FUEGO EN LA PRISION
Por
Tony Alamo
El primer capítulo del libro profético de los últimos días llamado Joel habla del deterioro de la doctrina verdadera de Dios a través de los siglos. Este deterioro vino a través de la enseñanza falsa por medio de los falsos profetas.1 En el libro de Joel, los falsos maestros y profetas son representados simbólicamente por insectos y gusanos que consumen la verdad de Dios sustituyéndola con falsas doctrinas.2 “Lo que quedó de la oruga [de la Palabra de Dios] comió el saltón, y lo que quedó del saltón [de la Palabra de Dios] comió el revoltón; y la langosta comió lo que del revoltón había quedado [de la Palabra de Dios].”3
Los falsos profetas de hoy enseñan que el Antiguo Testamento es estricto pero que el Nuevo Testamento no lo es. Dicen que ya no estamos bajo la pena de la ley y eso es verdad, pero solamente porque Cristo nos ha quitado nuestros pecados con la sangre que El vertió en el Calvario.4 Sin embargo, no le dicen que si usted peca de nuevo, la ley lo condenará otra vez.5 No hay diferencia entre el Antiguo y el Nuevo Testamento en cuanto a sus descripciones de lo que es la ley, de la severidad de la ley o de la necesidad de guardar la ley. El Mesías hace que el Nuevo Testamento parezca más estricto enseñando el claro significado del Antiguo Testamento. Pablo declaró, “Y estas cosas [del Antiguo Testamento] les acontecieron [en el Antiguo Testamento] como ejemplo, y están escritas para amonestarnos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines de los siglos.”6 Si no leyéramos el Antiguo Testamento, no podríamos ser advertidos por estos ejemplos. 𠇊sí que, el que piensa estar firme [escrituralmente], mire que no caiga.”7 Cristo nos demuestra que Dios y Su Palabra, que es Cristo, nunca cambia.8 La única parte de la ley que fue eliminada y no debe ser guardada son las ordenanzas del Antiguo Testamento de los sacrificios y festejos ceremoniales que anteriormente representaron el sacrificio verdadero del Mesías, el Cordero de Dios.9
La ley moral de Dios nunca ha cambiado y nunca cambiará ni se ínvalidará.10 La ley no era una sombra ni un símbolo de las cosas venideras, sino es la ley de Dios que nunca debe ser olvidada y nunca debe ser cambiada.11 Dios nunca confió el escribir de la ley a ningún profeta, ni aún a Moisés. Para demostrar su importancia, Dios personalmente escribió esta parte de la Biblia. El la escribió con Su propio dedo en dos tablas de piedra resistente.12 Ahora Dios escribe la ley en nuestros corazones por el Espíritu Santo.13 ¿Por qué escribiría Dios Su ley, por el Espíritu Santo, en nuestros corazones hoy en día si la ley fuese eliminada?14 Su ley es los mandamientos para el mundo. Todo el mundo tiene que obedecer la ley para gobernar su vida mientras exista el mundo.15 Cuando la ley es guardada el caos termina. 𠇎l pecado es infracción de la ley.”16 Por Elohim, nuestro Dios plural [Padre, Hijo, el Espíritu Santo]17viviendo en Su pueblo,18 El les da a Sus hijos mucho más de lo suficiente de Su poder [gracia] para guardar Sus mandamientos estrictos del Nuevo Testamento, que son los mismos mandamientos dados por El al principio del mundo.19
EL NUEVO TESTAMENTO ES MAS ESTRICTO
QUE EL ANTIGUO TESTAMENTO? AQUI HAY ALGUNOS EJEMPLOS
En Mateo 19:8, Jesús dijo que Moisés, “Por la dureza [de vuesrtro] corazón” (los corazones de los hijos de Israel), permitió que un hombre le diera a su mujer una declaración de divorcio por una variedad de razones, incluyendo algunas frívolas.20 El Mesías dijo, “Mas al principio no fue así.”21 Jesús, el Mesías, vino a restaurar y restablecer la rigidez completa de la ley.22 El no vino a eliminar la ley,23 como enseñan hoy los falsos profetas. Jesús declaró que un hombre no puede apartarse de su mujer excepto por la causa de adulterio.24 Una excepción que no es una excepción dada al Apóstol Pablo por el Espíritu sigue: “Pero si el incrédulo se separa, sepárese; pues no está el hermano o la hermana sujeto a servidumbre en semejante caso.”25 Si una mujer deja a su marido piadoso, o si un marido deja a su mujer piadosa o se va de la casa de Dios a pecar de nuevo, la mujer piadosa o el hombre piadoso no están sujetos a ese matrimonio. Pueden casarse de nuevo, pero solamente en el Señor, con un seguidor del Mesías. Un divorcio es aceptable en tal caso.26 Las leyes del Nuevo Testamento parecen ser más estrictas que las del Antiguo Testamento pero no las son. La ley de Dios nunca cambia.27
Jesús dijo, “Cualquiera que mira a una mujer para codiciarla [desearla], ya adulteró con ella en su corazón.”28 Los Diez Mandamientos, la Ley, declara, “No cometerás adulterio,”29 y “No codiciarás la mujer de tu prójimo.”30 Eso quiere decir que usted no puede desearla. Jesús confirma que codiciar a la mujer de otro hombre es igual que cometer adulterio con ella. Jesús intensifica aquí el significado del Antiguo Testamento del adulterio ligándolo con la codicia, deseando a la mujer de otro hombre.
El adulterio contra Dios es cuando cualquier persona codicia o desea una vida de pecado, como aquéllos que una vez fueron salvos pero que de nuevo regresaron a una vida de pecado.31 Esto es como la mujer de Lot.32 En cuanto al cometer adulterio contra Dios, Jesús declara, “Vosotros sois Mis amigos, si hacéis lo que Yo os mando.”33 Si no hacemos todo lo que El dice, entonces, por supuesto, no somos Sus amigos. Hemos cometido adulterio contra El. La novia de Cristo, los hijos de Dios, hacen todo lo que manda el Señor Jesús.
COMPARACIONES
En el Antiguo Testamento, vemos que “El que hiere a alguno, haciéndole así morir, él morirá.”34 Uno tiene que sentir odio antes de herir mortalmente a alguien. En el Nuevo Testamento el significado es claro. El odio por su hermano es asesinato.35 ¿Parece menos estricto lo que Jesús enseña en el Nuevo Testamento de lo que está en el Antiguo Testamento? Recuerde, Dios por Su Espíritu ve dentro de nuestro corazón y conoce nuestros pensamientos. El incluso conoce nuestras intenciones.36 La observación de Dios sobre la humanidad ha existido desde el principio del tiempo.37
COMPARACION DE LOS DIAS DE REPOSO DEL
ANTIGUO Y DEL NUEVO TESTAMENTO
El Día de Reposo en el Antiguo Testamento comenzaba el viernes por la tarde cuando bajaba el sol, y duraba hasta el sábado por la tarde a la puesta del sol.38 Aquello era y sigue siendo el verdadero día de reposo. Como en el Antiguo Testamento, así también está en el Nuevo. En el Nuevo Testamento, Jesús hizo más claro el concepto del Antiguo Testamento diciéndonos que el día de reposo son siete días a la semana, veinticuatro horas al día.39
EL SACERDOCIO DEL NUEVO TESTAMENTO ESTA AHORA PERSONALIZADO HACIENDO LA SANTIDAD
VERDADERAMENTE REALIZABLE
En el Antiguo Testamento, toda la congregación de Israel iba a los sacerdotes levíticos una vez al año con el sacrificio de un animal que representaba a Cristo, de modo que sus pecados pudieran ser perdonados.40 Los sacerdotes oficían los sacrificios ceremoniales ante Dios con el propósito de que los pecados fueran perdonados por verter la sangre simbólica de Cristo.41 En el Nuevo Testamento hay una diferencia radical. Esto es porque el sacrificio verdadero, perfecto y sin pecado vino, pagó por nuestros pecados vertiendo Su sangre, murió, fue juzgado por el Padre, fue castigado en nuestro lugar siendo arrojado al Infierno, resucitó de la muerte, del Infierno y el sepulcro, ascendió al Cielo, y ahora, por el Espíritu Santo, vive en Sus hijos, que se han regenerado espiritualmente por El, el único Dios plural sin pecado, Elohim viviendo en ellos.42 Cada miembro de la congregación entera de los redimidos, el Israel del nuevo pacto el cual es cada seguidor del Mesías nacido de nuevo, se convierte en un sacerdote de Dios.43 Inicialmente, por la oración, entran en contacto con Dios Mismo para el perdón de sus pecados. Por la fe reciben la sangre expiadora del Mesías sobre su alma, y por la fe son salvos, sabiendo que la sangre expiadora del Mesías quita todos los pecados pasados.44 Se les ordena vivir en el Espíritu del Mesías resucitado, Cristo [Yahvahshua45], a partir de ese momento.46
Una vez más, el Mesías es firme cuando El ordena, “Vete, y no peques más,”47 “para que no te venga [nos venga] alguna cosa peor.”48 La cosa peor debería ser saber que estamos condenados mientras todavía vivimos en la tierra, saber que estamos en el camino al Infierno, y saber que no hay nada que se pueda hacer, esperando en un terror doloroso hasta que el aliento se aleje de nuestro cuerpo, sabiendo que seremos sostenidos en una prisión ardiente para siempre. A través de Su siervo Pedro por el Espíritu, el Mesías declara que si pecamos con conocimiento, nosotros seremos como un “perro [que] vuelve a su vómito, y la puerca lavada a revolcarse en el cieno.”49
El Antiguo y el Nuevo Testamento no enseñan ninguna clemencia aquí a menos que el pecado haya sido cometido en ignorancia, así como el Nuevo Testamento no les demuestra ninguna clemencia a los que llegaron a ser Cristianos nacidos de nuevo, pero que luego volvieron a una vida de pecado.50 El Nuevo Testamento hace más clara la ley. El Mesías declara, “No temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a Aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el Infierno,”51 “en el fuego que no puede ser apagado.”52
OTRA COMPARACION
En el Antiguo Testamento, Yahvahshua [Jesús],53 nuestro Elohim,54 exigió que diez por ciento de lo mejor de todo lo que tenían los hijos de Dios tuviera que ser dado a los levitas,55 aquéllos que le ministraban al Señor a nombre de todos los pecadores de Israel.56 En el Nuevo Testamento, los seguidores de Jesús son mandados a dar todo lo que tienen voluntariamente y con celo gozoso.57 Jesús le ordena a Sus hijos, Su rebaño, “Vended lo que poseéis, y dad limosna; haceos bolsas que no se envejezcan, tesoro en los cielos que no se agote, donde ladrón no llega, ni polilla destruye. Porque donde está vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.”58 Para dar énfasis Jesús de nuevo ordena, “Cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee, no puede ser mi discípulo.”59 Si usted no es el discípulo del Señor, usted es el discípulo de Satanás. Jesús dijo que solamente hay dos maestros.60 Usted tiene que amar uno y odiar el otro.61 Este mandamiento estricto de Cristo se obedece con temor en Los Hechos 4:32-35.
En el capítulo dos de Los Hechos así como en el capítulo cuatro, los tres mil salvos,62 junto con los cinco mil salvos63 y otra multitud de almas salvas,64 “perseveraban en la doctrina [estricta] de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones. Y sobrevino temor a toda persona; y muchas maravillas y señales eran hechas por los apóstoles. Todos lo que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas; y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno.”65 𠇊sí que no había entre ellos ningún necesitado; porque todos los que poseían heredades o casas, las vendían, y traían el precio de lo vendido, y lo ponían a los pies de los apóstoles [No pusieron sus ganancias al pie de los sacerdotes principales, el sanedrín, los fariseos, los saduceos, los escribas, los falsos maestros y predicadores, los insectos y los gusanos, como la gente engañada del mundo hacen hoy. Estos fraudes han sido apoyados por la gente ignorante y no tan ignorante de Dios ya por demasiado tiempo.]; y se repartía a cada uno según su necesidad.”66
Dentro de la multitud de creyentes recién salvos del Nuevo Testamento, había una pareja cuyos nombres eran Ananías y Safira. Ellos decidieron no seguir el camino estricto, recto, angosto, la doctrina del Nuevo Testamento del Mesías y Sus apóstoles.67 Ellos obviamente recibieron el mensaje de Satanás que la ley ya no tiene potencia, y la mentira de Satanás que no era necesario guardar la ley del Antiguo Testamento. Es decir, creyeron que el Nuevo Testamento endosó anarquía, y que una pequeña cantidad de pecado estaba bien. Estas son las mismas mentiras que enseñan hoy los insectos y los gusanos.68 El espíritu de Satanás, que engañó a Eva en el jardín,69 les habló a ellos (como les habla a todos hoy en día), diciendo que estaba bien quedarse con parte de la ganancia de la tierra que vendieron. Además, creyeron que estaba bien pecar de nuevo mintiéndoles a los apóstoles acerca de ello, a los que tenían el Espíritu de Dios viviendo en ellos. Según la escritura, ellos le estaban mintiendo al Espíritu Santo. Pedro le hizo a Ananías algunas preguntas directas: “¿Por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espirítu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios. Al oír Ananías estas palabras, cayó y expiró [murió]. Y vino un gran temor sobre todos los que lo oyeron. Y levantándose los jóvenes, lo envolvieron, y sacándolo, lo sepultaron.
“Pasado un lapso como de tres horas, sucedió que entró su mujer, no sabiendo lo que había acontecido. Entonces Pedro le dijo: Dime, ¿vendisteis en tanto la heredad? Y ella dijo: Sí, en tanto.” Entonces Pedro la interrogó como a su esposo Ananías. “¿Por qué convinisteis en tentar al Espirítu del Señor? He aquí a la puerta los pies de los que han sepultado a tu marido, y te sacarán a ti. Al instante ella cayó a los pies de él, y expiró; y cuando entraron los jóvenes, la hallaron muerta; y la sacaron, y la sepultaron junto a su marido. Y vino gran temor sobre toda la iglesia, y sobre todos los que oyeron estas cosas.
“Y por la mano de los apóstoles se hacían muchas señales y prodigios en el pueblo; (y estaban todos unánimes).”70 Estando unánimes quiere decir que todos estaban tan llenos del temor de Dios como lo estuvo Moisés. Moisés atestiguó a esto diciendo, “Y tan terrible era lo que se veía [cuando Dios les habló en el monte], que Moisés dijo: estoy espantado y temblando.”71
En hebreo, la palabra temor es yira, que significa terror o pavor. En griego, la palabra phobos significa la misma cosa, el terror o el pavor de Dios.72 Dondequiera en la Biblia que usted vea la palabra temor, recuerde siempre que significa el terror o el pavor de Dios.73 Moisés continuó, “Por tanto, guárdate, y guarda tu alma con diligencia, para que no te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni se aparten de tu corazón todos los días de tu vida; antes bien, las enseñarás a tus hijos, y a los hijos de tus hijos. El día que estuviste delante de Jehová tu Dios en Horeb, cuando Jehová me dijo: Reúneme el pueblo, para que Yo les haga oír Mis Palabras, las cuales aprenderán, para temerme [estar aterrorizados de Mí] todos los días que vivieren sobre la tierra, y las enseñarán a sus hijos [para que también teman a Dios].”74 La gente de Israel estaba tan aterrorizada de Dios que le dijeron a Moisés, “Habla tú con nosotros, y nosotros oiremos; pero no hable Dios con nosotros, para que no muramos.”75 Dios dijo que no le servirán si no le temen.76 La gente del mundo todavía no teme al Señor Dios.77 Esa es la razón por la cual no le sirven.
Estamos a fines del tiempo.78 Se ha escrito que el mundo entero está engañado por Satanás, sirviéndolo a él más bien que al Señor Dios.79 “El principio de la sabiduría es el temor [o el terror] de Jehová”80 También “el temor [o terror] del Señor es la sabiduría.”81 Esta doctrina aterrorizadora, pavorosa, recta, estrecha, estricta, animadora y alegre del Señor declara que no sólo tenemos que darle a El nuestros tesoros ínfimos, temporales y mundanos, sino que ante todo tenemos que darle a El nuestros seres enteros como sacrificios vivos82 y regocijarnos, agradecidos por la oportunidad de hacerlo.83
El Apóstol Pablo dijo, “Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo [todos los sacrificios tienen que ser puros y sin pecado84], santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.”85 Esto es nuestro deber razonable, vivir una vida sin pecado después de la salvación; porque Dios dio Su querido “unigénito Hijo86” enteramente como un sacrificio sin pecado de modo que podamos tener vida eterna, haciéndonos herederos y coherederos de Dios con Cristo de todo lo que Ellos tienen, y poseerlo con Ellos para siempre.87
SI LE DAMOS NUESTRA VIDA A DIOS EL NOS
LLEVARA A TRAVÉS DE CADA VALLE
En el Antiguo Testamento, si un hombre era casado, había sembrado un viñedo, o había construido una casa, no se le permitía entrar a la guerra por un período de tiempo prescrito.88 Se le daba al hombre una luna de miel de un año con su mujer, tiempo de estar con ella, tiempo de comer de su viñedo, y tiempo de vivir en su casa.89 La doctrina del Nuevo Testamento declara, “El tiempo es corto; resta, pues, que los que tienen esposa sean como si no la tuviesen.”90 El Nuevo Testamento es más estricto aquí que el Antiguo Testamento.
En el Nuevo Testamento, al israelita espiritual, el seguidor del Mesías nacido de nuevo, no se le da ningún descanso de la guerra espiritual. El seguidor del Mesías del Nuevo Testamento siempre está casado con Cristo, siempre está en guerra, y siempre está sembrando la semilla del mensaje alegre en el campo, que es el mundo.91 Se nos ordena que permanezcamos en la línea de combate con Cristo y que trabajemos por ganar almas92 𠇎ntre tanto que el día dura; [porque] la noche viene, cuando nadie puede trabajar.”93 Cristo está con nosotros en medio de cada valle y cada tormenta.94 Como declaró Jesús, “El que persevere [con El] hasta el fin, éste será salvo.”95 Este pasaje significa obviamente que aquéllos que no permanecen espiritualmente unidos con Jesús hasta el final no serán salvos.96 Esto también demuestra que la salvación inicial está dada libremente a aquéllos que se comprometen totalmente a Cristo;97 pero la salvación es conservada o continuada hasta el fin solamente por aquéllos que hacen continuamente todas las obras con el Mesías para el Mesías que El nos ordena que hagamos con El hasta el fin.98 Estas buenas obras de Cristo en nosotros tienen que comenzar inmediatamente después de que Dios a través de Cristo nos da el don gratis de salvación.99 El Mesías declara, “Llevad Mi yugo [Mi obra] sobre vosotros.”100 Cuando nos sentimos solos, tenemos que recordar que El está en medio de nosotros.101 Nunca estamos solos así como Cristo nunca estuvo solo cuando estaba aquí en la tierra.102 El Padre siempre estaba con El.103
El Apóstol Pablo, el cual fue usado por el Espíritu Santo para escribir más de dos tercios del Nuevo Testamento, declaró, “Yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado [las recompensas eternas de Dios]; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.”104 “Conociendo, pues, el temor del Señor, persuadimos a los hombres.”105
Tenemos que orar [luchar] siempre contra el pecado porque nuestro “adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar.”106 Ya que Satanás y sus hijos nunca descansan de la guerra espiritual pecaminosa, cuánto menos descansa el Señor Dios en medio de Sus hijos de la guerra espíritual contra lo pecaminoso?107 Tenemos que luchar implacablemente contra nuestra naturaleza carnal por el Espíritu de Dios. “Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas [de la maldad espiritual en los lugares altos, que es nuestra naturaleza carnal luchando contra el Espirítu de Cristo, Elohim, que vive en nuestro espirítu con el Padre después de la salvación], derribando argumentos y toda altivez [en nuestra carne] que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento [malvado] a la obediencia a Cristo [Mesías], y estando prontos para castigar toda desobediencia [nuestra], cuando vuestra [nuestra] obediencia sea perfecta.”108 ¡Esto es una guerra constante sin luna de miel! Porque cuando el Espíritu de Dios ha entrado en nosotros, hay una guerra pía y espiritual contra nuestra naturaleza carnal dentro de nosotros en nuestra carne. Esta batalla se enfurece constantemente. Por lo tanto, luchando contra nuestra carne satánica por el Espíritu Santo de Dios requiere al parecer mucha más diligencia que las batallas ocasionales del Antiguo Testamento.
El Nuevo Testamento declara que tenemos que estar armados y vestidos en el Espíritu de Elohim a toda hora.109 Sólo entonces seremos victoriosos contra nuestra propia carne donde mora el Mesías, el Padre, por el Espíritu.110 Entonces el Señor Dios en nosotros luchará constantemente por nosotros. Por el poder [la gracia] de Dios viviendo en nosotros, somos siempre victoriosos en la guerra, “más que vencedores”111 porque El, Cristo, está luchando en nosotros, y con nosotros contra nuestra naturaleza carnal, trayéndola a sujeción por el Espíritu. Esto es para que El con nosotros y en medio de nosotros pueda ayudar a luchar contra aquel enemigo atrincherado en nuestra carne, también como pelear en contra de nuestros enemigos y Sus propios enemigos fuera de nuestra carne.112
La victoria sobre nuestra carne es la victoria más importante en la guerra contra Satanás que jamás tendremos. Nunca hemos de renunciar nuestra fe en la promesa de Dios de victoria, porque la victoria por la cual usted ha estado orando puede ser hoy una realidad. Yo he pasado a través de esos fuegos por más de treinta y tres años y todavía tengo la victoria. Mi fe ha sido probada y yo, junto con millones de otros santos, hemos ganado la victoria por Cristo viviendo en medio de nosotros.113 Si yo y los millones de otros lo hemos hecho por Cristo, usted por Cristo puede hacerlo también. Usted puede tener hoy esa victoria, y conservar esa victoria hasta el final.
LA PERFECCION DE DIOS ES UNA REALIDAD
El Señor ordena la perfección en el Antiguo Testamento, pero El es más seriamente exigente de nuestra perfección en El en el Nuevo Testamento. “Pero Dios habiendo pasado por alto los tiempos [del Antiguo Testamento] de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan.”114 Tenemos que ser perfectos115 porque Cristo ahora ha venido.116 Ahora tenemos más luz, más Palabra, más poder del Espíritu Santo.117 Ya no somos tan ignorantes como lo fueron la gente del Antiguo Testamento.118 Dios ya no guiñará el ojo al pecado.119 Se nos prohibe ser tibios contra el pecado; tenemos que ser celosos contra el pecado.120 De otra manera, Cristo declara, “Te vomitaré de Mi boca.”121 El nunca nos ordena a hacer algo que no podemos hacer.122 ¿Qué clase de Dios sería nuestro Dios justo si nos ordenara a hacer algo que no podríamos hacer, o si no nos equipara con la capacidad de hacerlo? Hay miles de seguidores obedientes del Mesías que han atestiguado que es fácil guardar todos los mandamientos de Dios una vez que usted viva en Su Espíritu y una vez que El viva en su espíritu. De nuevo, Jesús dijo, “Mi yugo [o obra] es fácil, y ligera Mi carga.”123
Los falsos maestros de hoy dicen que usted puede reincidir, luego volver al Señor, luego reincidir un poco más y todavía pertenecerle al Señor. Dicen que esto es verdad porque nuestra carne es débil, como declara el Apóstol Pablo en el capítulo 7 de Romanos. En los versículos 24-25, Pablo hace esta pregunta: “¿Quién me librará de este cuerpo de muerte?” Pablo contesta su propia pregunta diciéndonos “Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro [quién está en medio de nosotros con el Padre por el Espíritu Santo].”
El capítulo 8, versículo 1 de Romanos declara, “Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.” Los profetas falsos dicen que el Señor seguirá aceptándolo de nuevo después de que usted ha pecado con conocimiento y con conocimiento continúa pecando. Esto es una mentira que viene del Infierno.124 El sólo perdonará todos nuestros pecados a la hora de la salvación. Después, El sólo perdonará los pecados de ignorancia.125 Si usted camina tras la carne, está condenado, usted morirá.126 No estará condenado si camina en el Espíritu, porque el Espíritu de Dios es fuerte y tiene poder sobre la carne.127 Cristo no permitirá que usted lo mande a irse de su espíritu un día para dejar que el diablo entre en su espíritu; y entonces invitarlo de nuevo. Usted no puede pedirle que salga de Su palacio por un rato de modo que Satanás pueda vivir dentro de él por algunos segundos, minutos, días, algunas semanas, algunos meses, o años; y entonces pedirle a Satanás que se vaya por un rato y esperar que Cristo vuelva adentro. Usted no está tratando con algún vagabundo o un vago aquí, sino con un Dios viviente, santo, eterno, justo, y aterrorizador que los manda “a ¡arrepentirse!”128 de sus pecados, a ser santos y no pecar más.129 El no está allí para usted como un criado. Su obra en la tierra como el siervo fiel de Dios ha terminado.130 Aunque El por el Espíritu obra dentro de vasos obedientes y quebrantados, El ahora se sienta en los cielos y tiene bajo Su mando todo el poder en el Cielo y en la tierra, cuyo poder El les da a todos Sus siervos obedientes.131 Somos llamados para servirle como El le sirvió al Padre cuando El estaba aquí en la tierra.132 Jesús le dijo al diablo, “Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a El sólo servirás.”133 El no desempeña un papel secundario a ninguno, especialmente al diablo. Nadie, después de invitar a Cristo, se atreve mandarlo a que se vaya sin una recompensa grave. Aquella recompensa es una eternidad en una prisión ardiente.134 Usted no manda a Dios a que se vaya de Su casa.135 Nuestros cuerpos son el palacio real de Dios,136 Su templo, Su cuerpo, Su novia.137 Nosotros no nos pertenecemos.138 Su cuerpo, como un templo, le pertenece a Dios o a Satanás.139 Dios dijo, “Entended ahora esto, los que os olvidáis de Dios, no sea que os despedace, y no haya quien os libre.”140 Y Jesús declara, “No temáis a los que matan el cuerpo, y después nada más pueden hacer. Pero Os enseñaré a quién debéis temer: Temed a Aquel que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el Infierno; sí, Os digo, a éste temed.”141
El Apóstol Juan declaró por el Espíritu Santo que “Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente [la Palabra, el Espíritu de Dios] permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios.”142 Somos resucitados por Su Espíritu en nosotros a una nueva vida.143 Nosotros confesamos esto abiertamente por nuestra sumisión e inmersión total a la muerte de Cristo, luego por nuestra inmersión en Su Espíritu Santo.144 Una persona que está sumergida totalmente en el Espíritu Santo no puede caer porque de nuevo, “La simiente de Dios [Su Palabra que es Cristo] permanece en él [en nosotros].”145 El Espíritu Santo sostiene con facilidad el universo entero en orden perfecto.146 El también mantiene nuestras almas en orden perfecta si sólo tenemos fe en Su capacidad de hacer esto.147
El Apóstol Pablo declaró, “Si aun nosotros, o un ángel del Cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema.” El repite esta declaración para dar énfasis. “Como antes hemos dicho, también ahora [yo Pablo] lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema.”148
Usted puede llevarle esta literatura a su pastor. El puede decirle que yo soy un líder de culto, tal como les dijeron los fariseos y saduceos a sus congregaciones que nuestro Mesías y Sus apóstoles eran líderes de culto. Pueden decirle que yo estoy predicando un mensaje sin gracia, porque le dirán que la gracia es la misericordia eterna que existe aun si pecamos, aunque no vivamos en el Espíritu Santo de Dios, y aun si nos rehusamos a negarnos nosotros mismos y cargar la cruz de Cristo, la cual El nos ordena a todos a cargar.149 La gracia no significa debilidad o misericordia para esa peor clase de pecadores que fueron salvos y luego viven la vida de pecado de nuevo. Estos son anticristos.150 La gracia significa el poder omnipotente de Dios de salvar y de mantenerlo salvo a uno si uno es fiel en ir y no pecar más. Entonces usted puede ir y no pecar más por la gracia [poder] de Dios en usted.151 Dios no tendrá ninguna misericordia sobre aquéllos que han sido lavados pero que no guardan Sus mandamientos y no tienen ninguna intención de guardarlos.152
Su pastor le dirá que se puede pecar, en vez de mandarlo a clamar a Dios por Su poder a través de Cristo, la resurrección,153 que le da mucho más que suficiente fuerza interna para no pecar más. Pueden decirle que yo tengo un diablo, tal como los fariseos y los saduceos les dijeron a sus congregaciones que el Mesías tenía un diablo.154 Pueden decir, “éste es el evangelio, el mensaje alegre según Tony Alamo.”155 Y como sé que harán esto, yo documento todo lo que escribo con muchos versículos de la Biblia. Cualquier persona que declara que el Espíritu en Cristo era un diablo y que el Espíritu en cualquiera de Sus seguidores es un diablo, ha cometido el pecado imperdonable, que es “blasfemia contra el Espíritu.”156 Este pecado nunca puede ser perdonado, ni aquí ni a través de la eternidad.157 Es el pecado eterno y duradero. Usted tiene que decidir si creerá a su falso profeta o creerá a Dios y Sus discípulos. Dios dijo, “Sea Dios veraz, y todo hombre mentiroso.”158 La decisión es suya.
Si usted quisiera ser parte de la verdad que es el Mesías, el Padre celestial, el Espíritu Santo, y Salvador del mundo; si usted está harto de no ser bendecido, y si usted está harto de correr de la cruz del Mesías, porque usted sabe que es un camino estricto, recto, y estrecho,159 pruébela. La cruz es maravillosa, una obra maestra de Dios.160 Es la fuente de todo lo espiritual. Si usted la toma, con la ayuda de Cristo, será fortalecido y purificado, ganando gran gozo y paz entre usted y su Dios, Elohim, el único Dios plural, el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo, así como ganando una vida más abundante aquí y, por supuesto, ganando una vida eterna en el Cielo.161 Si esto es lo que usted quisiera hacer, entonces repita esta oración:
Oración
Mi Señor y mi DIOS, ten misericordia de mi alma pecadora.1 Yo creo que JESUCRISTO es el Hijo del DIOS viviente.2 Creo que Él murió en la cruz y derramó Su preciosa sangre para el perdón de todos mis anteriores pecados. 3 Creo que Dios resucitó a Jesús de entre los muertos por el poder del Espíritu Santo4y que Él está sentado a la diestra de DIOS en este momento, escuchando mi confesión de pecado y esta oración.5 Abro la puerta de mi corazón, y Te invito en mi corazón, Señor JESÚS. 6 Lava todos mis pecados sucios en la preciosa sangre que Tú derramaste por mí en la cruz del Calvario. 7 Tú no me rechazarás, Señor JESÚS; Tú perdonarás mis pecados y salvarás mi alma. Lo sé porque Tu Palabra, la Biblia, así lo dice. 8 Tu Palabra dice que Tú no rechazarás a nadie, y eso me incluye a mí.9 Por eso sé que Tú me has escuchado, sé que me has contestado, y sé que soy salvo.10 Y Te doy gracias, Señor JESÚS, por salvar mi alma, y Te mostraré mi agradecimiento haciendo como Tú mandas y no pecar más. 11
Ahora que usted es salvo y ha sido perdonado de sus pecados, levante sus manos y alabe al Señor. “Alégrense los cielos, y gócese la tierra, y digan en las naciones: JEHOVA reina.”162
Cristo ahora vive en usted por el Espíritu Santo.163 Hay una manera en que usted puede recibir una porción más completa de la naturaleza divina de Dios en usted. Dios el Padre ahora también vive en usted. Entre más vive en usted la naturaleza divina de Dios, más va a poder resistir contra las tentaciones que tan fácilmente han movido a tantos millones de Cristianos lejos de la salvación. Esto es causado por más hombre en nosotros que Dios en nosotros. La humanidad se ha vuelto tan malvada que si Satanás y su ejército endiablado fuesen completamente destruidos, nosotros seríamos nuestro propio diablo.
Ahora que usted es salvo, ore por el bautismo en el Espíritu Santo. Estudie la Palabra piadosamente, y ore siempre por más de la naturaleza divina.164 Para instrucciones en cómo recibir el bautismo en el Espíritu Santo, y para recibir más de la naturaleza santa de Dios, solicite nuestra literatura o llame. Porque sin santidad ningún hombre verá a Dios.165
Ahora que usted es salvo, es un mandamiento que sea sumergido completamente, bautizado en agua en el nombre del Padre, y en el nombre del Hijo, y en el nombre del Espíritu Santo.166 Guarde todos los mandamientos de Dios y viva.167
Usted acaba de completar el primer paso en una serie de cinco pasos que se requieren para recibir la salvación. Su segundo paso es negarse a sí mismo y aceptar la cruz cada día con el propósito de mortificarse, es decir, para darle muerte a su propia voluntad, a su ser autosuficiente, y al mundo con todos sus deseos. Todos estos tienen que ser bautizados en la muerte de Cristo. El tercer paso es su resurrección de la vida satánica de Adán a la vida libre de pecados de Cristo. El cuarto paso es su ascensión a una posición de autoridad para reinar por Dios en la tierra, y el quinto paso es reinar por Dios en la tierra hasta el fin con el propósito de traer el reino del Cielo a la tierra. Usted tiene que aprender la Palabra de Dios, luego someterse y hacer lo que la Palabra dice, para que la Iglesia y el mundo puedan ver pruebas de su sumisión a la Palabra de Dios, Su orden, y Su autoridad en usted y por usted.
Alabado sea el Señor. Que Dios lo recompense abundantemente.
Pastor Mundial Tony Alamo
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ESTA LITERATURA LLEVA EL VERDADERO PLAN DE SALVACIÓN (Hch. 4:12). NO LA TIRE, PÁSELA A OTRO.
Aquéllos de ustedes que están en otros países, les animamos a que traduzcan esta literatura a su lengua materna. Si la reimprimen, favor de incluir este derecho reservado y registro:
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© Propiedad literaria julio, 1997
Todo derecho reservado Pastor Mundial Tony Alamo ® Registrado julio, 1997
Notas del "FUEGO EN LA PRISION":vuelva arriba
1 Jer. 23:30-32, 1 Co. 3:10, 5:6 vuelva
2 Jl. 1:4, 2:25 vuelva
3 Jl. 1:4 vuelva
4 Jn. 19:16-18, 34, Hch. 20:28, Ef. 2:13-16, He. 9:14, 1 P. 1:18-19, 1 Jn. 1:7, Ap. 1:5 vuelva
5 Jn. 5:14, 8:11, 34, Ro. 3:31, 6:15-16, Gá. 2:17, 1 Jn. 2:4, 3:4, 8 vuelva
6 1 Co. 10:11 vuelva
7 1 Co. 10:12 vuelva
8 Sal. 119:89-91, Pr. 19:21, Ecl. 3:14, Mal. 3:6, Mt. 24:35, Jn. 1:1, 14, Ap. 19:13 vuelva
9 Ex. 12:21-27, 20:24, Lv. 1:3-17, Jn. 1:29, 36, Ap. 7:10, 19:9 vuelva
10 Mt. 5:18, 24:35, Mr. 13:31, Lc. 16:17, 21:33 vuelva
11 Mt. 5:17, Ro. 7:7, Gá. 3:24 vuelva
12 Ex. 31:18, Dt. 9:10 vuelva
13 Jer. 31:33, 2 Co. 3:3-8 vuelva
14 Mt. 5:17, Sal. 37:31, 40:8, 138:2, Is. 51:7, Jer. 31:31-33, Ez. 36:26-27, He. 8:10 vuelva
15 Ex. 20:1-17, Lev. 19:37, Dt. 5:32-33, cap. 6, 12:32, 2 Ti. 3:16-17 vuelva
16 1 Jn. 3:4 vuelva
17 La palabra hebrea Elohim significa la pluralidad de Dios. Gn. 1:26, 27 vuelva
18 Ez. 37:26-28, Mt. 1:23, 26:63-64, Jn. 10:30, 36-38, 17:20-23, 26, 2 Co. 6:16, 1 Jn. 4:13, 5:7 vuelva
19 Mt. 1:23, Lc. 10:19, Jn. 1:1, 14, 14:6-11, 16-18, Hch. 1:8, I Co. 10:13, 2 Co. 12:9, 1 Jn. 5:7, Ap. 19:13 vuelva
20 Dt. 24:1 vuelva
21 Mt. 19:8 vuelva
22 Mt. 5:17, 7:12 vuelva
23 Mt. 5:17 vuelva
24 Mt. 5:32, 19:9, Mr. 10:11, Lc. 16:18 vuelva
25 1 Co. 7:15 vuelva
26 1 Co. 7:15, 2 Co. 6:14-18 vuelva
27 Nú. 23:19, Sal. 33:11, Mal. 3:6, He. 13:8 vuelva
28 Mt. 5:28 vuelva
29 Ex. 20:14, Dt. 5:18 vuelva
30 Ex. 20:17, Dt. 5:21 vuelva
31 Jn. 6:66, 15:6, 1 Ti. 4:1-2, 2 Ti. 4:3-4, He. 6:4-8, 10:26-29, 1 Jn. 2:22, 4:3, 2 Jn. 1:7 vuelva
32 Gn. 19:17, 26, Lc. 17:31-33 vuelva
33 Jn. 15:14 vuelva
34 Ex. 21:12 vuelva
35 1 Jn. 3:15 vuelva
36 Sal. 94:9-11, 139:7-13, 15-16, Pr. 15:3, 16:2, 24:12, Am. 9:2-3, Jn. 1:1-3, 1 Co. 2:10, He. 4:12-13, 1 Jn. 2:14, Ap. 1:8, 19:6 vuelva
37 Gn. 1:27-28, 3:8-9, Sal. 139:1-16, Is. 44:6-7, Jn. 1:1-3, 1 Co. 3:20 vuelva
38 Gn. 2:2-3, Ex. 20:8-11, 23:12, 34:21, 35:2, Lv. 23:3, 32 vuelva
39 Lea la literatura de Tony Alamo titulada El Reposo del Verdadero Creyente, Mt. 12:2-12, 22:9-14, Lc. 9:23, Ro. 8:1, Gá. 5:25, Ef. 5:27, He. 4:3-6, 9-10, 12:14, 1 Jn. 2:4-6, 3:6, Ap. 3:15-16 vuelva
40 Lv. cap. 4-5, 6:6-7 vuelva
41 Lv. 4:4-7, 16-18, 16:27, 30-34, He. 9:7-15, 22, 10:1-14 vuelva
42 Mt. 12:40, Jn. 14:16-21, Ro. 8:34, 2 Co. 6:16, Ef. 2:13-19, 5:2, He. 7:19-28, 9:13-15, 1 P. 3:18-19, Ap. 3:20 vuelva
43 1 P. 2:5, 9, Ap. 1:5-6, 5:9-10, 20:6 vuelva
44 Ro. 3:25-26, 5:1, Ef. 2:8 vuelva
45 En hebreo Yahvahshua significa Padre celestial, Salvador vuelva
46 Ro. 8:1, 4, Gá. 5:16, 25 vuelva
47 Jn. 8:11 vuelva
48 Jn. 5:14 vuelva
49 2 P. 2:22, Pr. 26:11 vuelva
50 Lc. 9:62, He. 6:4-6, 10:38vuelva
51 Mt. 10:28, 25:41, Is. 66:24, Mr. 9:43-48, Jud. 7, Ap. 14:11 vuelva
52 Mr. 9:45-46 vuelva
53 La palabra hebrea Yavashua significa Padre celestial, Salvador. Jn. 1:1-3, 8:58, Col. 1:16-17, Ap. 1:8, 21:6 vuelva
54 El Dios plural vuelva
55 Lv. 27:30, Nú. 18:21, 24-28, Dt. 12:5-6, 19 veulva
56 Nú. 18:22-23 vuelva
57 Mt. 10:37-38, 16:24-25, 19:21, Mr. 12:41-44, Lc. 9:23, 18:22, Jn. 21:22, Hch. 2:44-46 vuelva
58 Lc. 12:33-34 vuelva
59 Lc. 14:28-35 vuelva
60 Mt. 6:24 vuelva
61 Lc. 16:13 vuelva
62 Hch. 2:41 vuelva
63 Hch. 4:4 vuelva
64 Hch. 2:47, 5:14-16 vuelva
65 Hch. 2:41-45, 4:4, 32 vuelva
66 Hch. 4:34-35 vuelva
67 Hch. 5:1-2 vuelva
68 2 Ti. 4:3-4, 2 P. 2:1-2 vuelva
69 Gn. 3:1-6, 2 Co. 11:3 vuelva
70 Hch. 5:3-12 vuelva
71 He. 12:21 vuelva
72 Ex. 19:18-19, Dt. 5:29, 6:2, 17:13 vuelva
73 Is. 8:13 vuelva
74 Dt. 4:9-10 vuelva
75 Ex. 20:19 vuelva
76 Ex. 20:20, Lv. 19:14, 32, 25:17, 36, 43, Dt. 4:10, 5:29, 6:1-2, 13-15, 24, 10:12-13, 20, 13:4, 11, 17:13, 19, 19:20, 31:10-12, Jos. 24:14, 1 S. 12:24, Pr. 16:6, Mal. 1:6, 2:5-6, 4:2-3, 2 Co. 5:11, Fil. 2:12, He. 4:1, Jud. 1:23 vuelva
77 Sal. 36:1, Ro. 3:10-18 vuelva
78 Mt. 24:5-34, 2 Ts. 2:1-4, 1 P. 4:7 vuelva
79 Ap. 12:9 vuelva
80 Sal. 111:10, Pr. 1:7, 9:10, Ex. 20:18-20, Dt. 5:29, 10:12-13, I1 Cr. 19:7, Sal. 15:4, 25:12-14, 86:11-13, Pr. 3:7-8, 9:1-2, 15:33, Is.11:1-2 vuelva
81 Job 28:28, Sal. 111:10, Pr. 1:7, 9:10, 14:27, 15:33, 16:6——temor——terror——yira, Ecl. 7:18, 12:13 vuelva
82 Lv. 2:13, Dt. 6:5, 10:12-13, Jos. 22:5, Mt. 5:13, 13:33, 22:37-38, Mr. 9:49-50, Lc. 14:34-35, 1 Co. 5:6, Gá. 5:9vuelva
83 Dt. 28:47-48, Sal. 35:9, 100:1-3, Mr. 10:21-22, 12:43-44, Hch. 2:46 vuelva
84 Ex. 23:18, 34:25, Lv. 22:20, Mt. 5:13, 1 Co. 5:6-7, Gá. 5:9 vuelva
85 Ro. 12:1, Lc. 17:10 vuelva
86 Sal. 2:7, Jn. 1:18, 3:16, 18, Hch. 13:33, He. 1:5, 5:5, I Jn. 4:9 vuelva
87 Ro. 5:6-11, 8:17, 1 Co. 3:21-23, 1 Ts. 5:9-10, He. 9:26, 28, 10:12, 1 Jn. 5:11-12, Ap. 1:5-6 vuelva
88 Dt. 20:5-7 vuelva
89 Dt. 24:5 vuelva
90 1 Co. 7:29, Mt. 6:31-33 vuelva
91 Mt. 3:38, 24:42-50, 1 Co. 15:58, 2 Ti. 4:2, 5, Ap. 2:26 vuelva
92 Mt. 28:19, Mr. 16:15, Ro. 10:15, Lc. 14:23, Ef. 4:27, 1 Ts. 5:17, 2 Ti. 4:2, 5, Stg. 4:7, 1 P. 5:8-9 vuelva
93 Jn. 9:4, Ef. 5:15-16, Col. 4:5, 2 Ti. 4:2-3 vuelva
94 Dt. 31:8, 2 S. 22:3, Sal. 5:11-12, 18:2, 23:4, 91:1-4, 9-16, Mt. 6:8, 28-32, 10:29-31, 11:29, 28:20, He. 13:5 vuelva
95 Mt. 24:13 vuelva
96 He. 6:4-8, 12:25, 2 P. 2:21-22 vuelva
97 Ro. 3:24-26, 6:23, Ef. 2:8-9 vuelva
98 Dn. 5:27, Mt. 7:16-27, Mr. 13:34-35, Jn. 4:34-38, 1 Co. 3:13-14, 15:58, Gá. 6:4, Col. 1:10, 1 Ts. 4:11, 2 Ts. 3:10, 2 Ti. 4:5, He. 6:10, 13:21, Stg. 1:25, 2:14-26, Ap. 2:5, 23, 26, 20:12-13, 22:12 vuelva
99 Lc. 10:2, 1 Co. 3:8-14 vuelva
100 Mt. 11:29 Ro. 8:11, He. 13:5, 2 Co. 6:16, 1 Jn. 4:13, 15-16 vuelva
101 Ro. 8:11, He. 13:5, 2 Co. 6:16, 1 Jn. 4:13, 15-16 vuelva
102 Jn. 8:16, 29, 16:32 vuelva
103 Mt. 26:53, Jn. 1:1-2, 18, 3:35, 5:17, 19-20, 8:16, 18-19, 28-29, 16:32 vuelva
104 Fil. 3:13-14 vuelva
105 2 Co. 5:11 vuelva
106 1 P. 5:8, Lc. 21:36 vuelva
107 Ti. 4:2, Ap. 12:10 vuelva
108 2 Co. 10:4-6 vuelva
109 Ef. 6:11-17 vuelva
110 Jn. 1:1 vuelva
111 Ro. 8:37, I Co. 15:57 vuelva
112 Ro. 7:21-25, 8:1-4, 1 Co. 3:8-9, 9:26-27 vuelva
113 Fil. 4:13, 1 Jn. 4:4 vuelva
114 Hch. 17:30 vuelva
115 Gn. 17:1, Dt. 18:13, 1 R. 8:61, 1 Cr. 28:9, Mt. 5:48, 2 Co. 7:1, 13:11 vuelva
116 Mt. 4:16, Lc. 2:7-16, 27-32, Jn. 8:12 vuelva
117 Dn. 12:4, Os. 6:1-3, Jl. 2:23-25, Mt. 4:16, 5:14-15, Lc. 1:76-79, Jn. 1:4-5, 9, 8:12 vuelva
118 Jer. 31:33, Dn. 12:4, Mr. 4:11, Ro. 16:25-26, Ef. 3:8-11, Col. 1:25-28, 2 Ts. 2:3-11 vuelva
119 Jue. 3:8-11, 14-15, 4:1-3, 23-24, 6:1, 6-10, 19-40, 7:1-25, Tito 2:14, Ap. 3:15-19 vuelva
120 Ex. 20:20, Sal. 4:4, 97:10, Pr. 14:34, 20:10, Ef. 4:26 vuelva
121 Ap. 3:16 vuelva
122 Mr.10:271 Co.10:13 vuelva
123 Mt. 11:30 vuelva
124 1 Co. 15:34, I Ti. 4:1-2, 2 Ti. 4:3-4 vuelva
125 Lv. 4:1-4, 13-14, 22-24, 5:14-19, Nú. 15:22-38, He. 7:25-28 vuelva
126 Jn.3:19, Ro.6:19-23, 7:5-6, 11-14, 8:1, 6, 8, 13, 1 Co.15:50, Gá.5:16-17, 19-21, 6:7-8, 2 P.2:10,12,17,1 Jn.2:16 vuelva
127 Ro. 8:1-14 vuelva
128 Ez. 14:6, 18:30-31, Mt. 4:17, Mr. 1:14-15, 6:7, 12, Lc. 13:2-5, Hch. 17:30, Ap. 2:5, 16, 3:3, 19 vuelva
129 Jn. 5:14, 8:11 vuelva
130 Jn. 19:30 vuelva
131 Sal. 60:12, Mt. 10:1, 8, Mr. 3:14-15, Ro. 8:31, 37vuelva
132 Mt 4:10, Jn. 5:30, 6:38-40 vuelva
133 Mt. 4:10, Ap. 1 vuelva
134 Mt. 12:43-45, He. 10:26-27 vuelva
135 Sal. 50:22 vuelva
136 1 Cr. 29:1, Lc. 11:21 vuelva
137 1 Co. 3:9, 16-17, 6:19-20, 2 Co. 6:16, Ef. 2:21-22 vuelva
138 1Co.6:19 vuelva
139 Mt. 6:22-24 vuelva
140 Sal. 50:22 vuelva
141 Lc. 12:4-5, Ex. 15:14-16, Job 18:5-14, Is. 8:13, 2 Co. 5:11 vuelva
142 1 Jn. 3:9 vuelva
143 Ro. 6:3-11, Ef. 4:23-24, Col. 3:9-11 vuelva
144 Mt. 3:6, Mr. 16:16, Hch. 2:38-39, 11:16 vuelva
145 1 Jn. 3:9, Jn. 1:1, 14, Ap. 19:13 vuelva
146 Gn. 8:22, Job 37:6-22, 38:25-27, 33-41, Sal. 65:9-13, 104:10-20, 24-30 vuelva
147 Ro. 8:28, Jud. 1:24 vuelva
148 Gá. 1:8-9 vuelva
149 Mt. 16:24, Lc. 9:23 vuelva
150 Jn. 6:66, He. 6:4-6, 10:38, 1 Jn. 2:22, 4:3, 2 Jn. 1:7vuelva
151 Jn. 5:14, 8:11 vuelva
152 Sal. 78:42-63, Pr. 1:24-32, Mt. 7:22-23, 23:30-36, 26:24, Lc. 13:26-27, Jn. 5:14, He. 6:4-6, Jud. 1:6 vuelva
153 Jn. 11:25 vuelva
154 Mt. 10:25, Mr. 3:22 vuelva
155 Lc. 23:14 vuelva
156 Mt. 12:31-32, Mr. 3:29-30vuelva
157 Mt. 12:32, Lc. 12:10 vuelva
158 Ro. 3:4 vuelva
159 Mt. 7:13-14 vuelva
160 Gá. 6:14, 1 Co. 1:18, Ef. 2:16 vuelva
161 Jn. 10:10, 14:27, 16:33, Ef. 2:13-19, 1 P. 1:7-9 vuelva
162 I Cr. 16:31 vuelva
163 Ro. 8:11 vuelva
164 II Ti. 2:15, 21, Lucas 21:36, Jn. 15:3 vuelva
165 He. 12:14 vuelva
166 Mt. 28:19 vuelva
167 Mt. 28:19 vuelva
Notas de la Oración:
1. Sal 51:5, Ro. 3:10-12, 23 vuelva
2. Mt. 26:63-64, 27:54, Lc. 1:30-33, Jn. 9:35-37, Ro. 1:3-4 vuelva
3. Hch. 4:12, 20:28, Ro. 3:25, 1 Jn. 1:7, Ap. 5:9 vuelva
4. Sal. 16:9-10, Mt. 28:5-7, Mr. 16:9, Jn. 2:19, 21, 10:17-18, 11:25, Hch. 2:24, 3:15, Ro. 8:11, 1 Co. 15:3-6 vuelva
5. Lc. 22:69, Hch. 2:25-36, He. 10:12-13 vuelva
6. Ro. 8:11, 1 Co. 3:16, Ap. 3:20 vuelva
7. Ef. 2:13-22, He. 9:22, 13:12, 20-21, 1 Jn. 1:7, Ap. 1:5, 7:14 Ef. 2:13-22, He. 9:22, 13:12, 20-21, 1 Jn. 1:7, Ap. 1:5, 7:14 vuelva
8. Mt. 26:28, Hch. 2:21, 4:12, Ef. 1:7, Col. 1:14 vuelva
9. Ro. 10:13, Stg. 4:2-3 vuelva
10. He. 11:6 vuelva
11. Jn. 8:11, 1 Co. 15:10, Ap. 7:14, 22:14 vuelva