:24, 3:15, Ro. 8:11, 1 Co. 15:3-6 vuelva

5. Lc. 22:69, Hch. 2:25-36, He. 10:12-13 vuelva

6. Ro. 8:11, 1 Co. 3:16, Ap. 3:20 vuelva

7. Ef. 2:13-22, He. 9:22, 13:12, 20-21, 1 Jn. 1:7, Ap. 1:5, 7:14 Ef. 2:13-22, He. 9:22, 13:12, 20-21, 1 Jn. 1:7, Ap. 1:5, 7:14 vuelva

8. Mt. 26:28, Hch. 2:21, 4:12, Ef. 1:7, Col. 1:14 vuelva

9. Ro. 10:13, Stg. 4:2-3 vuelva

10. He. 11:6 vuelva

11. Jn. 8:11, 1 Co. 15:10, Ap. 7:14, 22:14 vuelva

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