LA COSA PREFERIDA DE NUESTRO SEÑOR

Por
Tony Alamo

Es obvio hoy en día que el diablo ha declarado guerra tanto contra Dios como los santos de Dios.1"Y [el mundo entero] adoraron al dragón [el diablo] que había dado autoridad a la bestia [el sistema unimundial], y adoraron a la bestia, diciendo: ¿Quién como la bestia [diciendo quién es como el sistema unimundial], y quién podrá luchar contra ella? También [al sistema unimundial] se le dio boca [los medios de comunicación mundial] que hablaba grandes cosas y blasfemias....Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar de Su nombre, de Su tabernáculo [los cuerpos de Cristianos en quienes mora la vida de Dios], y de los que moran en el Cielo. Y se le permitió [al sistema mundial y a los medios de comunicación del diablo] hacer guerra contra los santos, y vencerlos [derrotarlos]."2

Estos santos que son vencidos o derrotados por el sistema unimundial y su boca, los medios de comunicación, son los mismos derrotados mencionados en la segunda epístola de Tesalonicenses 2:3. Son la gran apostasía de la iglesia, los apóstatas que en un tiempo eran parte del cuerpo de Cristo. La apostasía de los santos es una de las últimas señales antes de la segunda venida de Cristo.3 El diablo vence a estos santos, que son como los ángeles en el Cielo que cayeron de su primer estado simplemente porque creyeron en la debilidad de Satanás más bien que en el poder de Dios.4 Ellos, los Cristianos apóstatas, temen al sistema unimundial de Satanás, lo que les haría el sistema por decir la verdad, y lo que dirían de ellos los medios de comunicación del sistema, temiendo la pérdida de sus reputaciones y posición en la comunidad más bien que el temor a Dios y a lo que les sucederá en el día del juicio.5

Estos santos que han caído y ahora son condenados, sin duda son ejemplos de la falacia de la doctrina "seguridad eterna."6 Estos santos derrotados, apóstatas y condenados son muy diferentes a los que nunca son vencidos simplemente porque éstos últimos nunca se apartan de Jesús.7 Los vencedores son el cuerpo de Cristo en cual El vive y obra Sus obras en el mundo de hoy.8 Nada puede derrotar a Cristo, quien es la inteligencia de Su cuerpo.9 Tampoco puede ser derrotado Su cuerpo, los santos victoriosos.10 El enemigo puede matar nuestros cuerpos, pero nuestras almas nunca son derrotadas. Vivirán para siempre en el Cielo.11 Esto es porque aquellos que son Su cuerpo están unidos a El que vive en el Cielo por Su Espíritu, Su vida, la vida de Dios que vive en ellos, que es Cristo con el Padre, el gobernante del Cielo y la tierra.12 Ellos temen a Dios, el Creador de todas las cosas, y nada más.13 Son justos, y "el justo está confiado como un león."14 Los Cristianos apóstatas son aquellos que Dios aborrece.15 El los dejó como presa para esos falsos ministros, los falsos profetas que cazan las almas con sus doctrinas corruptas "por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Por esto Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira, a fin de que sean condenados todos los que no creyeron en la verdad, sino que se complacieron en la injusticia."16 Esta es la verdadera naturaleza de Dios. Tenga fe. Crea la Palabra de Dios. Si no, será como los condenados que no tienen la fe suficiente para creer en la Palabra de Dios como la fue escrita. Cristo es la "piedra principal" y la piedra angular de Su cuerpo entero, la iglesia, y es uno con todos los que están en el cuerpo de Cristo.17

En Apocalipsis 17:14, Satanás y sus siervos "pelearán contra el Cordero [Cristo], y el Cordero [Cristo] los vencerá [los derrotará]." Este pasaje habla del victorioso Cordero de Dios en el Cielo quien es la inteligencia de Su cuerpo victorioso en la tierra, todos miembros de Su iglesia. Ellos son la casa en la cual El mora, y Su Espíritu es vertido constantemente en ellos desde el Cielo.18 Nunca se apartan de El porque El, la Simiente, la Palabra, se queda en ellos.19 No pueden pecar, porque son nacidos de Dios.20 Nunca abandonan al Señor, y nunca tropiezan. Ni Cristo ni Sus verdaderos siervos son vencidos. Esto es porque "El es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con El [cada miembro que no se aparta de Cristo] son llamados y elegidos y fieles."21 Atesoran dentro de ellos Su presencia dadora de vida, la cual los hace uno con El, y no están avergonzados de Su Palabra ni de la obra que El les ha presentado.22 Estos son los vasos de barro con ese tesoro de Cristo, la vida de Dios, en ellos mencionados en la segunda epístola de Corintios 4:7. Ellos obedecen Su cada Palabra y no aman nada de Satanás, del pecado, ni del mundo.23 Las armas con las cuales derrotan a Satanás en esta guerra "no son carnales [sino espirituales, ‘la Palabra de Dios’24 ]."25 Ningún verdadero Cristiano jamás ha iniciado o participado en alguna guerra carnal donde se haya vertido sangre humana, aunque las religiones que practican la política sí han hecho esto en el nombre del Cristianismo.

Muchos millones se han apostatado de Cristo porque creen en varias falacias, tal como en la falsa doctrina inspirada por Satanás que es malo estar enojado contra Satanás, el pecado, y el sistema mundial.26 Se enfadan porque la Palabra de Dios se opone a su voluntad y sus deseos. Estos falsos profetas, llenos de sus propias voluntades y deseos, declaran que mala es la ira contra Satanás, el pecado, y la corrupción. Esta falsa doctrina en particular ha hecho pasivos tanto al mundo como a la mayoría de los Cristianos inexpertos y a los sin ley con respecto a la Palabra de Dios. No tienen celo para predicar la verdad de la ira, el odio, y la furia de Dios contra el pecado, Satanás, y la corrupción y anarquía en el mundo de hoy.27 Para empeorar las cosas para ellos y aquéllos que les creen, sólo expresan ira, odio y furia contra Dios, la Palabra de Dios, y aquellos que predican y enseñan la Palabra de Dios.

Cristo le ordenó a todos a que tuvieran ira contra el pecado, Satanás, y la corrupción en el mundo.28 Tenga fe en las Palabras de Jesús, porque sólo por fe en las Palabras de Jesús es salvo.29 Por duda es condenado.30¿Quién podría leer la Palabra de Dios y no aprender a estar enfurecido con Satanás, el pecado, y la corrupción en el mundo? ¿Y quién podría vivir en este mundo y no estar enojado con Satanás, el pecado, y los males aquí? "Los que amáis a Jehová, aborreced el mal."31 Tenga fe en estas escrituras. Ellas son la Palabra de Dios. De Jesús se escribe: "Has amado la justicia, y aborrecido la maldad, por lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo, con óleo de alegría más que a tus compañeros."32 Recuerde que por fe en la Palabra de Dios es salvo, y por duda es condenado.33

Eclesiastés 7:9 declara, "No te apresures en tu espíritu a enojarte; porque el enojo reposa en el seno de los necios."34 Esta escritura es aparentemente contradictoria a otras escrituras que les ordenan a los Cristianos a que se enojen con el pecado, con Satanás, y la corrupción en el mundo (escrituras como "airaos, pero no pequéis"35 ). "Gloria de Dios es encubrir un asunto; pero honra del rey es escudriñarlo."36 Ahora para entender la escritura "el enojo reposa en el seno de los necios," primeramente tenemos que discernir lo que significa la palabra necio colocando las escrituras más fáciles de entender junto a las que son más difíciles de entender. Tenemos que también recordar que la Palabra de Dios es el único verdadero espejo para mirar a Dios.37 Ella sóla lo presenta a El como Sí Mismo, con todos Sus gustos, Sus aversiones, y Sus atributos. Nuestra fe en la Palabra de Dios no le da crédito a los informes de Dios de ninguna fuente más que de la propia boca de Dios. Esto es lo que acabará con cada tentación y cada herejía.38 La Biblia, nuestro único espejo para entender la Palabra de Dios hoy día, nos cuenta: "Dice el necio en su corazón: no hay Dios."39 Por lo tanto, la ira en el seno de uno que dice que no hay Dios, un necio, sería la ira que el necio muestra hacia la reprensión de Dios, la advertencia de Dios, la Palabra de Dios, y hacia aquéllos que predican y enseñan la Palabra de Dios. La escritura, "No te apresures en tu espíritu a enojarte; porque el enojo reposa en el seno de los necios,"40 significa que no podemos enojarnos contra Dios, Su Palabra, o aquéllos que llevan Su Palabra. Si lo estamos, entonces somos necios, necios condenados.

Los vencedores con el Cordero, que han vencido al diablo, su falsa doctrina, la muerte, el Infierno, y el sepulcro por la doctrina sana de Cristo están, por supuesto, tan enojados como lo está Cristo con Satanás, el pecado, y la corrupción.41 De lo contrario no podrían ser el cuerpo del Cordero. El Cordero no viviría en vasos que no concuerdan con Su Espíritu o Su Palabra.42 Su odio contra el pecado, Satanás, y la corrupción es igual en Su ministerio celestial como lo fue en Su ministerio terrenal. Su ministerio terrenal continúa hasta este día en Sus santos invictos.43 El dio muchas parábolas en Su Palabra, nuestro espejo verdadero para mirar a Dios, demostrando cómo será Su piadosa ira, odio, y furia en el día del juicio hacia todos aquéllos que aman estas cosas, aquéllos que están enojados con Dios y Sus siervos.44

Jesús, exhibiendo Su ira, odio, y furia hacia los fariseos les dijo, "¡Serpientes, generación de víboras! ¿Cómo escaparéis de la condenación del Infierno?"45 "Hipócritas,"46 "guías ciegos,"47 "insensatos y ciegos."48 "Vosotros sois de abajo, Yo soy de arriba; vosotros sois de este mundo, Yo no soy de este mundo."48 "Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer."50

Una de las parábolas que da Cristo con respecto a Su ira y furia hacia el malvado en el día del juicio describe a los que no le dieron comida o bebida a Sus discípulos en la tierra, aquéllos que no los visitaron cuando estaban en prisiones y en salas de enfermos. Jesús declaró, "En cuanto no lo hicisteis a uno de estos más pequeños, tampoco a Mí lo hicisteis."51 El promete que El, con ira y odio, demostrará Su furia eterna, diciendo, "Apartaos de Mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles."52

En otra parábola, Jesús cuenta de un hombre [Sí Mismo] que le entregó Sus bienes a Sus siervos. "A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno."53 Uno de ellos escondió su talento (su comisión para hacer las obras de Cristo) en la tierra y se negó a trabajar.54 El no reprendió, regañó, ni se enojó con el pecado mientras que estaba aquí en la tierra.55 Perdió su talento. Cristo le dio su talento al hombre justo, al quién demostró su piadoso odio e ira contra Satanás, el pecado, la corrupción, y el mundo.56 El Señor en su odio, ira, y furia le declaró a Sus siervos, "Al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes."57

En otra parábola, Jesús cuenta de un hombre que intenta entrar engañosamente a la cena de las bodas del Cordero sin ser justo según la justicia de Dios.58 Esta persona no permitió que Cristo viviera en él y que ministrara en él.59 Esto enfureció a Cristo. El odió a este hombre. Para demostrarnos a nosotros y a los ángeles Su ira y furia eterna, Cristo el Maestro ordenó a Sus siervos a "atadle de pies y manos, y echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes."60 Una vez más, para dar énfasis, El demuestra aquí en escritura Bíblica Su justa y divina ira, odio y furia hacia los que intentan entrar al Cielo por cualquier otra manera que no sea por El Mismo, "LA PUERTA."61 Cristo es la única manera dentro del reino de Dios.62 El dijo, "Yo soy el Camino, y la Verdad, y la Vida; nadie viene al Padre, sino por Mí."63 Esta declaración de Cristo enfurece a cada religión falsa de la tierra. Están enojados por la cosa equivocada y ellos también pagarán por ello en el juicio.64

Hay mucha más evidencia de la ira, del odio, y de la furia de Cristo hacia Satanás, su ejército de diablillos, y los pecadores que rehusan arrepentirse.65 En un solo caso, El arrojó a millares de demonios fuera de un hombre a un hato de cerdos que "precipitó en el mar por un despeñadero (eran como dos mil), y en el mar se ahogaron."66 El echó a demonios fuera de literalmente millares de personas y de ninguna manera se preocupó por los gritos de los demonios: "¿Qué tienes con nosotros, Jesús, Hijo de Dios? ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo?"67

Hay tantos ministros satánicos hoy. "Porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras."68 Por supuesto que ellos no enseñarán la verdadera naturaleza e importancia de creer en cada Palabra de Cristo, diciéndole al mundo que es Cristo que atormentará eternamente a Satanás, los demonios, y todos aquéllos que son conducidos por Satanás, incluyéndose a sí mismos, por su rechazo de El así como por su desobediencia a El.69 Dicen que Cristo es solamente amor. Significan amor de una manera pecaminosa. El amor escritural es el guardar los mandamientos de Dios, no abrazando, no besándose, y no tolerando a Satanás, el pecado, y la corrupción.70 Esto es muy opuesto al mensaje de Cristo de amor. Incluso los demonios lo saben. ¿Cómo pueden estos ministros llamarse Cristianos cuando los demonios son más escriturales que ellos? ¿Cómo puede cualquier persona creer que estos ministros son Cristianos?

En otra ocasión donde clamaron los demonios, "diciendo: Déjanos; ¿qué tienes con nosotros, Jesús nazareno? ¿Has venido para destruirnos?" Jesús los reprendió, diciendo: Cállense, y salgan de él.71 Esto demuestra que nuestro justo Señor estaba airado con los demonios y los odiaba. Este demonio sabía que Cristo eternamente los destruiría a todos en el Infierno. El lo admitió. Los seudo Cristianos lo niegan. Están negando a Cristo, la Palabra. Escuche los nombres odiosos que nuestro Dios, el Cristo viviente, les llama al pecado y a los que regresan nuevamente al pecado después de que han sido salvos. El los llama perros que lamen su vómito,72 puercas que se revuelcan en el cieno,73 brujas,74 veneno de serpientes condenadas al Infierno,75 peste de sepulcros podridos,76 y colinas de estiércol.77 El golpéa violentamente a los que pecan con las más mortales de enfermedades,78 llagas,79 gangrenas, lepras, y plagas.80
Aquellos de nosotros que tenemos la verdad tenemos que predicar ambos la salvación de Dios y la verdadera naturaleza de Cristo para que toda la gente esté avisada tanto de Su furia airada y llena de odio, como de Su terror.81 Cristo nuestro Señor y Dios es un asesino así como el Creador de la vida.82 El declara, "Ved ahora que Yo, Yo soy, y no hay dioses conmigo; Yo hago morir, y Yo hago vivir."83 Reciba esa verdad y viva. Somos salvos por "toda Palabra que sale de la boca de Dios."84

Aunque Dios ama el alma humana, El odia las cosas satánicas, corruptas, y pecaminosas que elegimos decir y hacer, tal como nuestros esfuerzos de cambiar Su verdadero carácter y de proyectarlo al mundo como verdad.85 Los que hacen que Su Palabra parezca ser lo que no es, harán que el Infierno se raje de par en par cuando Dios lanze sus almas detestables en él.86 Está escrito, "El soplo de Jehová, como torrente de azufre, lo enciende."87 Que absurdo hasta siquiera intentar cambiar la justicia de Dios. En Apocalipsis 2:6 El declaró que Sus siervos aborrecieron "las obras de los nicolaítas, las cuales [El dijo] Yo también ABORREZCO."88 La Palabra de Dios describe el pecado como la transgresión de Su ley, a través de la Biblia entera.89 Nuestra fe que está en las Palabras que El habló nos salva.90 El habló más de Su odio por el pecado y la realidad del Infierno que cualquier otra persona en la Biblia.91 Si usted cree en el Señor Jesús Cristo, creerá Sus Palabras.92

Su ira bien conocida, escritural, piadosa, divina y justa contra el amor al dinero, lo cual la Palabra dice que es la raíz de todos los males,93 fue demostrada cuando con azote de cuerdas hechó fuera del templo a los cambistas y volcó las mesas. Aquí demostró Su ira hacia aquéllos que no le rinden homenaje al templo de Dios pero en vez lo deshonran, haciéndolo un lugar de comercio94

Mientras que se acerca el final del tiempo, la ira de Cristo se vuelve más intensa contra el pecado, Satanás, y el mundo. El la demostrará de una manera más temerosa "cuando El se levante para castigar la tierra."95 Esto causará que el mundo entero se conmueva fuera de su eje en un gigante terremoto mundial.96"Y toda isla huyó, y los montes no fueron hallados."97 El también promete una tempestad severa sobre la tierra con granizos [meteoritos] ígneos de hierro del peso de un talento, que es equivalente a unas cien libras por granizo.98 El promete matar hasta un tercio de la población del mundo al mismo tiempo debido a su actitud impenitente hacia ambos Su Palabra y el pecado.99 El les enviará plagas horribles que los torturarán.100 ¿Suena ésto como si Cristo ama a Satanás, los pecadores no arrepentidos, o nuestra sociedad anárquica?

El Apóstol Pablo instruyó que sus iglesias echaran de la iglesia a aquéllos que dudosamente disputan la Palabra de Dios.101 El nos manda a reprobar, reprender, haciendo la obra de evangelista.102 La fe concibe sus nociones de Dios por la Palabra. Resuelve cada caso de la conciencia y descifra todo lo que Dios escribe por la Palabra. Satanás ha podido convencer a casi todo el mundo a que tengan malos pensamientos de Dios desde que la mayoría de la gente no tiene ningún buen sentido de la administración de Dios del mundo. Hay muchos hoy que están juzgando el concepto de Dios de la justicia debido a declaraciones que vienen de pecadores ultrajosos que todavía no han sido derrotados con el juicio veloz que se merecen, por aquellos que son hábiles en la Palabra.

En el décimotercer capítulo del libro de Romanos, Pablo por el Espíritu de Dios, nos cuenta de la furia veloz, justa e indignada de los ministros verdaderos del evangelio hacia los que continuamente hacen mal y rehusan recibir reprimenda o reproche. "Porque los magistrados [los ministros de Dios] no están para infundir temor al que hace el bien, sino al malo...porque es servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada [la Palabra], pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo."103

En la Biblia, Jesús advierte constantemente acerca de lo que Su ira le hará permanentemente en el día del juicio a Satanás, los ángeles de Satanás, y a todos los que siguen a Satanás.104 Tenga fe en ésto. Es Su Palabra, nuestro único espejo real para contemplar el verdadero carácter de Dios. El Cordero de Dios le advierte a todos aquéllos que son pasivos acerca del pecado y la corrupción que tienen que cambiar sus maneras, volviéndose tan fervorosamente airados con Satanás, el pecado y la sociedad anárquica del sistema mundial, que hacen guerra contra Satanás pidiéndole a Dios que remedie esas cosas que están tanto en ellos y en el mundo que los rodea.105

Tenemos que tener fe en Dios para recibir la vida de Dios, que es Cristo por el Espíritu, de modo que El pueda dirigir cada uno de nuestros movimientos, cada una de nuestras palabras, y cada una de nuestra diligencia, así como cada una de nuestras oraciones al Uno quien oye y contesta. Este es Cristo por el Espíritu logrando el propósito de Dios en los Cristianos. Si no tenemos esta fe, pasaremos una eternidad en el Infierno con Satanás quien habremos temido más de lo que tememos a Dios.106 Cristo le demostrará al malvado a quién deberían haber temido cuando estén orando que los montes y las peñas caigan sobre ellos y los escondan "del rostro de Aquel que está sentado sobre el trono, y de LA IRA DEL CORDERO."107 Entonces tendrán fe; sin embargo, será demasiado tarde.

El movimiento más grande de odio hoy se está dirigiendo desde el sistema mundial de Satanás en contra del verdadero Cristianismo y en contra de la fe en Cristo. Hay solamente dos señores. Uno es Dios, y el otro es Satanás. Jesús nos dice, "Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro."108 Aquí Cristo ordena odio contra el pecado, Satanás y todo lo que él es.

La escritura, "No te entremetas con el iracundo, ni te acompañes con el hombre de enojos"109 no se aplicaría a un líder Cristiano que está enojado con el pecado, con Satanás, con la desobediencia en la iglesia, o la corrupción en el mundo. De hecho, Dios le ordena que tenga este odio.110 Esto es porque Dios le ha ordenado y le ha autorizado a predicar, a reprender, a regañar, a ser celoso, y a estar enojado con el pecado, con Satanás, y con toda anarquía.111

Dios no cambia Su definición de pecado en el Nuevo Testamento de la del Antiguo Testamento.112 Tenga fe en esta verdad también. De hecho, El amplifica Su odio por el pecado en el Nuevo Testamento.113 Lea sobre todas las otras plagas maravillosas que El derramará en Su ira contra los pecadores no arrepentidos en este mundo.114 Pero no podemos hacer ninguna amistad con un hombre que está enojado con la Palabra de Dios, con la reprensión y el regaño de la Palabra de Dios.115 El hacer amistad con un hombre que está enfurecido con la Palabra de Dios y Dios Mismo es igual que amar a Satanás. Usted no sólo aprendería sus maneras aborrecibles contra Dios, pero también aprendería las maneras que él tiene de odiar la Palabra de Dios y a los que predican y enseñan la Palabra.116

Tenga fe en estas verdades y viva.117 Si algo es dulce, Dios no lo etiquetará amargo. Si es bueno, Dios no lo llamará malo, amargo, o pecaminoso, ya sea que esté en el Antiguo Testamento o el Nuevo Testamento. El arrojará una maldición lamentable sobre la casa de cualquier persona que lo haga.118 "¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!"119 Nunca piense que usted encontrará algo bueno en cualquier cosa que Dios llama pecaminoso. Nunca piense que hay algo malo en aquéllo que Dios ha hecho en ley moral. Lo que El dijo que es moral en el Antiguo Testamento es moral en el Nuevo también.120

La intención de Dios era que el hombre manejara Su poder, que reinara para El, y controlara Su creación entera para El.121 Adán se alejó de este propósito.122 Ahora se ha vertido a Sí Mismo, Su vida verdadera, y Su verdadero ser dentro de nosotros que lo hemos aceptado por fe.123

El será lo mismo en los hombres y las mujeres fieles que permiten que El reine en ellos como lo fue en Su propio cuerpo humano, el primer cuerpo humano sin pecado que jamás haya existido en la tierra.124 Porque Cristo estuvo sin pecado en Su cuerpo humano, El también estará sin pecado en el suyo si realmente está salvo.125 Aquel cuerpo, compuesto de muchos miembros, tiene que ser tan santo como lo es El y continúa siendo eternamente.126 Ira hacia Satanás, el pecado, y el mundo es una gran parte de la santidad de Dios.127 El cuerpo de Cristo toma poder y dominio sobre el pecado, Satanás, y la anarquía de la sociedad satánica del mundo. Esto es logrado al nosotros permitir a Cristo en nuestros cuerpos para demostrar Su odio e ira. Esto es totalmente diferente a aquéllos que predican doctrinas malignas y falsas que dicen que podemos entrar al Cielo aunque pequemos cuando la Biblia declara claramente que nada que tiene mancha o defecto [pecado] en él entrará al reino de Dios.128 Toda la gente, especialmente los Cristianos, tienen que tener fe en este hecho. Si no, estarán escandalizados con su condena en el juicio.129

Hebreos 11:33 demuestra cómo Samuel y los profetas, por fe, conquistaron reinos. Esto no fue intentado solamente para Samuel y los profetas. También se dirige para que cada miembro del cuerpo de Cristo lo logre. Tenemos que hacer uso de la fe para cada uno de los propósitos de Dios.130 La conquista de reinos en el Nuevo Testamento es lo mismo que en el Antiguo. Está escrito, "Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de Su Cristo; y El reinará por los siglos de los siglos."131 Esto es logrado por ésos que llevan el escudo de la fe, la clase de fe que apaga cada clase de dardo ardiente de tentación seductora de Satanás.132 Esto está sucediendo porque la Palabra dice que sucedería. Continuará sucediendo porque es verdad. La Palabra siempre ha sido y siempre será cumplida.133 El reino se conquista por gente de fe que son unos con Dios en Cristo.134

Hombres santos como Noé, Moisés, Josúe, Gedeón, Samuel, Job, y Daniel, aquéllos que creyeron a Dios e hicieron todo lo que El ordenaba, nunca fueron vencidos y nunca oprimidos por Satanás.135 Esto fue debido a su fe. Solamente aquéllos que fueron engañados por el diablo fueron vencidos, aquéllos que con su fe débil permitieron que Satanás los sacara de la mano de Dios así como el Rey David tomó la lanza de Saúl mientras que estaba en la zanja.136 No sólo estaba Saúl perdido, sino Acán, la mayoría de Israel, de Judas, Ananias, de Safira y la iglesia apóstata de hoy también fueron derrotados.137 La sojuzgación de reinos significa la conquista de ellos, trayéndolos bajo sometimiento a Dios por la fe en Su Palabra la cual los libra de su sometimiento al diablo.138 El Señor continúa enviando a Sus siervos al mundo con este mismo propósito.139 Dios tuvo que enviarse a Sí Mismo al mundo como Cristo para morir, resucitar, ascender, y verterse a Sí Mismo en nosotros para que podamos ser uno con El como Cristo lo era en la tierra con el Padre.140 El hizo esto para que no sólo comenzara Su ministerio de redención pero que continuara creciendo y prosperando hasta el fin.141 Como Cristo está en nosotros, somos capaces de hacer Sus obras, sometiendo la tierra entera a El y estableciendo la tierra como el reino de Dios.142

El exhibió Su furia e ira intolerante hacia el pecado, Satanás, y la corrupción en el mundo hace dos mil años, y está haciendo esto en el presente desde el Cielo por Su evangelio a través de Su gente en la tierra.143 El será tan veloz en el juicio hoy en nosotros contra estas cosas como lo fue entonces.144 El libro final de la Biblia, el libro del Apocalipsis, declara que ningún fornicador, asesino, hechicero, inmoral, idólatra, o mentiroso entrará al reino del Cielo. Todos ellos "tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda."145 Usted tiene que tener fe en la Palabra de Dios, Sus juicios, para creer que necesita arrepentirse.

El sistema satánico del mundo y su boca, los medios de comunicación, gastan millones de dólares fabricando propaganda que básicamente dice que no debemos estar enojados con nada, menos con Dios, la Palabra de Dios, y los Cristianos, aquéllos que dicen la verdad de Satanás y su sistema mundial.146 Dicen que el mundo no debe estar enojado con el pecado, Satanás, y la corrupción, sino que en vez debería volverse satánico, pecaminoso, y corrupto ya que ésta es nuestra naturaleza original.147 Verdad, es nuestra naturaleza, pero Cristo sana al pecador más vil, y con Su vida en nosotros El puede vivir una vida sin pecado por nosotros en nosotros.148 El vivirá Su vida perfecta en nosotros, libre de pecado, de Satanás, y de la corrupción, si por fe lo dejamos.149 Eso, no se lo dicen. Usted puede ver lo falsa que es su doctrina en comparación a la verdad de Dios. Casi todo el mundo ha aceptado esta doctrina satánica en vez de recibir la Palabra y la vida de Dios en su espíritu por fe.

No debemos temer a ninguna persona excepto a Dios, y no debemos escuchar o servirle a cualquier persona excepto a Dios.150¿Por qué? Porque Dios lo dijo. El también dijo que pasaremos la eternidad en los tormentos del Infierno si lo hacemos.151 Por fe usted debe de creerlo si desea ser salvo.152 Jesús dijo, "No temáis a los que matan el cuerpo, y después nada más pueden hacer. Pero Os enseñaré a quién debéis temer: Temed a Aquel que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el Infierno; sí, Os digo, a Este temed [Dios]."153
No hay duda de nuestra victoria cuando clamamos a Dios en oración sea para nuestra defensa o pedirle que El luche contra Satanás, el pecado, y la corrupción en el mundo.154 Por lo tanto, pídale a Dios en oración que le ayude a luchar contra los elementos del mundo. Ambos nuestro acto piadoso de fe y nuestra obediencia a Dios realmente trabajan.155 Por lo tanto, presente su caso ante Dios en oración y pídale que envíe ayuda del Cielo a su terreno. Debemos advertirle al mundo como lo hicieron Ezequiel, Jeremías, Isaías, y los otros profetas.156 Y como Jesús dijo, por la fe en la Palabra de Cristo debemos ir "por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura."157

"LA COSA PREFERIDA DE NUESTRO SEÑOR ES FE." Nuestra fe es la única cosa que Cristo quiere ver en nosotros.158 Será la única cosa que El buscará en Su segunda venida a la tierra.159 La fe hace a cada Cristiano esperar el honor de Dios directamente oyendo y contestando sus oraciones. De hecho, en el mundo de hoy es uno de los hechos supremos de fe mostrar nuestra ira y nuestro odio tanto contra el pecado como la corrupción causados en el mundo por el príncipe de la hostilidad, Satanás. Al tener suficiente fe para hacer todo lo que Cristo ordena, podemos poner nuestras almas sobre Dios, el Cristo, sabiendo que El es más que suficiente para hacernos totalmente felices en este mundo tan miserable.160 El honor o el aplauso que los hijos de la desobediencia reciben por sus pecados los hace pensionistas del diablo mismo, que es el enemigo más grande que Dios tiene.

Aquéllos del mundo que se rebelan contra Dios, Su Palabra, y Sus hijos son los hijos del orgullo,161 aquéllos que dejan la fe y toman la razón como su guía.162 Vemos cómo aquéllos que hacen estas cosas están ahogados en los errores condenables demasiado numerosos para mencionar en esta literatura. Los errores más peligrosos, que son causados torciendo las escrituras, se han originado por grupos de interés especial, incluyendo los Cristianos falsos y apóstatas, los anticristos.163 Unos de éstos, en los días de Jesús, eran los saduceos, que no creyeron en el poder de Dios para que les diera la fuerza para mantenerse firme en un mundo pervertido. Hoy día, estos mismos tipos de individuos niegan el bautismo del Espíritu Santo, que es el cumplimiento mismo de la promesa de Cristo.164 Es la única cosa que le da a los Cristianos el poder de Cristo para que puedan mantenerse firmes en Su vida en este mundo en estos últimos días. Los saduceos tampoco creían que Cristo podía resucitar a los muertos.165 Los argumentos de los saduceos para negar a Cristo, quien es la resurrección de los muertos, eran su razonamiento carnal en vez de la fe en Dios.166 Tenían la Biblia, poseían el libro de Moisés para la Palabra de Dios, aun así negaron a Cristo la resurrección mencionada ahí. Su razonamiento carnal se rió de ésto, haciendo que nuestro Señor y Salvador les conteste claramente diciendo "Erráis, ignorando las Escrituras y el poder de Dios."167

Si usted es Cristiano y ha oído mentiras calumniosas con respecto a otros Cristianos, y quizás las creyó porque las leyó en un periódico o una revista, las vio en un programa de la televisión, o las oyó de algún "ministro" en una iglesia, usted puede estar en peligro de perder su alma. Este es el trabajo de un ministro apóstata de Cristo, una persona que habla mal de los Cristianos simplemente porque él mismo no es Cristiano. Por lo tanto, él tiene la clase incorrecta de ira y de odio, que significa que él tiene ira y odio hacia Dios, hacia la Palabra de Dios, y hacia los que predican la Palabra de Dios. La Palabra de Dios cruza la propia voluntad y las lujurias de este hombre, por lo tanto, él odia oírla.

Otra causa de la ira hacia los Cristianos deriva del celo, el mismo celo que tenía el malvado Caín por Abel. Esto no era sólo porque al que Caín calumnió tenía una fe, un conocimiento, y un amor más profundo para guardar los mandamientos de Dios, sino también porque Abel, por su fe, tenía la bendición de Dios sobre él.168 Dios le advierte seriamente a estos corruptos quienes echan calumnias falsas sobre los nombres de otros a espaldas de los inocentes. El los maldecirá y los destruirá. Al hacer ésto El nos enseña a todos a que lo temamos. "No toquéis...a Mis ungidos, ni hagáis mal a Mis profetas [sea verbal o físico]."169 Dios dice, "Mía es la venganza, Yo pagaré."170

Un ojo espiritual enfermo o destemplado ve todo como si estuviese enfermo y destemplado, incluso cuando está bien. Esto es porque el ojo es malvado.171 Una mente ya fijada contra los verdaderos hombres y mujeres de Dios está lista para imponer su propio sentido retorcido de juicio ante ellos. Este razonamiento demente contra Dios, contra la Palabra de Dios y Su gente, en quien El vive y obra, pierde toda la racionalidad cuando ponen la verdad contra su creencia abrumadora de sus propias opiniones y pensamientos.

Demasiados han leído las escrituras no tanto para estar informados de ellas como para confirmar lo que ellos ya han decidido con su propio prejuicio satánico y mente perjudicada. Han elegido las ideas plantadas en sus cabezas igualmente como Sansón eligió a su esposa filistea, simplemente porque les satisface hacerlo.172 Entonces malvadamente vienen de esta manera falsa a la Palabra para obtener el consentimiento de la escritura para su travesura.

Cuando el hijo de Dios vino a la tierra y reveló al Padre, fue para que la comunicación con Dios y el aseguramiento de Su poder pudieran estar más claros para nosotros y les pertenecieran a cada hijo de Dios.173 Cuando El fue ensalzado al trono de gloria, fue para que primeramente pudiera enviar Su vida inmortal en nuestros corazones, luego seguirlo con el bautismo del Espíritu Santo para darnos el poder para mantenernos firme como el cuerpo de Cristo en la tierra en estos últimos días.174 La trinidad Deidad tiene su propia vida bendecida en el Cielo para mantener en nosotros, dándonos en poder divino la vida bendecida del compañerismo con Dios.175 Este tiene que ser el hito principal del nuevo pacto que cada miembro del cuerpo de Cristo tiene que caminar en comunión personal con Dios adentro, a través de Cristo Jesús, el Consolador del Cristiano.176 "Ninguno enseñará a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce al Señor; porque todos me conocerán [dice el Señor, todos los creyentes, no aquéllos que lo rechazan], desde el menor hasta el mayor de ellos [en el cuerpo de Cristo]. Porque seré propicio a sus injusticias, y nunca más me acordaré de sus pecados y de sus [antiguas] iniquidades."177 Esto es porque han hecho lo que El ordenó después de la salvación, no pecar más.178

De nuevo, Jesús dijo, "Nadie viene al Padre, sino por Mí."179 Esto significa que nadie más puede salvar su alma sino Jesús. La fe ve esta verdad. Venga al Padre, por fe, para su salvación, su vida eterna con poder por la vida de Dios entrando en su espíritu a través de Cristo ahora mismo diciendo esta oración:

Oración

Mi Señor y mi Dios, ten misericordia de mi alma pecadora.1 Yo creo que Jesucristo es el Hijo del Dios Viviente.2 Creo que Él murió en la cruz y derramó Su preciosa sangre por el perdón de todos mis pecados. 3 Creo que Dios resucitó a Jesús de entre los muertos por el poder del Espíritu Santo4 y que Él está sentado a la mano derecha de Dios en este momento, escuchando mi confesión de pecado y esta oración. 5 Abro la puerta de mi corazón, y Te invito en mi corazón Señor Jesús. 6 Lava todos mis pecados sucios en la preciosa sangre que Tú derramaste por mí en la cruz del Calvario. 7 Tú no me rechazarás, Señor Jesús; Tú perdonarás mis pecados y salvarás mi alma. Lo sé porque Tu Palabra, así lo dice. 8 Tu Palabra dice que Tú no rechazarás a nadie, y eso me incluye a mí.9 Por eso, sé que me has escuchado, sé que me has contestado, y sé que soy salvo.Por eso, sé que me has escuchado, sé que me has contestado, y sé que soy salvo.10 Y Te doy gracias, Señor Jesús, por salvar mi alma, y Te mostraré mi agradecimiento haciendo como Tú mandas y no pecar más. 11

Usted acaba de completar el primer paso en una serie de cinco pasos que se requieren para recibir la salvación. Su segundo paso es negarse a sí mismo y aceptar la cruz cada día con el propósito de mortificarse, es decir, para darle muerte a su propia voluntad, a su ser autosuficiente, y al mundo con todos sus deseos. Todos estos tienen que ser bautizados en la muerte de Cristo. El tercer paso es su resurrección de la vida satánica de Adán a la vida libre de pecados de Cristo. El cuarto paso es su ascensión a una posición de autoridad para reinar por Dios en la tierra, y el quinto paso es reinar por Dios en la tierra hasta el fin con el propósito de traer el reino del Cielo a la tierra. Usted tiene que aprender la Palabra de Dios, luego someterse y hacer lo que la Palabra dice, para que la Iglesia y el mundo puedan ver pruebas de su sumisión a la Palabra de Dios, Su orden, y Su autoridad en usted y por usted.
Alabado sea el Señor. Que Dios lo recompense abundantemente.

Pastor Mundial Tony Alamo

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© Propiedad literaria mayo, 1998, Todo derecho reservado Pastor Mundial Tony Alamo ® Registrado mayo, 1998
Tony Alamo Christian Ministries is a division of Music Square Church, Inc.

Notas del "LA COSA PREFERIDA DE NUESTRO SEÑOR ": vuelva arriba

1 Dn. 7:20-21, Ap. 13:7 vuelva

2 Ap. 13:4-7 vuelva

3 2 Ts. 2:2-3 vuelva

4 Mt. 24:24, Ef. 6:11-18, 1 P. 5:8, Jud. 6, Ap. 12:9 vuelva

5 Jn. 12:43, 2 P. 2:4, Jud. 6, Ap. 21:8 vuelva

6 Nm. 15:31, 2 Cr. 15:2, Esd. 8:22, Sal. 73:27, Ez. 18:26, 33:12-13, Lc. 9:62, 11:24-26, 17:32, Jn. 15:6, 1 Co. 10:1-12, 2 Ti. 2:12, He. 6:4-8, 10:26-29, 2 P. 2:20-21, 2 Jn. 9, Ap. 3:2-3, 13:7 vuelva

7 Ex. 14:21-31, Mt. 7:23, 25:31-33, Jn. 10:3-4, 10, 16, 27, 16:33, 1 Co. 15:57, 1 Jn. 3:10 vuelva

8 1 Co. 12:12, Ef. 2:10, 2 Ti. 1:9, Tit. 2:14 vuelva

9 Ef. 1:20-23, 4:15-16, 5:23, Ro. 8:37, Col. 1:18 vuelva

10 Dn. 12:13, Jn. 11:25, 16:33, Ro. 6:9, 8:37, 1 Co. 15:52, 55-57, 1 Jn. 4:4, 5:4, Ap. 1:18, 11:15, 21:3-4, 22:5 vuelva

11 Ap. 6:11 vuelva

12 Ro. 8:37, 1 Co. 15:57, 1 Jn. 5:4vuelva

13 Mt. 10:28, Lc. 1:50, 2 Co. 7:1, Fil. 2:12, He. 12:28, 1 P. 1:17-21 vuelva

14 Pr. 28:1 vuelva

15 Lv. 26:14-15, 30, Dt. 28:63, Job 34:26-27, Sal. 5:5-6, 7:11, 11:5, 106:39-40, He. 6:4-8 vuelva

16 2 Ts. 2:10-12vuelva

17 Sal. 118:22, Is. 28:16, Lc. 20:17, Ef. 2:20, 1 P. 2:6-10 vuelva

18 1 Co. 3:16, 2 Co. 6:16, Ef. 2:22 vuelva

19 1 Jn. 3:9 vuelva

20 1 Jn. 3:9 vuelva

21 Ap. 17:14 vuelva

22 Ro. 1:16 vuelva

23 1 Jn. 2:15 vuelva

24 Ef. 6:17, He. 4:12 vuelva

25 2 Co. 10:4 vuelva

26 Sal. 36:1-4 vuelva

27 Tit. 2:14-15, Ap. 3:15-16, 19 vuelva

28 Sal. 97:10, 101:3, 139:21-22, Pr. 8:13, Am. 5:15, Jn. 10:4, 27, Ro. 12:9, Ef. 4:27, 6:11-12, 1 Ti. 1:18, 6:12, 2 Ti. 2:3, Stg. 4:7 vuelva

29 Lc. 8:12, Ef. 2:8 vuelva

30 Mr. 16:16 vuelva

31 Sal. 97:10 vuelva

32 He. 1:9 vuelva

33 Mr. 16:16 vuelva

34 Ec. 7:9 vuelva

35 Ef. 4:26 vuelva

36 Pr. 25:2 vuelva

37 Jn. 1:1, 14 vuelva

38 Ef. 6:16 vuelva

39 Sal. 14:1 vuelva

40 Ec. 7:9 vuelva

41 Sal. 97:10, Pr. 24:20, Jn. 10:27, Ro. 13:4, He. 11:1, 38, 1 Co. 5:3, 13, Ap. 2:10, 5:12, 6:10 vuelva

42 Am. 3:3, Ro. 8:16 vuelva

43 Dt. 29:20-28, 1 S. 2:10, Sal. 7:11, Pr. 8:13, Jer. 44:2-6, Am. 5:15, Nah. 1:2, Ro. 1:18, Ef. 5:5-7, He. 3:10-12, Ap. 6:12-17vuelva

44 Mt. 13:24-30, 36-43, 47-50, 21:33-44, 22:1-13, 25:14-15, 18-19, 24-33, 41-46, Jn. 2:13-17, 15:1-2, 6vuelva

45 Mt. 23:33 vuelva

46 Mt. 23:15 vuelva

47 Mt. 23:16 vuelva

48 Mt. 23:17 vuelva

49 Jn. 8:23 vuelva

50 Jn. 8:44 vuelva

51 Mt. 25:45 vuelva

52 Mt. 25:41 vuelva

53 Mt. 25:14-15 vuelva

54 Mt. 25:18 vuelva

55 1 Ti. 5:20, 2 Ti. 4:2-5, Tit. 2:14-15 veulva

56 Mt. 25:28-30 vuelva

57 Mt. 25:30 vuelva

58 Mt. 22:8-13 vuelva

59 Mt. 7:18-23 vuelva

60 Mt. 22:13 vuelva

61 Jn. 10:1-2, 7-9 vuelva

62 Jn. 3:16-17, 6:35, 39-40, 47-55, 10:1-2, 7-11, 15-17, 14:6, Hch. 4:10-12 vuelva

63 Jn. 14:6 vuelva

64 Is. 5:20, Ec. 5:8 vuelva

65 Ex. 15:6-8, Job 21:17-21, Sal. 2:4-5, Jn. 9:38, 19:30, Ro. 1:18, 2:2-3 vuelva

66 Mr. 5:2-13 vuelva

67 Mt. 8:28-32, 9:32-33, 12:22, 15:22-28, 17:14-18, Mr. 1:23-27, 5:2-20, Lc. 4:40-41, 8:2-3 vuelva

68 2 Co. 11:14-15 vuelva

69 Mt. 3:12, 13:30, 40-42, 49-50, 2 P. 2:1-15, Ap. 14:9-11, 19:1-3 vuelva

70 Jn. 14:15, 15:10, 1 Jn. 5:2-3, 2 Jn. 1:6 vuelva

71 Lc. 4:34-35 vuelva

72 Pr. 26:11, 2 P. 2:22 vuelva

73 2 P. 2:22 vuelva

74 1 S. 15:23 vuelva

75 Mt. 23:33, Lc. 3:7 vuelva

76 Mt. 23:27-28, Ro. 3:13 vuelva

77 Jer. 25:31-33, Sof. 1:14-18 vuelva

78 Dt. 7:12, 15, 28:58-61 vuelva

79 Is. 1:4-6, 2 Ti. 2:17, Ap. 16:1, 10-11 vuelva

80 Lv. 26:14-33, Dt. 28:15-67 vuelva

81 2 Co. 5:11 vuelva

82 Is. 40:28, 1 P. 4:19 vuelva

83 Dt. 32:39 vuelva

84 Mt. 4:4 vuelva

85 Sal. 5:4-5, Ro. 1:24-25, Ap. 2:6 vuelva

86 Mt. 3:7, Gá. 1:7-9, 2 P. cap. 2 vuelva

87 Is. 30:33 vuelva

88 Ap. 2:6 vuelva

89 1 Jn. 3:4 vuelva

90 Lc. 7:50, 18:42, Ef. 2:8 vuelva

91 Sal. 11:5, Pr. 6:16-19, Mt. 5:27-30, 8:11-12, 10:28, 13:41-42, 49-50, 22:12-13, 24:48-51, Lc. 10:12-15, 16:15-31, Ap. 1:18 vuelva

92 Hch. 8:37, 16:31 vuelva

93 1 Ti. 6:10 vuelva

94 Jn. 2:13-17 vuelva

95 Is. 2:19-21 vuelva

96 Is. 24:19-20 vuelva

97 Ap. 16:20 vuelva

98 Ap. 16:21 vuelva

99 Ap. 8:7-9 vuelva

100 Sal. 11:6, Ap. cap. 9, 15:1, cap. 16 vuelva

101 Ro. 14:1 102 vuelva

102 Ti. 4:2, 5vuelva

103 Ro. 13:3-4 vuelva

104 Mt.8:11-12, 10:28, 22:12-14, 23:15, 33, 25:29-30, 41-46, Mr. 16:16, Ap. 2:20-23 vuelva

105 Dt. 4:39-40, 5:29, Ez. 9:4, Am. 5:15 vuelva

106 Mt. 10:28 vuelva

107 Ap. 6:16 vuelva

108 Mt. 6:24 vuelva

109 Pr. 22:24-25 vuelva

110 Sal. 97:10, Pr. 8:13, Am. 5:15, Ro. 13:3-4 vuelva

111 Lc. 17:3, Ro. 13:3-4, 1 Ti. 5:20, 2 Ti. 4:2, Tit. 1:13, 2:11-15, Ap. 3:19 vuelva

112 Sal. 7:11, 33:11, Ec. 3:14, 7:13, Mt. 5:17, He. 13:8 vuelva

113 Mt. 5:17-22, 27-32 vuelva

114 Ap. 8:7-13, ch. 9, 11:3-6, 13, 14:9-11, 19-20, 16:1-12, 18-21, 17:16-18, 18:8-24 vuelva

115 Pr. 22:24 vuelva

116 Col. 2:8, 1 Ts. 5:21-22, 1 Ti. 5:22, 2 Jn. 1:9-11 vuelva

117 Ez. 33:11 vuelva

118 Pr. 17:13, 15, Mi. 3:1-4, 2 P. 2:1-9 vuelva

119 Is. 5:20 vuelva

120 Nm. 23:19, Mal. 3:6, Mt. 5:17-18, He. 13:8 vuelva

121 Gn. 1:27-28, 3:16, 9:1-3 vuelva

122 Gn. 3:1-6, 17-24 vuelva

123 Jn. 14:15-21, 16:7, Ro. 3:21-26, 5:1-2 vuelva

124 2 Co. 5:21, He. 4:15, 7:22-28 vuelva

125 Ef. 5:25-30, Col. 1:21-23, He. 4:15, 1 Jn. 3:9-10, 5:18vuelva

126 Ro. 12:4-5, 1 Co. 12:12-14, 18-20, He. 12:14, 1 P. 1:15-16 vuelva

127 Sal. 97:10, Ro. 12:9, 1 Co. 3:17, Ef. 4:26, 5:11 vuelva

128 Mt. 7:21-23, Ef. 5:25-27, 2 P. 3:11-14, 1 Jn. 3:8-10 vuelva

129 2 Co. 5:10 vuelva

130 2 Co. 5:7, Col. 2:6-7 vuelva

131 Ap. 11:15 vuelva

132 Ef. 6:16 vuelva

133 Is. 55:10-11, Sal. 119:89-91 vuelva

134 Jn. 15:4-8, 17:8, 18-23 vuelva

135 He. 11:7-39, 1 Jn. 5:4 vuelva

136 1 S. 26:7-12 vuelva

137 1 S. 28:3-19, Jos. 7:1, 11-25, Mt. 27:3-5, Hch. 5:1-10, 2 Ts. 2:3 vuelva

138 Jn. 8:34-36 vuelva

139 Lc. 19:13, Jn. 15:8, 17:18 vuelva

140 Ef. 1:4-11, 2:13-22 vuelva

141 Jn. 14:12, 1 Co. 15:57-58 vuelva

142 Lc. 19:12-13, Jn. 15:7-8, Ef. 1:9-10, 2:10, 3:5-7, Tit. 2:14 vuelva

143 2 R. 22:17, Sal. 7:11, 106:40-42, Pr. 8:13, Is. 59:17-18, Mic. 5:15, Ro. 13:1-4, 2 Ts. 1:7-10, Jud. 5-7 vuelva

144 Nm. 11:33-34, 16:23-35, 25:3-13, Dt. 11:16-17, Jl. 2:11, Ro. 12:19 vuelva

145 Ap. 21:8, 22:15 vuelva

146 Is. 5:20, Gá. 4:16, Ap. 3:15-16 vuelva

147 Ef. 4:14, 2 Ti. 3:1-4, 4:3-4, 2 P. 2:1-2 vuelva

148 Gá. 2:20, Fil. 4:13 vuelva

149 Gá. 2:20, 1 Jn. 5:4 vuelva

150 Pr. 1:10-16 vuelva

151 Ap. 21:8 vuelva

152 Ro. 1:16, 10:10-13, Ef. 1:13 vuelva

153 Lc. 12:4-5 vuelva

154 Jer. 33:3, Ez. 9:4, 1 Co. 15:57, 1 P. 3:12 vuelva

155 Mt. 7:7-11, 21:22, Jn. 14:13-14, 1 Jn. 3:22 vuelva

156 Ez. 3:17-21 vuelva

157 Mr. 16:15 vuelva

158 Hab. 2:4, Mt. 9:22, 21:21-22, Jn. 11:25-26, Hch 13:48, Ro. 1:17, 4:3, 5:1, 11:20, 2 Co. 1:24 vuelva

159 Lc. 7:50, 18:8, 42, Ef. 2:8, He. ch. 11 vuelva

160 Dt. 33:29, Sal. 128:1-2, Is. 12:2 vuelva

161 Job 35:12-13, Is. 14:10-15, Mt. 27:22-31, Jn. 15:19-21, Hch. 9:1-2, Ap. 12:4-17 vuelva

162 Pr. 3:5, Mr. 14:10-11, Jn. 6:66, Hch. 5:1-10, He. 6:4-6, 2 P. 2:20-22 vuelva

163 1 Jn. 2:18-19 vuelva

164 Hch. 2:38-39 vuelva

165 Hch. 23:6-8 vuelva

166 Jn. 11:25 vuelva

167 Mt. 22:29 vuelva

168 Gn. 4:3-8 vuelva

169 1 Cr. 16:22, Sal. 105:15 vuelva

170 Ro. 12:19, Dt. 32:41, Is. 63:4, Ez. 25:14 vuelva

171 Mt. 6:22-23 vuelva

172 Jue. 14:3 vuelva

173 Jn. 17:8-26, Ef. 2:13-19 vuelva

174 Jn. 16:7, Hch. 1:4-8, 1 Jn. 4:4 vuelva

175 2 Co. 6:16-18, Col. 1:20-22, Ap. 3:20 vuelva

176 Jn. 14:16-21 vuelva

177 He. 8:11 vuelva

178 Jn. 5:14, 8:11 vuelva

179 Jn. 14:6vuelva

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Notas de la Oración:

1. Sal 51:5, Ro. 3:10-12, 23 vuelva

2. Mt. 26:63-64, 27:54, Lc. 1:30-33, Jn. 9:35-37, Ro. 1:3-4 vuelva

3. Hch. 4:12, 20:28, Ro. 3:25, 1 Jn. 1:7, Ap. 5:9 vuelva

4. Sal. 16:9-10, Mt. 28:5-7, Mr. 16:9, Jn. 2:19, 21, 10:17-18, 11:25, Hch. 2:24, 3:15, Ro. 8:11, 1 Co. 15:3-6 vuelva

5. Lc. 22:69, Hch. 2:25-36, He. 10:12-13 vuelva

6. Ro. 8:11, 1 Co. 3:16, Ap. 3:20 vuelva

7. Ef. 2:13-22, He. 9:22, 13:12, 20-21, 1 Jn. 1:7, Ap. 1:5, 7:14 Ef. 2:13-22, He. 9:22, 13:12, 20-21, 1 Jn. 1:7, Ap. 1:5, 7:14 vuelva

8. Mt. 26:28, Hch. 2:21, 4:12, Ef. 1:7, Col. 1:14 vuelva

9. Ro. 10:13, Stg. 4:2-3 vuelva

10. He. 11:6 vuelva

11. Jn. 8:11, 1 Co. 15:10, Ap. 7:14, 22:14 vuelva

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